Hace casi cinco años, el 19 de junio de 2015, la Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación publicó la tesis de jurisprudencia 43/2015, según la cual, es inconstitucional y discriminatorio que la ley de cualquier entidad considere que la finalidad del matrimonio es la procreación y/o que lo defina como el que se celebra entre un hombre y una mujer.
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Esto ha derivado en largos debates y enfrentamientos entre las organizaciones LGBT y grupos conservadores. Ambos se han llevado victorias y derrotas al tratar de influir en legisladores de los Congresos locales, para que se aprueben o frenen las reformas correspondientes y se legisle sobre el llamado matrimonio igualitario.
Sonora, Tabasco, Tamaulipas, Yucatán, Estado de México, Guanajuato, Guerrero, Durango, Querétaro, Veracruz, Zacatecas, Tlaxcala y Sinaloa figuran en la lista negra de las entidades que han evadido acatar la jurisprudencia de la Corte.
En algunos congresos ya se votó y se rechazó y en otros, como Sonora y Tlaxcala, hay iniciativas en espera de debatirse en el pleno.
Ciudad de México, Coahuila, Chihuahua, Nayarit, Campeche, Colima, Aguascalientes, Hidalgo, San Luis Potosí, Oaxaca, Michoacán y Morelos están a la vanguardia, al haberse aprobado el matrimonio como la unión entre dos personas mayores de edad, sin distingo de sexo o identidad de género, mientras que Nuevo León, Jalisco, Chiapas, Puebla y Baja California han sido obligadas por la SCJN y en Quintana Roo, se detectó que la ley no contempla que sea entre hombre y mujer.
Iniciativas en la ‘congeladora’
Una de las propuestas más completas hasta ahora ha sido la del ex presidente Enrique Peña Nieto, quien el 18 de mayo de 2016 propuso reformar el Artículo 4° Constitucional, a fin de incorporar el criterio de la SCJN y que el matrimonio fuese sin discriminación por origen étnico, discapacidad, condición social, de condiciones de salud, religión, género o preferencias sexuales.
Adicionalmente, planteó reformar el Código Civil Federal, para que el matrimonio igualitario se realice sin discriminación alguna entre personas mayores de 18 años; modernizar el lenguaje, para evitar las expresiones discriminatorias; que los cónsules, en su función de jueces del Registro Civil, pudieran expedir una nueva acta de nacimiento, para reconocer la identidad de género y finalmente, Relaciones Exteriores recibió indicaciones para que, en los pasaportes, se reconozcan sin distinción, las actas de nacimiento que registran un cambio sexogénico.
En la era de la 4T, la senadora de Morena, Nestora Salgado propuso el 24 de septiembre de 2019 reformar los Artículos 1° y 4° Constitucionales, para que se establezca a nivel nacional el derecho de cualquier persona mayor de 18 años a contraer matrimonio, sin importar orientación sexual, identidad o expresión de género.
La diputada federal de Morena, Reyna Celeste Ascencio hizo lo propio en la Cámara de Diputados el 20 de diciembre, al proponer, igual que las dos iniciativas anteriores, una reforma al Artículo 4° Constitucional, para reconocer el matrimonio igualitario.
El conservadurismo de Sonora
La iniciativa más reciente sobre matrimonio igualitario en Sonora es de la diputada local de Morena Yumiko Palomarez, quien el 5 de agosto de 2019 propuso reformar el Código de Familia y el Código de Procedimientos Civiles, pero esto no ha llegado todavía al Pleno…y parece que no llegará.
Junio, conocido como el “Mes del Orgullo LGBT” es una ocasión propicia para que el tema se ponga nuevamente en la agenda pública, que se destierren los privilegios en materia de uniones y se legisle sin miedo al voto de castigo o la excomunión.
Hasta el próximo miércoles.
Maestra en Ciencias Sociales con especialidad en Políticas Públicas por El Colegio de Sonora y Licenciada en Ciencias de la Comunicación por la Universidad de Sonora. Twitter: @AlvaradoVMarce
