/ sábado 8 de agosto de 2020

Corren rumores | Usted perdone

Fue sin querer queriendo… Como dicen los clásicos, en los ecos de la gira del presidente Andrés Manuel López Obrador hay detalles se nos pasaron, pero que vale la pena retomar porque dejan varias lecturas.

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Una de ellas, que ya se volvió chacoteo a nivel nacional, fue cuando le dijo a los yaquis que el año entrante que celebremos los 200 años de consumación de la Independencia va a pedirles disculpas por los abusos del Gobierno mexicano. Ah, a los pueblos que nos invadieron también exigirá que ofrezcan disculpas. Seguramente el Presidente pensó en España, que algo trae contra ese país. Pero olvida a los gringos, no sólo nos invadieron, sino nos arrebataron la mitad del territorio. A los franceses que nos impusieron un emperador. Y últimamente a los chinos, que están por tomar por asalto nuestra industria y comercio. Dicho con todo respeto, pero eso suena un tanto ridículo, pero sabemos que sólo es para salir en los medios y mostrarse como nacionalista. Pero, bueno.

Se animará con Biden… Sería muy bueno que siguiendo esa línea de pensamiento le reclamara a Trump por el odioso muro que está poniendo y por la humillación de millones de mexicanos. Pero, upppss, se me olvidaba que son “friens”. Y bueno, de reelegirse se animará a exigirle a este orate que haga una disculpa pública a los mexicanos y que nos regrese lo que nos quitaron, que fue lo pavimentado y donde están los malles y Disneylandia. Peor se va a poner, si se trata de Joe Biden, que trae al Gobierno mexicano un tanto cuanto atravesado por la forma en que se ha entregado a los republicanos. Bueno, ya veremos el otro año, si el Covid no piensa otra cosa.

Milagro estadístico… Como es su sana costumbre, para él claro, el doctor Hugo López-Gatell ni se tibió cuando se dio a conocer que México superó las 50 mil muertes oficiales por coronavirus. De inmediato le encontraron salida al cerco viejo y ahora sostienen que esto no más es por culpa de los mexicanos porque son gordos, diabéticos y además hipertensos. Vaya. Lo malo que las estadísticas no dan. Si todos los muertos fueran por eso entonces tendrían razón, pero de esos muchos estaban sanos. Ah, y luego, ara que vean que es aprendiz de brujo, como sus predicciones se han ido al caño, ahora para no errarle (lo malo es que siempre falla), advierte que la pandemia durará hasta tres años. Fácil, llegamos al millón de difuntos. Para entonces seguramente los culpables serán… humm, ¿los marcianos?

¿Quién ganó?... Otro tema de café con la gira presidencial es preguntar, ¿Al final del día, quién ganó? ¿Los yaquis o los yoris? Porque a la mera hora el Presidente los dejó contentos y lo único que les dio fue una comisión. Y claro, una buena ración de esperanza de que se les hará justicia y se les repondrá lo que en 1937 les entregó Tata Lázaro. Esperemos que esta investigación no quiere hacer las cosas a modo y haga una buena investigación. Porque no es lo mismo despojo que abandono. Y no es lo mismo falta de apoyo a indolencia. Ah, y lo más interesante, cada quien ganó una. No se trató el tema del bloqueo carretero, lo que implica permiso para seguir cobrando vía de paso. Pero tampoco se discutió el tema del acueducto del Novillo. Con todo y el desplegado firmado hasta por el fantasma de Cajeme, el equipo presidencial no lo contempló en la agenda ni en los discursos. Mensaje, vayan bajándole tres rayitas.


Comisiones planchadoras… Todo mundo sabe en México, bueno se supone que todos deben saber, para qué se usan las comisiones. Son para planchar los asuntos, los temas, sobre todo los enredados. No es para estudiar, ni para hacer diagnósticos, porque los problemas de México son los más diagnosticados en el sistema solar. Es para sobar, apapachar, soltar promesas, negociar en lo oscurito. Lo primero, cooptar a los líderes. Ahí están los grupos activistas de la Unison. Cuántos atendidos en comisiones no salieron con sus concesiones de cheve, por lo bajito. Con huesos en la misma Unison. En fin, seguramente ahora van a ubicar los verdaderos liderazgos en los ocho pueblos. Los van a cachondear, y para el año entrante lo que les den a toda la etnia, lo verán bien. No si tontos no son. Además, esta es una tecnología política más vieja que la rueda de molino.


