Cualquiera de nosotros podemos ser compradores de arte, en términos de adquirir una –pintura, escultura, fotografía, grabado, audiovisuales– no es que haya un modo adecuado de hacerlo, básicamente si te gusta y estás dispuesto a pagar por ello lo que dicen que vale (sea el artista, el galerista o algún otro que vende la pieza) bueno, pues ¡ya está! Con eso, simplemente, Usted la adquiere y así inicia su colección.
No hay una forma correcta de hacer una colección, pero, sí que hay algunas recomendaciones que pudieran ayudar a saber que tener en cuenta para comprar arte. Primeramente, tendrías que saber qué te gusta y qué quieres, establecer un criterio de compra, por así decirlo. No es lo mismo, un comprador que inicia una colección institucional, alguien que quiere comprar como inversión, a una persona que quiere decorar su casa.
Para saber qué inclinaciones en el arte tiene, lo mejor es visitar galerías y museos de manera continua, de preferencia en el día de inauguración para poder entrevistarse con los artistas, o bien, preguntar si la galería o museo organiza eventos de diálogo con sus artistas representados, charlas de “proceso creativo” y demás que le permitan conocer más y mejor el trabajo que se está exhibiendo.
En un segundo momento, tendría que tener algunos conocimientos básicos sobre arte: esto incluye artistas, estilos, técnicas, comunidad artística, galerías, la crítica, etc. Aunque no se requiere ser un experto, sí debería tener claro que su posición como cliente es poderosa. Y como el conocimiento es poder, haga uso del Internet y sus maravillosas aplicaciones para comparar precios, estilos, períodos e incluso encontrará sitios que le permitirán hacer simulaciones arquitectónicas con las piezas de arte que le interese comprar.
En tercer lugar, realizar una investigación más a fondo de aquello en lo que nos hemos interesado, para ello, Alan Bamberger nos dice en su libro El Arte de Comprar Arte que nos realicemos cuatro preguntas: ¿Quién es el artista?, ¿Qué tan significativo es el arte?, ¿Cuál es el origen, historia y documentación de la obra de arte? y si ¿el precio es justo?, contestando estas preguntas podríamos tomar una decisión consciente sobre lo que vamos a adquirir.
Y como cuarto paso, sería la compra. Y para ello, yo personalmente les recomendaría realizarse una última pregunta: ¿Ya sabe dónde lo va a poner? No le vaya a pasar lo que, a mi casa barroca (su casa barroca) tremendo collage visual, un acumulamiento de objetos que adquirimos con gran placer pero sin pensar qué tan necesarios serian o si realmente hay un espacio para ellos, en el caso particular del arte, de no contar con un espacio especial, hay que asignárselo, ya que tener lugar adecuado para su exhibición o resguardo es fundamental y no olvidar tomar nota de los cuidados necesarios para que la obra que adquirimos se conserve de la mejor manera.
Ya, por último, les deseo unas compras de arte muy inteligentes este Buen Fin. Aquí algunos espacios para apoyar a los creadores y gestores locales: Lucita Aguilera Galería y Galería Cesaretti en Hermosillo, Sonora, Sandra Arce Art Gallery en Tucson, Arizona, quien promueve artistas sonorenses, Venta de GarART en el Mentidero (Av. Sufragio Efectivo No.39 Col. Centro) sólo el día de hoy, Cuarto Infinito, DLS Gallery, Espacio Arte en Ciudad Obregón.
Psicóloga por el Itson y la UADY, especialista en Educación Especial y Neuropsicología, catedrática en el Itson, ENEE y orientadora para la Secretaría de Educación y Cultura, gestora cultural con posgrado en análisis y gestión del Arte Contemporáneo actualmente Coordinadora Estatal de Artes Visuales en el Instituto Sonorense de Cultura (ISC).
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