/ miércoles 29 de diciembre de 2021

Conversatorios mineros | Manchas mineras 2021; parte 3

Tercera y última mancha a la minería mexicana este año: La posible “nacionalización” del litio. Este año después de muchos rumores y señalamientos no oficiales el Presidente incluyó en su propuesta de decreto para la reforma eléctrica la exclusividad reservada para el Estado en el aprovechamiento de litio, lo cual es un mensaje de incertidumbre a la inversión con otras agravantes.

En México hay 27 concesiones mineras de litio vigentes, de ellas 17 concesiones ubicadas en los estados de Sonora, Baja California, Chihuahua, Zacatecas y San Luis Potosí, serían canceladas, algunas de ellas están en manos de pequeños propietarios y otras son propiedad de empresas extranjeras con proyectos de exploración que, según la 4T no han invertido lo suficiente y por ello se podría pensar que están especulando con esos títulos y en consecuencia se les retirarían para quedar en manos del gobierno federal. Hasta la fecha, sin la aprobación de la reforma presidencial, esto está fuera de la ley y seguramente se perderán muchos millones invertidos en la compra de las concesiones, pago de derechos, compra de tierras o derechos de ocupación temporal. Todo lo anterior es un mensaje al exterior, de un gobierno autoritario y que no tiene una planeación estratégica en minería, ni en muchas otras cosas diría yo.

Los únicos que conservarán sus 10 concesiones son Bacanora Lithium, propiedad del gigante de capital chino Ganfeng Lithium, el productor número uno de litio en el mundo, que el año pasado tuvo ventas por 5 mil 488 millones de dólares. Bacanora ya tiene sus permisos autorizados desde antes de la 4T y le serán respetados, porque el Gobierno no se pondrá a las patadas con un verdadero gigante que además, ya tiene un contrato con BMW y Volkswagen para vender el litio que salga de Sonora ya convertido en pilas.

Pero podría haber algún otro interés en tener la mejor relación posible con Bacanora Lithium y Ganfeng Lithium, no es tan difícil de deducir, pues se habla de que una vez aprobada la reforma eléctrica la 4T va a crear una nueva paraestatal, digamos Litiomex, LitioLópez o Pilas del Bienestar, esto a efecto de que exploren, extraigan y procesen litio de parte del Estado y aquí es donde van a requerir invariablemente el apoyo técnico y la colaboración de los expertos chinos. Lo más grave de esto es que esta paraestatal seguramente también requerirá de una fuertísima inversión que saldrá de la bolsa de los mexicanos.

Como parte del recuento anual hay que repetirlo, México lleva 80 años extrayendo petróleo y no hemos conseguido que Pemex sea negocio, todos seguimos pagando gasolina carísima, ¿qué nos hace pensar que vamos a tener éxito con el litio?, no tenemos infraestructura, ni expertos, ni equipo, ni capital humano y menos experiencia. Como siempre el tiempo dirá, para todos y mientras tanto ¡Feliz Año 2022!

Tercera y última mancha a la minería mexicana este año: La posible “nacionalización” del litio. Este año después de muchos rumores y señalamientos no oficiales el Presidente incluyó en su propuesta de decreto para la reforma eléctrica la exclusividad reservada para el Estado en el aprovechamiento de litio, lo cual es un mensaje de incertidumbre a la inversión con otras agravantes.

En México hay 27 concesiones mineras de litio vigentes, de ellas 17 concesiones ubicadas en los estados de Sonora, Baja California, Chihuahua, Zacatecas y San Luis Potosí, serían canceladas, algunas de ellas están en manos de pequeños propietarios y otras son propiedad de empresas extranjeras con proyectos de exploración que, según la 4T no han invertido lo suficiente y por ello se podría pensar que están especulando con esos títulos y en consecuencia se les retirarían para quedar en manos del gobierno federal. Hasta la fecha, sin la aprobación de la reforma presidencial, esto está fuera de la ley y seguramente se perderán muchos millones invertidos en la compra de las concesiones, pago de derechos, compra de tierras o derechos de ocupación temporal. Todo lo anterior es un mensaje al exterior, de un gobierno autoritario y que no tiene una planeación estratégica en minería, ni en muchas otras cosas diría yo.

Los únicos que conservarán sus 10 concesiones son Bacanora Lithium, propiedad del gigante de capital chino Ganfeng Lithium, el productor número uno de litio en el mundo, que el año pasado tuvo ventas por 5 mil 488 millones de dólares. Bacanora ya tiene sus permisos autorizados desde antes de la 4T y le serán respetados, porque el Gobierno no se pondrá a las patadas con un verdadero gigante que además, ya tiene un contrato con BMW y Volkswagen para vender el litio que salga de Sonora ya convertido en pilas.

Pero podría haber algún otro interés en tener la mejor relación posible con Bacanora Lithium y Ganfeng Lithium, no es tan difícil de deducir, pues se habla de que una vez aprobada la reforma eléctrica la 4T va a crear una nueva paraestatal, digamos Litiomex, LitioLópez o Pilas del Bienestar, esto a efecto de que exploren, extraigan y procesen litio de parte del Estado y aquí es donde van a requerir invariablemente el apoyo técnico y la colaboración de los expertos chinos. Lo más grave de esto es que esta paraestatal seguramente también requerirá de una fuertísima inversión que saldrá de la bolsa de los mexicanos.

Como parte del recuento anual hay que repetirlo, México lleva 80 años extrayendo petróleo y no hemos conseguido que Pemex sea negocio, todos seguimos pagando gasolina carísima, ¿qué nos hace pensar que vamos a tener éxito con el litio?, no tenemos infraestructura, ni expertos, ni equipo, ni capital humano y menos experiencia. Como siempre el tiempo dirá, para todos y mientras tanto ¡Feliz Año 2022!