Entre bien y mal... A quienes les fue bien, hay que reconocerlo fueron a los alcaldes de Hermosillo, Célida López, y al de Cajeme, Sergio Pablo Mariscal, porque les confirmaron de que los 500 millones prometidos a principio de año sí van a llegar. Bueno, luego que camine el elefante reumático, pero llegarán. No supimos si por fin Sara Valle logró su propósito de entrevistarse con el Presidente, porque no hubo nada para ella en los discursos y en las fotos. Quien seguramente se apuntó palomita fue la gobernadora Claudia Pavlovich porque el mensaje presidencial fue claro, hay una deferencia marcada a favor de la mandataria estatal. Eso se vio en el informe de Seguridad, donde ponderó lo bueno y no tocó lo malo. Además, ofreció más ayuda. Ah, y prometió volver pronto, cuando menos a ver cómo va el asunto de los yaquis.


Dejaron colgados… A los que no pelaron las fuerzas presidenciales fueron a los del sindicato minero, a los productores del Sur, a los padres con niños enfermos de cáncer, a los activistas del movimiento Anti AMLO, mujeres rastreadoras y hasta los de la CNTE. Sin embargo, al que le echaron a perder el día, aunque ya le habían confirmado lo de los millones, fue al alcalde Mariscal de Ciudad Obregón, ya que al pobre lo mandaron en el convoy que salió por enfrente de la zona militar y ahí le tundieron durísimo. No sólo abucheos, sino hasta mentadas de madre. Vamos, hasta los de Morena y funcionarios de Bienestar le estuvieron gritando cuando pasó. Si pensaba reelegirse se me hace que le van a llegar malos reportes al Presidente. Ni modo, achí la vida.


En fin, para que buscarle si hoy es sabadito lindo y querido. Por eso no olviden lo que dijo el Epitacio Robles, grítenme piedras del campo, pero pongan algo para la cheve. Sale.


Fue sin querer queriendo… Como dicen los clásicos, en los ecos de la gira del presidente Andrés Manuel López Obrador hay detalles se nos pasaron, pero que vale la pena retomar porque dejan varias lecturas.

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Una de ellas, que ya se volvió chacoteo a nivel nacional, fue cuando le dijo a los yaquis que el año entrante que celebremos los 200 años de consumación de la Independencia va a pedirles disculpas por los abusos del Gobierno mexicano. Ah, a los pueblos que nos invadieron también exigirá que ofrezcan disculpas. Seguramente el Presidente pensó en España, que algo trae contra ese país. Pero olvida a los gringos, no sólo nos invadieron, sino nos arrebataron la mitad del territorio. A los franceses que nos impusieron un emperador. Y últimamente a los chinos, que están por tomar por asalto nuestra industria y comercio. Dicho con todo respeto, pero eso suena un tanto ridículo, pero sabemos que sólo es para salir en los medios y mostrarse como nacionalista. Pero, bueno.

Se animará con Biden… Sería muy bueno que siguiendo esa línea de pensamiento le reclamara a Trump por el odioso muro que está poniendo y por la humillación de millones de mexicanos. Pero, upppss, se me olvidaba que son “friens”. Y bueno, de reelegirse se animará a exigirle a este orate que haga una disculpa pública a los mexicanos y que nos regrese lo que nos quitaron, que fue lo pavimentado y donde están los malles y Disneylandia. Peor se va a poner, si se trata de Joe Biden, que trae al Gobierno mexicano un tanto cuanto atravesado por la forma en que se ha entregado a los republicanos. Bueno, ya veremos el otro año, si el Covid no piensa otra cosa.

