/ viernes 22 de febrero de 2019

Al bat | Dodgers y Don Newcombe


— 22 de febrero: Día del Cronista Deportivo en México, una significativa fecha instituida en 1999 por la Femecrode cuando celebró un congreso nacional en San Luis Potosí. ¡Muchas felicidades, colegas!


Honor a quien honor merece; en el tiempo y la eternidad.

Y verá que siempre le llamaron con cariño “Big Newk”.

¿De quién se trata…?

Bien.

La noticia del todo grata es que los Dodgers honrarán el legado del gran lanzador Don Newcombe, quien falleció el martes a los 92 años, usando un parche conmemorativo en sus uniformes con el número “36”.

Newcombe, quien junto a Jackie Robinson y Roy Campanella ayudó a abrirles el camino a los jugadores afroamericanos hacia las Grandes Ligas, jugó ocho de sus 10 temporadas con los Dodgers, primero en Brooklyn y luego en Los Ángeles.

El equipo confirmó que falleció la mañana del martes una prolongada enfermedad.

Newcombe, como su compañero de los Dodgers Jackie Robinson, fue contratado por Branch Rickey de las Ligas Negras y acabó teniendo un impacto enorme en Las Mayores.

De hecho, Don había generado enormes expectativas en las sucursales de la organización, que ya gozaba entonces de los éxitos de Jackie Robinson, el primer negro en las Ligas Mayores en el siglo XX.

Siempre se distinguió por ser “un caballo” del pitcheo.

En su debut, 1949, logró 17-8, una marca que le permitió ganar el premio Novato del Año. Fue el primer negro en alcanzar ese trofeo.

A la siguiente campaña, logró, 19-7 y para su tercera incursión en Brooklyn, apantalló con 20-9.

Para las siguientes dos temporadas los Dodgers no contaron con él ya que se fue a cumplir con el servicio militar, pero regresó en 1954 para lograr una marca de 9-8.

Luego en 1955 tuvo 20-5, el año en que por fin —después de varios clásicos enfrentándose— le ganaron en siete grandes partidos la Serie Mundial a los NYY.

Y, en 1956, quihúbole: 27-7 y 3.06 de efectividad, lo cual le hizo ganar el trofeo de JMV y el Cy Young, que por entonces sólo era otorgado a un pitcher de ambas ligas. Era la primera que se veía ese doble truco.

Estaba en el pináculo de su formidable carrera ligamayorista.

Ese año del 56 Dodgers volvió al clásico otoñal, pero esa vez fue lo contrario: cayeron en siete ante los Mulos del Bronx.

Si recuerda, en el quinto partido de aquella serie, Don Larsen les tiró juego perfecto (8 de abril), el único hasta hoy registrado en la historia de esos clásico.

Don Newcombe también fue seleccionado cuatro veces al Juego de Estrellas.

Fue un lanzador que intimidaba a los bateadores desde el montículo por su estatura de 1.95 metros (6.4 pies) y corpulenta complexión física. Era alguien que tiraba ceñido al cuerpo al que imprudentemente se atrevía a batear muy pegado al plato.

Volviendo al homenaje:

Los Dodgers ya habían usado parches conmemorativos en el pasado para honrar la memoria de ex jugadores como Jim Gilliam (1978), Tim Crews (1993), Don Drysdale (1993), Roy Campanella (1993), Pee Wee Reese (1999) y Duke Snider (2011).

La franquicia también recordará a Newcombe durante una ceremonia antes del encuentro el 27 de abril, cuando lo exaltarán como Leyenda de los Dodgers y se entregará un bobblehead conmemorativo.


Por supuesto, le tengo más datos históricos de Newcombe… ya se los compartiré si no es que mañana, a la primera oportunidad. Un grande del pitcheo en la historia del mejor beisbol del mundo. Sí señor.


— 22 de febrero: Día del Cronista Deportivo en México, una significativa fecha instituida en 1999 por la Femecrode cuando celebró un congreso nacional en San Luis Potosí. ¡Muchas felicidades, colegas!


Honor a quien honor merece; en el tiempo y la eternidad.

Y verá que siempre le llamaron con cariño “Big Newk”.

¿De quién se trata…?

Bien.

La noticia del todo grata es que los Dodgers honrarán el legado del gran lanzador Don Newcombe, quien falleció el martes a los 92 años, usando un parche conmemorativo en sus uniformes con el número “36”.

Newcombe, quien junto a Jackie Robinson y Roy Campanella ayudó a abrirles el camino a los jugadores afroamericanos hacia las Grandes Ligas, jugó ocho de sus 10 temporadas con los Dodgers, primero en Brooklyn y luego en Los Ángeles.

El equipo confirmó que falleció la mañana del martes una prolongada enfermedad.

Newcombe, como su compañero de los Dodgers Jackie Robinson, fue contratado por Branch Rickey de las Ligas Negras y acabó teniendo un impacto enorme en Las Mayores.

De hecho, Don había generado enormes expectativas en las sucursales de la organización, que ya gozaba entonces de los éxitos de Jackie Robinson, el primer negro en las Ligas Mayores en el siglo XX.

Siempre se distinguió por ser “un caballo” del pitcheo.

En su debut, 1949, logró 17-8, una marca que le permitió ganar el premio Novato del Año. Fue el primer negro en alcanzar ese trofeo.

A la siguiente campaña, logró, 19-7 y para su tercera incursión en Brooklyn, apantalló con 20-9.

Para las siguientes dos temporadas los Dodgers no contaron con él ya que se fue a cumplir con el servicio militar, pero regresó en 1954 para lograr una marca de 9-8.

Luego en 1955 tuvo 20-5, el año en que por fin —después de varios clásicos enfrentándose— le ganaron en siete grandes partidos la Serie Mundial a los NYY.

Y, en 1956, quihúbole: 27-7 y 3.06 de efectividad, lo cual le hizo ganar el trofeo de JMV y el Cy Young, que por entonces sólo era otorgado a un pitcher de ambas ligas. Era la primera que se veía ese doble truco.

Estaba en el pináculo de su formidable carrera ligamayorista.

Ese año del 56 Dodgers volvió al clásico otoñal, pero esa vez fue lo contrario: cayeron en siete ante los Mulos del Bronx.

Si recuerda, en el quinto partido de aquella serie, Don Larsen les tiró juego perfecto (8 de abril), el único hasta hoy registrado en la historia de esos clásico.

Don Newcombe también fue seleccionado cuatro veces al Juego de Estrellas.

Fue un lanzador que intimidaba a los bateadores desde el montículo por su estatura de 1.95 metros (6.4 pies) y corpulenta complexión física. Era alguien que tiraba ceñido al cuerpo al que imprudentemente se atrevía a batear muy pegado al plato.

Volviendo al homenaje:

Los Dodgers ya habían usado parches conmemorativos en el pasado para honrar la memoria de ex jugadores como Jim Gilliam (1978), Tim Crews (1993), Don Drysdale (1993), Roy Campanella (1993), Pee Wee Reese (1999) y Duke Snider (2011).

La franquicia también recordará a Newcombe durante una ceremonia antes del encuentro el 27 de abril, cuando lo exaltarán como Leyenda de los Dodgers y se entregará un bobblehead conmemorativo.


Por supuesto, le tengo más datos históricos de Newcombe… ya se los compartiré si no es que mañana, a la primera oportunidad. Un grande del pitcheo en la historia del mejor beisbol del mundo. Sí señor.