/ miércoles 5 de junio de 2019

Corren rumores | Había un chorrito

Se hacía grandote… Y se hacía chiquito. Como decía el Perro Bermúdez en sus crónicas, tuya, mía, pasa y sale un titiritito.

Y de cómo el chorrito de la fuente, se hacía grandote y ahora se hizo chiquito, y esto, nos dicen, trae preocupados a los estrategas de Morena, porque los cientos de millones en becas, pensiones y apoyos sólo se tradujeron en una votación global del 32% en promedio en los seis estados donde hubo elecciones el domingo. Cierto que ahorita andan agarrados como clavo ardiendo al triunfo de las dos gubernaturas, la verdad es que en los numeritos finales la víspera del juego electoral pinta mal para el año entrante en que estarán en juego los estados de Coahuila y de Hidalgo.

Saquen cuentas… Es obvio que a estas alturas ya los partidos sacaron cuentas y no son muy favorables para el partido oficial. Vean los resultados en números fríos: Del total de los 4.35 millones de votos que se emitieron en los seis estados, un total de 1.38 millones fueron para candidatos panistas, lo que le da el 31.67% de la votación, contra 1.19 millones que lograron los candidatos de Morena, que consigue el 27.48% del cómputo global. En Durango los guindas quedaron en tercer lugar. Ohmaigod. Esto confirma que fueron millones de personas que no salieron a votar y que ya no fueron motivados por la imagen del presidente Andrés Manuel López Obrador. Tampoco funcionaron los apoyos a través de las diferentes secretarías, sobre todo de Bienestar. Ni las campañas sucias en las redes sociales. Lo único que marcó la diferencia y eso trae contentos al Partido del Trabajo y al Verde, fueron las alianzas electorales. Ahora van a subirle el precio a su amor.

¿Amor o garrote? La pregunta es que sigue ahora para los estados en donde habrá elecciones el año entrante. Se irá a tirar con todo el Gobierno federal para hacer un infierno a los gobiernos locales o por el contrario, tenderá puentes de amor y paz. Porque la campañita de echarle lodo a los gobernadores en sus propios estados se vio que no funcionó. Pero ahora los pueden ahorcar presupuestalmente. Ordenar a los delegados federales o como se llamen, para que se dediquen a sabotear a gobernadores y alcaldes. Amén de la consabida campaña sucia que usan en redes sociales. Porque algo van a tener que hacer, porque no pueden llegar al 2021 más flojos que el negro que fue noqueado por el mexicano Andy Ruiz, porque estarán en juego 13 gubernaturas, congresos y la Cámara de Diputados federal, la cerezota del pastel. Porque si llega a perder la Cámara Baja, adiós al sueño guajiro de reelegirse o lograr una continuidad de gobierno. Uyyy, qué emoción, y eso que ganaron los batos.

Y todavía festejan… No puede ser cierto que el PRI todavía ande festejando los resultados de las pasadas elecciones, en donde le fue como en feria. Cierto, que lo que celebran es que no perdieron el registro, pero caray, ya es el colmo. Miren lo que presume Claudia Ruiz Massieu: Una alcaldía en Aguascalientes, un diputado en Quintana Roo, 16 municipios en Durango, y zapato en Baja California y Tamaulipas. Sólo falta que la doña que cobra como dirigente nacional haya pedido los mariachis. Lo menos que debería hacer, digo, es haber presentado la renuncia, como en su momento lo hicieron otros dirigentes a los que le fue por la calle de la Amargura esquina con Suplicio. Pero hay algunos que para concha no les ganan ni las tortugas ninjas.

Primer mensaje… Miren, para no andar con tanto suspenso, los gobernadores del PRI se van a dar cuenta cuáles son las intenciones del presidente López Obrador este miércoles que sostengan una reunión en privado en la capital del país. Ya lo tuvieron los mandatarios panistas y salieron muy contentos. Ahora veremos cómo les va a los priistas. Por cierto, seguramente que el primer mandatario reconocerá la cortesía de la gobernadora de Sonora, Claudia Pavlovich, que fue la primera en salir a darle el apoyo ante las amenazas de Donald Trump a nuestro país. Esperemos que no les salga con aquello de comen y se van.