Milagro estadístico… Como es su sana costumbre, para él claro, el doctor Hugo López-Gatell ni se tibió cuando se dio a conocer que México superó las 50 mil muertes oficiales por coronavirus. De inmediato le encontraron salida al cerco viejo y ahora sostienen que esto no más es por culpa de los mexicanos porque son gordos, diabéticos y además hipertensos. Vaya. Lo malo que las estadísticas no dan. Si todos los muertos fueran por eso entonces tendrían razón, pero de esos muchos estaban sanos. Ah, y luego, ara que vean que es aprendiz de brujo, como sus predicciones se han ido al caño, ahora para no errarle (lo malo es que siempre falla), advierte que la pandemia durará hasta tres años. Fácil, llegamos al millón de difuntos. Para entonces seguramente los culpables serán… humm, ¿los marcianos?

¿Quién ganó?... Otro tema de café con la gira presidencial es preguntar, ¿Al final del día, quién ganó? ¿Los yaquis o los yoris? Porque a la mera hora el Presidente los dejó contentos y lo único que les dio fue una comisión. Y claro, una buena ración de esperanza de que se les hará justicia y se les repondrá lo que en 1937 les entregó Tata Lázaro. Esperemos que esta investigación no quiere hacer las cosas a modo y haga una buena investigación. Porque no es lo mismo despojo que abandono. Y no es lo mismo falta de apoyo a indolencia. Ah, y lo más interesante, cada quien ganó una. No se trató el tema del bloqueo carretero, lo que implica permiso para seguir cobrando vía de paso. Pero tampoco se discutió el tema del acueducto del Novillo. Con todo y el desplegado firmado hasta por el fantasma de Cajeme, el equipo presidencial no lo contempló en la agenda ni en los discursos. Mensaje, vayan bajándole tres rayitas.


Comisiones planchadoras… Todo mundo sabe en México, bueno se supone que todos deben saber, para qué se usan las comisiones. Son para planchar los asuntos, los temas, sobre todo los enredados. No es para estudiar, ni para hacer diagnósticos, porque los problemas de México son los más diagnosticados en el sistema solar. Es para sobar, apapachar, soltar promesas, negociar en lo oscurito. Lo primero, cooptar a los líderes. Ahí están los grupos activistas de la Unison. Cuántos atendidos en comisiones no salieron con sus concesiones de cheve, por lo bajito. Con huesos en la misma Unison. En fin, seguramente ahora van a ubicar los verdaderos liderazgos en los ocho pueblos. Los van a cachondear, y para el año entrante lo que les den a toda la etnia, lo verán bien. No si tontos no son. Además, esta es una tecnología política más vieja que la rueda de molino.


Entre bien y mal... A quienes les fue bien, hay que reconocerlo fueron a los alcaldes de Hermosillo, Célida López, y al de Cajeme, Sergio Pablo Mariscal, porque les confirmaron de que los 500 millones prometidos a principio de año sí van a llegar. Bueno, luego que camine el elefante reumático, pero llegarán. No supimos si por fin Sara Valle logró su propósito de entrevistarse con el Presidente, porque no hubo nada para ella en los discursos y en las fotos. Quien seguramente se apuntó palomita fue la gobernadora Claudia Pavlovich porque el mensaje presidencial fue claro, hay una deferencia marcada a favor de la mandataria estatal. Eso se vio en el informe de Seguridad, donde ponderó lo bueno y no tocó lo malo. Además, ofreció más ayuda. Ah, y prometió volver pronto, cuando menos a ver cómo va el asunto de los yaquis.


Dejaron colgados… A los que no pelaron las fuerzas presidenciales fueron a los del sindicato minero, a los productores del Sur, a los padres con niños enfermos de cáncer, a los activistas del movimiento Anti AMLO, mujeres rastreadoras y hasta los de la CNTE. Sin embargo, al que le echaron a perder el día, aunque ya le habían confirmado lo de los millones, fue al alcalde Mariscal de Ciudad Obregón, ya que al pobre lo mandaron en el convoy que salió por enfrente de la zona militar y ahí le tundieron durísimo. No sólo abucheos, sino hasta mentadas de madre. Vamos, hasta los de Morena y funcionarios de Bienestar le estuvieron gritando cuando pasó. Si pensaba reelegirse se me hace que le van a llegar malos reportes al Presidente. Ni modo, achí la vida.


En fin, para que buscarle si hoy es sabadito lindo y querido. Por eso no olviden lo que dijo el Epitacio Robles, grítenme piedras del campo, pero pongan algo para la cheve. Sale.