Pago sí tengo… El Partido Verde está en problemas por la contratación que hizo de los llamados influencers de redes sociales, que en el viejo argot de la política electoral se les llamaba líderes de opinión, hoy es más caché decir influencer. A poco no.
En fin, el punto es que el INE determinó que este partido con toda premeditación, alevosía y ventaja contrató a varios de estos personajes, entre los que están chavos movidos, artistas y deportistas, para que en plena veda electoral le echaran porras al PVEM. Esto se supone está penado por la ley, pero les dijeron que fingieran demencia y que eso no era propaganda, que les había salido del corazón. Pero, caray, como cae más pronto un hablador, sobre todo si es cojo, algunos soltaron la lengua y ahora este partido tendrá que pagar una multa calculada en más o menos dos millones de dólares.
Mira cómo estoy temblando… Pero asustar con una multa de este nivel al Verde, es como querer enseñarle a contar charras a Polo Polo. Porque esta es una inversión calculada. Esos 40 millones de pesos que pagará de multa le va a sacar diez veces más con las prerrogativas que consiga para el siguiente año. Porque no es la primera ni la última vez que se aviente una jugada de este tipo. En una ocasión usaron a Raúl Araiza para que se pusiera en una telenovela en el 2009 una camiseta que decía “tengo el corazón verde”. Y lo mismo hicieron en el 2012 y en el 2018. El Verde se ha especializado en brincarse la ley y todavía sacarle rentabilidad política y financiera. Invierte con riesgo de multas y luego lo compensa con lo que le sale en prerrogativas.
Color camaleón… El Verde hay que reconocerlo tiene la ventaja de no ofrecer una ideología política que lo ubique en algún punto de la geometría electoral. No es de derecha, no es de izquierda. Pero puede ser de cualquier punto. En el 2000 se alió al PAN para llevar a Fox al poder. Luego lo hizo con el PRI cuando vio que podía ganar Peña Nieto. En el 2018 olfateó que ahora el viento venía por el rumbo de Morena, con quien la juega hasta ahora y vaya que les ha dado beneficios. De tontos no los pueden acusar, porque saben alinearse con el arbolito que más sombra y frutos da cada temporada. Ya quisieran hacerlo otros que andan en la cuerda floja. Aquí en Sonora ya están bajo el árbol que dará más sombra.
Un pequeño bache... Hoy tiene un pequeño bache o tope que brincar. Porque ante tantas ilegalidades por fin alguien está pidiendo que ya no los multen, sino que les retiren el registro como partido. La legisladora Martha Tagle y los activistas sociales Alfredo Lecona y Mónica Tapia presentaron un escrito ante el INE, el cual fue avalado por 160 mil firmas para que de una vez por todas el Verde pierda su registro como partido. Este documento ya está en la Sala Regional Especializada y en unas semanas se sabrá qué resuelve. Conociendo nuestro sistema político, lo más probable es que les saquen tarjeta amarilla, les den una nalgada y les pedirán que se porten bien. No creo que pase de ahí, menos ahora que es un aliado tan importante para ya saben quién. Además, en México el que la hace, no paga ni el enganche.
Los Maléficos… Vaya pues no sólo había una red de espionaje telefónico con el sistema Pegasus, sino que también en la Unidad de Inteligencia Financiera estaban checando cómo andaban las cuentas de la oposición. Al grupo cercano del presidente Andrés Manuel López Obrador le abrieron un archivo que se llamaba “Los Maléficos”, de acuerdo con Santiago Nieto, ahora titular de esta dependencia. En esta lista, al Presidente lo identificaban como el Gallo. Entre otros colaboradores estaban vigilados Olga Sánchez Cordero y hasta el gobernador electo de Sonora, Alfonso Durazo Montaño. Claro, varios periodistas incómodos como Carmen Aristegui y Víctor Trujillo, que seguro a este último lo siguen checando. Ah, pero dicen que ahora con este nuevo gobierno no se vigila a nadie. Hummmm, me repite la pregunta por favor.
Adiós mapita, adiós... Todo hace indicar que el mapa epidemiológico que en su momento Hugo López-Gatell nos lo vendió como la octava maravilla del mundo mundial se ha ido degradando, pero más que eso, ha comenzado a estorbar los planes del Gobierno federal y por lo mismo no les extrañe que en breve cause baja en el activo. El propio López-Gatell mandó una señal al anunciar que así esté el mapa en rojo sarpullido no habrá restricciones de movilidad. En pocas palabras, el mentado mapa sirve para usarse cuando uno va al baño y no precisamente a bañarse. Menos ahora, que se corre el riesgo que para el primero de agosto esté en rojo y de hacerle caso, adiós Nicanor a la consulta popular. Es más, quizá esta misma semana lo marquen como baja en el activo.
Total no pasa nada... De nueva cuenta las autoridades americanas negaron el cruce fronterizo para actividades no esenciales, o sea para la cháchara. Pero miren qué incongruencia. Mientras los gringos cuidan sus fronteras y exigen certificados de vacunación o de exámenes Covid, en México dejamos entrar a cualquiera por la frontera y por los aeropuertos. No necesitan nada y en un descuido ni pasaporte. Por eso no extrañe que en breve estemos hasta las manitas de contagios de las otras variantes más agresivas del Covid, como la Delta. Todo por la simulación y hacer creer al mundo que aquí no pasa nada. Que aquí el Covid nomás se conoce en los periódicos. Bueno, así la queremos, así la vamos a pagar.
En fin, mejor se portan bien y recuerden lo que decía el Gaspar Tinojo, el que a buen árbol se arrima, del cielo le caen las hojas. Sale.
