/ jueves 2 de abril de 2020

Corren rumores | Abril, el mes más difícil

Crisis perfecta… Esperemos que el próximo domingo en su informe trimestral, el presidente Andrés Manuel López Obrador dé a conocer el programa de rescate económico para enfrentar la crisis del coronavirus, que de acuerdo a los especialistas, tendrá un severo repunte en el mes de abril.

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Las cosas en este momento no están como para soltar campanas al vuelo por más que nos presuman en las mañaneras. El primer trimestre, algo que seguramente no informará el Presidente, es que cierra con una caída del peso de 26% frente al dólar. El petróleo cierra con 10.37 dólares el barril, cuando el precio de referencia es de 49 dólares y el precio de producción 14 dólares promedio. La Bolsa Mexicana pierde 26% y no se repone. Más de 600 hoteles cerrados y miles de negocios sin operar. Todos los indicadores a la baja, salvo los crímenes violentos.

Todo esto cuando apenas empezamos a sentir la fuerza de la pandemia. Por eso algunos piensan que como otros países vamos a vivir la crisis perfecta.

Dinero para los pobres… A reserva de escuchar números, porque esperemos los presenten y no sólo buenos deseos y mejores intenciones, el domingo sabremos cuánto se destinará para apoyar a los sectores humildes, desempleados, comercio informal y clases vulnerables.

De lo que se sabe por el momento es que se podría anunciar que se prorrogarán cobros de luz, de Infonavit, Fonacot y servicios de sectores oficiales. Claro, a lo mejor sólo es para los pobres. Esperemos conocer la mecánica para apoyar a los microempresarios con las tandas o como se llame. Como se apoyará a los trabajadores en paro.

Parece que también van a presumir las medidas que anunció en la semana la Asociación de Bancos de diferir cobro de créditos, como si fuera medida oficial. En fin, ya veremos porque se espera mucho para este fin de semana.

No hay fondos… Es más el suspenso, sobre todo luego que Carlos Urzúa, exsecretario de Hacienda, escribió en la semana que México no dispone de ahorros públicos del que se pueda echar mano para paliar la crisis. Que no hay tal fondo como han venido presumiendo. Y miren que lo dice alguien que conoce muy bien cómo están las cuentas públicas.

Además, advirtió que este año la pandemia pudiera provocar una caída en la economía del 6%, algo que coincide con lo que han dicho empresas calificadoras y financieras. Por eso, pide al Presidente que no le tiemble la mano para aumentar el gasto público aunque sea a través de deuda. No creemos que el inquilino de Palacio Nacional le haga caso. Pero bueno, una voz más que se suma a las advertencias.

Sugerencia de gobernadores… En la semana se llevó a cabo una videorreunión de todos los gobernadores del país con la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez, el canciller Marcelo Ebrard y el subsecretario Hugo López-Gatell. Cada uno presentó su lista de necesidades y obvio, todos en calidad de urgente.

La gobernadora Claudia Pavlovich pidió que el Insabi opere a toda su capacidad en Sonora, dotación de reactivos para las pruebas, conclusión y equipamiento del nuevo hospital de especialidades. Algo muy importante, dado el elevado número de casos de infectados en Arizona, que se restrinja el tránsito no esencial de suelo americano a sonorense, como se hace ahorita de sur a norte en esa frontera.

También insistió la mandataria en conocer la cantidad de apoyos y plazos de entrega de material como cubrebocas especializados, overoles, monitores, camas, ventiladores, contrataciones temporales de personal de servicio sanitario y pruebas rápidas. Esperemos que los gobernadores puedan tener una pronta respuesta.

Toque de queda… La alcaldesa de Hermosillo, Célida López, hizo bien en curarse en salud, ahora sí que casi literalmente, y a pesar de algunas críticas, se acordó imponer una especie de toque de queda de las 6:00 de la tarde a 6:00 de la mañana.

No será tan rigorista como en otras partes, en donde se llevan a la gente a la cárcel o le imponen severas multas, sino que la Policía les sacará tarjeta amarilla y los invitará a que se resguarden.

Además, salvo una emergencia seria o por necesidad del trabajo, no hay razón para andar en la calle a esa hora. Todas las compras o visitas, incluso citas médicas, pueden ser en la mañana.

Hay quienes se han ido con la finta y toman literal eso de toque de queda, en realidad es una forma de decir las cosas, porque no hay tal. Sólo circulación restringida, que deberíamos hacerlo de manera voluntaria y solidaria.

Dramático testimonio…. Si tienen chance les recomiendo que escuchen el dramático testimonio que da el gobernador de Hidalgo, Omar Fayad, quien se infectó de coronavirus. Dice que hasta el sábado estaba bien, pero en dos horas todo se complicó. La temperatura le llegó a 41 grados y sólo podía tomar paracetamol.

El dolor de cuerpo insoportable y la cabeza, dijo a la periodista que lo entrevistaba, que parecía que se había caído de cabeza y pegado en el suelo. En la madrugada del domingo comentó que pensó que no iba a sobrevivir por lo intenso de la fiebre y los dolores.

Para qué decir que da un testimonio dramático para que todos nos cuidemos porque asegura que esta enfermedad de verdad es grave cuando pega con todo. Óiganlo, sobre todo los que toman a chunga las medidas preventivas. Van a cambiar de opinión.

Pero bueno, ya es jueves y se acaba otra semana. Sigan firmes, y recuerden, de la casa vas a salir un día, del hoyo no. Sale.

