Ya no aguantan… Los transportistas de carga dicen que de plano ya se perdió el control de las carreteras federales y estatales en el país, pues ahora son tierra de la delincuencia que asaltan, roban y agreden a placer, sin que haya una sola autoridad que imponga la seguridad. Son miles las denuncias y millones de pesos en pérdidas, no se diga el número de mercancías que han terminado en los mercados negros del país, que también gozan de total impunidad.
El presidente de la Cámara Nacional del Autotransporte de Carga, Ramón Medrano se quejó de la ausencia de patrullas en todas las carreteras. Son miles de elementos de la Guardia Nacional, pero en lugar de vigilar, se quedan en sus cuarteles y oficinas. Ahí de nada sirven.
Se roban todo… En diferentes entrevistas, Medrano dijo que “Hoy se roban todo, y lo más delicado es el alto grado de violencia de la que son objetos nuestros operadores”. En comunicado de la Canacar señalan que según datos de la Fiscalía General de la República y el Sistema Nacional de Seguridad Pública, en el primer semestre del año se reportaron 6,389 robos de camiones de carga, y la mayoría se registraron en estados del centro del país. De ese total al parecer no se ha recuperado gran cosa y menos se han detenido a los causantes de los delitos. Se imaginan lo que se llevaron en cada robo a un camión cargado de mercancía. Eso sin contar otro tipo de asalto como las extorsiones que hacen en Sonora los supuestos integrantes de la tribu Yaqui, que no es otra cosa que un asalto en despoblado lo que realizan con sus retenes.
Quieren resultados… Ante los anuncios de nuevos programas de vigilancia el dirigente de la Canacar dijo que no quieren programas, que quieren resultados. Porque el daño no sólo es lo que se roban, sino lo que obligan a los dueños de camiones y empresas a tener que hacer. Según la Encuesta Nacional de Victimización de Empresas del Inegi, durante el 2020 cerca del 8% de los camiones de carga registrados en México, cancelaron rutas de distribución. o venta de sus productos como afectación a consecuencia de un delito. Lo peor de todo es que esto va en aumento. Por eso anuncios como que la Guardia Nacional pasa a la Defensa Nacional de poco o nada sirve, porque de todos modos los tienen con las manos amarradas. Las patrullas guardadas en las ciudades sin salir a carreteras. Para qué tanto anuncio. Bien dicen que lo que piden son resultados.
Promesas transexenales… Bueno, ya nos tiene acostumbrados a que las autoridades federales son expertos en patear el bote. Desde un inicio del sexenio han sido más las echadas que las ponedoras. Recordar cuando el Presidente presumió que para el 1 de diciembre del 2018 todas las dependencias emigrarían a ciudades del interior del país, como dicen en chilangolandia. Estamos en el 2022 y nadie sale de la CDMX. Las pocas oficinas que han emigrado son pura farsa. Aquí en Sonora se quedaron listas las oficinas en Ciudad Obregón para recibir a la Secretaría de Agricultura y nanay. Y como esas hay un montón de promesas. Recuerdan cuando a principios del 2019 el Presidente dijo que la Cuatro Carriles estaría lista para abril o para mayo. Nanay. Ahora antes que termine el sexenio o sea que un bote pateado de seis años.
Hay que hacer Patria… Otro caso de bote pateado es la tristemente célebre vacuna Patria, que según María Elena Álvarez-Buylla, directora de Conacyt, quedaría lista para finales del 2021. Ahora con gran desfachatez y como si fuera una proeza anuncia que apenas comenzará la última etapa de ensayos clínicos y que algo se estará viendo para finales de año. Lo que no dice es que nadie quiere ser candidato para hacer la prueba de ver si funciona. Y ya se imaginarán una vez que digan que está lista, cuando seguramente estará a medias. Pues veremos quién es el valiente que se lo pone. Ah, ya sé, los chayochairos, que a todo obedecen y sin hacer gestos. Comen hasta sapos.
Víctimas de las lluvias… Teníamos rato que no se reportaban tantas víctimas fatales por la imprudencia de querer ganarles a las grandes crecidas de agua provocadas por las lluvias. A estas alturas resulta lamentable que todavía haya personas que sean tan temerarias como para querer ganarle a las fuertes avenidas de arroyos, canales y de incluso calles como pasa en Nogales. Una familia perdió al padre y un hijo de cuatro años por querer cruzar en medio de la crecida el arroyo de El Realito en la Mesa del Seri. También hubo afectados en el arroyo La Cabullona en Agua Prieta. Y así podemos mencionar muchos casos. Ojalá que tomemos conciencia y si no lo hacemos por nosotros, que se haga por las familias.
En fin, así es la cosa. Por eso no olviden lo que decía el Patón Donaldo, agua que no has de beber, tampoco la dejes correr. Sale.