Recuerdo triste… Está demás decir que a todos los sonorenses se nos sobrecoge el corazón cuando recordamos la terrible tragedia de la guardería ABC. No hay, creo, quien no tenga grabado lo que hacía en el momento del incendio y cómo se fueron acumulando las noticias desgarradoras. Hoy se cumplen diez años de aquel terrible suceso. Diez años que tiene la misma vigencia que ese día. Fue una tragedia parecida a un enorme tornado porque se llevó todo. Todo se mezcló. Y sólo dejó un enorme vacío en todos los corazones. Y hoy, unos claman justicia, otros resignación. Hay quienes se aferran a su fe y a su esperanza. Pero todos, volvemos los ojos al cielo, porque cada 5 de junio, como dice Víctor Mendoza, el cielo de Hermosillo se llena de angelitos.

El rastrillo negro… Vaya, como se nota que los funcionarios actuales creen que están tratando con tarados, porque salen con cada cosa. La última fue otro descubrimiento del hilo negro y el agua hervida, al asegurar el director de Profeco, Ricardo Sheffield, que en las revisiones que se hacen a gasolineras encontraron un software o un aparato haciéndole de rastrillo para rasurar los litros que se venden. O sea, que descubrieron que los gasolineros ¡Dan litros incompletos! ¡Ohmaigod! Paren prensas. Detengan la sesión de la ONU y el viaje a Marte. Chale, no dudo que los chayochairos se lo hayan creído. Esta transa la hacen desde hace más de medio siglo. Espero que para la próxima mañanera no nos salga el fiscal general con la noticia de que mataron a Selena.


En fin, por eso mejor no olvidar lo que decía el Tamba Munguía, chapulín que no brinca a tiempo, se lo comen los chanates. Sale.

Se hacía grandote… Y se hacía chiquito. Como decía el Perro Bermúdez en sus crónicas, tuya, mía, pasa y sale un titiritito.

Y de cómo el chorrito de la fuente, se hacía grandote y ahora se hizo chiquito, y esto, nos dicen, trae preocupados a los estrategas de Morena, porque los cientos de millones en becas, pensiones y apoyos sólo se tradujeron en una votación global del 32% en promedio en los seis estados donde hubo elecciones el domingo. Cierto que ahorita andan agarrados como clavo ardiendo al triunfo de las dos gubernaturas, la verdad es que en los numeritos finales la víspera del juego electoral pinta mal para el año entrante en que estarán en juego los estados de Coahuila y de Hidalgo.

Saquen cuentas… Es obvio que a estas alturas ya los partidos sacaron cuentas y no son muy favorables para el partido oficial. Vean los resultados en números fríos: Del total de los 4.35 millones de votos que se emitieron en los seis estados, un total de 1.38 millones fueron para candidatos panistas, lo que le da el 31.67% de la votación, contra 1.19 millones que lograron los candidatos de Morena, que consigue el 27.48% del cómputo global. En Durango los guindas quedaron en tercer lugar. Ohmaigod. Esto confirma que fueron millones de personas que no salieron a votar y que ya no fueron motivados por la imagen del presidente Andrés Manuel López Obrador. Tampoco funcionaron los apoyos a través de las diferentes secretarías, sobre todo de Bienestar. Ni las campañas sucias en las redes sociales. Lo único que marcó la diferencia y eso trae contentos al Partido del Trabajo y al Verde, fueron las alianzas electorales. Ahora van a subirle el precio a su amor.