Crisis perfecta… Esperemos que el próximo domingo en su informe trimestral, el presidente Andrés Manuel López Obrador dé a conocer el programa de rescate económico para enfrentar la crisis del coronavirus, que de acuerdo a los especialistas, tendrá un severo repunte en el mes de abril.

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Las cosas en este momento no están como para soltar campanas al vuelo por más que nos presuman en las mañaneras. El primer trimestre, algo que seguramente no informará el Presidente, es que cierra con una caída del peso de 26% frente al dólar. El petróleo cierra con 10.37 dólares el barril, cuando el precio de referencia es de 49 dólares y el precio de producción 14 dólares promedio. La Bolsa Mexicana pierde 26% y no se repone. Más de 600 hoteles cerrados y miles de negocios sin operar. Todos los indicadores a la baja, salvo los crímenes violentos.

Todo esto cuando apenas empezamos a sentir la fuerza de la pandemia. Por eso algunos piensan que como otros países vamos a vivir la crisis perfecta.

Dinero para los pobres… A reserva de escuchar números, porque esperemos los presenten y no sólo buenos deseos y mejores intenciones, el domingo sabremos cuánto se destinará para apoyar a los sectores humildes, desempleados, comercio informal y clases vulnerables.

De lo que se sabe por el momento es que se podría anunciar que se prorrogarán cobros de luz, de Infonavit, Fonacot y servicios de sectores oficiales. Claro, a lo mejor sólo es para los pobres. Esperemos conocer la mecánica para apoyar a los microempresarios con las tandas o como se llame. Como se apoyará a los trabajadores en paro.

Parece que también van a presumir las medidas que anunció en la semana la Asociación de Bancos de diferir cobro de créditos, como si fuera medida oficial. En fin, ya veremos porque se espera mucho para este fin de semana.

No hay fondos… Es más el suspenso, sobre todo luego que Carlos Urzúa, exsecretario de Hacienda, escribió en la semana que México no dispone de ahorros públicos del que se pueda echar mano para paliar la crisis. Que no hay tal fondo como han venido presumiendo. Y miren que lo dice alguien que conoce muy bien cómo están las cuentas públicas.

Además, advirtió que este año la pandemia pudiera provocar una caída en la economía del 6%, algo que coincide con lo que han dicho empresas calificadoras y financieras. Por eso, pide al Presidente que no le tiemble la mano para aumentar el gasto público aunque sea a través de deuda. No creemos que el inquilino de Palacio Nacional le haga caso. Pero bueno, una voz más que se suma a las advertencias.

Sugerencia de gobernadores… En la semana se llevó a cabo una videorreunión de todos los gobernadores del país con la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez, el canciller Marcelo Ebrard y el subsecretario Hugo López-Gatell. Cada uno presentó su lista de necesidades y obvio, todos en calidad de urgente.

La gobernadora Claudia Pavlovich pidió que el Insabi opere a toda su capacidad en Sonora, dotación de reactivos para las pruebas, conclusión y equipamiento del nuevo hospital de especialidades. Algo muy importante, dado el elevado número de casos de infectados en Arizona, que se restrinja el tránsito no esencial de suelo americano a sonorense, como se hace ahorita de sur a norte en esa frontera.

También insistió la mandataria en conocer la cantidad de apoyos y plazos de entrega de material como cubrebocas especializados, overoles, monitores, camas, ventiladores, contrataciones temporales de personal de servicio sanitario y pruebas rápidas. Esperemos que los gobernadores puedan tener una pronta respuesta.

Toque de queda… La alcaldesa de Hermosillo, Célida López, hizo bien en curarse en salud, ahora sí que casi literalmente, y a pesar de algunas críticas, se acordó imponer una especie de toque de queda de las 6:00 de la tarde a 6:00 de la mañana.

No será tan rigorista como en otras partes, en donde se llevan a la gente a la cárcel o le imponen severas multas, sino que la Policía les sacará tarjeta amarilla y los invitará a que se resguarden.

Además, salvo una emergencia seria o por necesidad del trabajo, no hay razón para andar en la calle a esa hora. Todas las compras o visitas, incluso citas médicas, pueden ser en la mañana.

Hay quienes se han ido con la finta y toman literal eso de toque de queda, en realidad es una forma de decir las cosas, porque no hay tal. Sólo circulación restringida, que deberíamos hacerlo de manera voluntaria y solidaria.

Dramático testimonio…. Si tienen chance les recomiendo que escuchen el dramático testimonio que da el gobernador de Hidalgo, Omar Fayad, quien se infectó de coronavirus. Dice que hasta el sábado estaba bien, pero en dos horas todo se complicó. La temperatura le llegó a 41 grados y sólo podía tomar paracetamol.

El dolor de cuerpo insoportable y la cabeza, dijo a la periodista que lo entrevistaba, que parecía que se había caído de cabeza y pegado en el suelo. En la madrugada del domingo comentó que pensó que no iba a sobrevivir por lo intenso de la fiebre y los dolores.

Para qué decir que da un testimonio dramático para que todos nos cuidemos porque asegura que esta enfermedad de verdad es grave cuando pega con todo. Óiganlo, sobre todo los que toman a chunga las medidas preventivas. Van a cambiar de opinión.

Pero bueno, ya es jueves y se acaba otra semana. Sigan firmes, y recuerden, de la casa vas a salir un día, del hoyo no. Sale.