Durante la recientes elecciones en todo el país candidatos ganadores y perdedores hicieron campaña a costa del prestigio de la minería, como sucede en cada elección; ahora en este ciclo perverso le toca a las Organizaciones No Gubernamentales continuar la campaña y exigir a las nuevas autoridades que frenen, clausuren y cancelen a las mineras. Así vemos una campaña permanente en México contra la minería. ¿Y la campaña permanente a favor, cuando la empezaremos?.
Me ha llamado la atención que en la últimas dos semanas, justo pasando la elección, en diferentes estados del país han alzado la voz nuevamente las organizaciones antimineras, que no ambientalistas, pues su fin no es hacer algo por el ambiente, sino afectar a las mineras, esas que generan miles de empleos y miles de millones en impuestos y derrama, y que además, créanme, cumplen a cabalidad con la ley, sino, simplemente no habrían unidades operando.
Grupos nefastos como REMA y un montón de otras organizaciones se han aprovechado por más de una década de un perfil ambientalista, posteriormente indigenistas y más recientemente feminista, siguen en un juego inmoral, muchas veces por contrato de partidos políticos, Morena ha sido uno de ellos detectado así en muchos sitios, donde respaldan, financian e impulsan movilizaciones, antes lo hacía el PRD, pero también lo hacen hoteleros y caciques inmobiliarios y en menor grado la mafia, cuando llega a sentirse incómoda cerca de una operación, aunque eso es lo menos.
Los partidos y el Gobierno lo que hacen es fomentar la ignorancia en las comunidades, aprovecharse y sembrar miedo, decir que serán ellos quien defiendan a la población de quienes quieren llevarse sus recursos y su soberanía, todo esto se capitaliza electoralmente. Los inmobiliarios hacen un poco lo mismo, hacen creer a la gente que las mineras los van a despojar, mientras que ellos les quieren comprar las propiedades a precios de risa para el gran mercado de extranjeros retirados.
Nada de esto es difícil de entender, en algún momento estos genios estrategas se dieron cuenta de que crear un monstruo horrible como la megaminería tóxica es un gran negocio y entendieron que necesitan mantener una campaña permanente en su contra para mantener el negocio funcionando. Lo extraño, es que los mineros organizados no hayan entendido que también necesitar una campaña permanente, incesante, inteligente e innovadora en favor de la minería enfocada a la gente que nada tiene que ver con el sector. ¿Será que también hay un negocio perverso en permitir la ignorancia y los prejuicios contra la minería?, honestamente no lo sé, pero no lo descarto, al fin y al cabo en el negocio minero no todos son mineros, ni están a favor de la actividad, ¿será que los lobos con piel de oveja también hacen campaña?