¿Amor o garrote? La pregunta es que sigue ahora para los estados en donde habrá elecciones el año entrante. Se irá a tirar con todo el Gobierno federal para hacer un infierno a los gobiernos locales o por el contrario, tenderá puentes de amor y paz. Porque la campañita de echarle lodo a los gobernadores en sus propios estados se vio que no funcionó. Pero ahora los pueden ahorcar presupuestalmente. Ordenar a los delegados federales o como se llamen, para que se dediquen a sabotear a gobernadores y alcaldes. Amén de la consabida campaña sucia que usan en redes sociales. Porque algo van a tener que hacer, porque no pueden llegar al 2021 más flojos que el negro que fue noqueado por el mexicano Andy Ruiz, porque estarán en juego 13 gubernaturas, congresos y la Cámara de Diputados federal, la cerezota del pastel. Porque si llega a perder la Cámara Baja, adiós al sueño guajiro de reelegirse o lograr una continuidad de gobierno. Uyyy, qué emoción, y eso que ganaron los batos.

Y todavía festejan… No puede ser cierto que el PRI todavía ande festejando los resultados de las pasadas elecciones, en donde le fue como en feria. Cierto, que lo que celebran es que no perdieron el registro, pero caray, ya es el colmo. Miren lo que presume Claudia Ruiz Massieu: Una alcaldía en Aguascalientes, un diputado en Quintana Roo, 16 municipios en Durango, y zapato en Baja California y Tamaulipas. Sólo falta que la doña que cobra como dirigente nacional haya pedido los mariachis. Lo menos que debería hacer, digo, es haber presentado la renuncia, como en su momento lo hicieron otros dirigentes a los que le fue por la calle de la Amargura esquina con Suplicio. Pero hay algunos que para concha no les ganan ni las tortugas ninjas.

Primer mensaje… Miren, para no andar con tanto suspenso, los gobernadores del PRI se van a dar cuenta cuáles son las intenciones del presidente López Obrador este miércoles que sostengan una reunión en privado en la capital del país. Ya lo tuvieron los mandatarios panistas y salieron muy contentos. Ahora veremos cómo les va a los priistas. Por cierto, seguramente que el primer mandatario reconocerá la cortesía de la gobernadora de Sonora, Claudia Pavlovich, que fue la primera en salir a darle el apoyo ante las amenazas de Donald Trump a nuestro país. Esperemos que no les salga con aquello de comen y se van.

Recuerdo triste… Está demás decir que a todos los sonorenses se nos sobrecoge el corazón cuando recordamos la terrible tragedia de la guardería ABC. No hay, creo, quien no tenga grabado lo que hacía en el momento del incendio y cómo se fueron acumulando las noticias desgarradoras. Hoy se cumplen diez años de aquel terrible suceso. Diez años que tiene la misma vigencia que ese día. Fue una tragedia parecida a un enorme tornado porque se llevó todo. Todo se mezcló. Y sólo dejó un enorme vacío en todos los corazones. Y hoy, unos claman justicia, otros resignación. Hay quienes se aferran a su fe y a su esperanza. Pero todos, volvemos los ojos al cielo, porque cada 5 de junio, como dice Víctor Mendoza, el cielo de Hermosillo se llena de angelitos.

El rastrillo negro… Vaya, como se nota que los funcionarios actuales creen que están tratando con tarados, porque salen con cada cosa. La última fue otro descubrimiento del hilo negro y el agua hervida, al asegurar el director de Profeco, Ricardo Sheffield, que en las revisiones que se hacen a gasolineras encontraron un software o un aparato haciéndole de rastrillo para rasurar los litros que se venden. O sea, que descubrieron que los gasolineros ¡Dan litros incompletos! ¡Ohmaigod! Paren prensas. Detengan la sesión de la ONU y el viaje a Marte. Chale, no dudo que los chayochairos se lo hayan creído. Esta transa la hacen desde hace más de medio siglo. Espero que para la próxima mañanera no nos salga el fiscal general con la noticia de que mataron a Selena.


En fin, por eso mejor no olvidar lo que decía el Tamba Munguía, chapulín que no brinca a tiempo, se lo comen los chanates. Sale.