Desde publicaciones anteriores hemos abordado lo que es epigenética y si recordamos un poco, esta se enfoca en explicar los cambios que se pueden manifestar en la expresión de genes como resultado de la exposición a distintos estímulos presentes en el medio ambiente.
No es una modificación en el contenido de la información genética, más bien, en la forma en que es leída. Lo que no habíamos abordado en ocasiones pasadas era el tipo de alteraciones que se pudieran manifestar en el ADN y que son conocidas como mecanismos epigenéticos; entre ellos, podemos mencionar a la metilación del ADN, la modificación de las histonas y los microARNs.
La metilación del ADN consiste en la unión de varias moléculas conocidas como grupos metilo (que están conformadas por carbono e hidrógeno) al ADN y entre más abundantes estas sean, mayor será la inhibición de la expresión de los genes (“no se podrán leer”).
Por otro lado, las histonas son proteínas en las que se encuentra “enrollado” el ADN y que son bastante útiles ya que permiten que esa enorme cantidad de información pueda ser compactada y almacenada dentro de nuestras células, sin embargo, estas proteínas se ven expuestas a otros factores que pueden modificar el acceso a la información genética y por tanto a su interpretación y aplicación. Por último, los microARNs son un tipo de ARN que no tienen el potencial para obtener proteínas pero sí tienen la capacidad de bloquear aquellos ARN (mejor conocidos como ARN mensajeros) que si pueden dar lugar a proteínas e incluso los pueden degradar (evitando así la transmisión de información para la síntesis de proteínas).
Al final lo que hay que rescatar de esto último que acabamos de discutir es que en ocasiones y por diversas razones la información genética no puede ser expresada y en consecuencia se podrá apreciar su efecto en el funcionamiento de los seres vivos.
La buena noticia es que estas alteraciones del ADN pueden ser reversibles y el conocimiento que se tiene hasta el momento puede ser empleado a favor para distintas aplicaciones biotecnológicas en especial en el Sector Salud.
Los seres humanos buscamos constantemente un bienestar integral que, aunque cada vez es más completo gracias a los avances científicos que se han logrado hasta el momento, una asignatura pendiente que inquieta de diferente manera y grado a las personas en general y que no hace distinción de género es el proceso de envejecimiento.
El envejecimiento es inevitable, no obstante, se sabe que hay factores ambientales como la contaminación, la exposición a luz solar (rayos UV) y el estilo de vida de cada persona que pueden influir en este proceso.
Últimamente, la epigenética ha llamado la atención de la industria cosmética ya que yendo de la mano con investigaciones que tienen como objetivo la comprensión de los mecanismos epigenéticos involucrados en el proceso de envejecimiento, se pretende diseñar productos cosméticos que detengan el envejecimiento, rejuvenezcan y reparen el daño que eventualmente pudiera presentarse derivado de estímulos ambientales. Actualmente, se posee evidencia científica de genes vinculados con el proceso de envejecimiento que se ven afectados por la presencia abundante de grupos metilos (metilación del ADN) inhibiendo su expresión y por lo tanto siendo visible su efecto en la piel.
Asimismo, se tiene considerado el diseño de productos farmacéuticos que puedan contrarrestar el efecto de microARNs que pueden incentivar el proceso de envejecimiento; además, se tienen bajo la lupa microARNs que están relacionados con los ritmos circadianos (que se definen como ciclos de 24 horas que forman parte del reloj interno del cuerpo y que funcionan en segundo plano para llevar a cabo funciones y procesos esenciales) para así obtener un panorama más completo y soluciones prometedoras para retardar el envejecimiento.
Como vemos es un tema amplio y de interés, el cual estaré encantado de ir desmenuzando en las próximas publicaciones.
Excelente fin de semana.
