/ viernes 14 de enero de 2022

Democracia y debate | La Master

Los procesos de comunicación mediante las redes sociales siguen creciendo, desarrollándose y llenando de contenido millones de dispositivos, así hemos pasamos del Homo Videns de Sartori; Transitando por las duras críticas de Umberto Eco a las redes; Disfrutado el gran ensayo, “La sociedad del espectáculo”, de Vargas Llosa; Conocido, la comunicación y el poder, de Manuel Castells, a un momento en el cual la pandemia ha generado más y más contenidos en las redes.

Con o sin pandemia, el incremento de los personajes y los contenidos que podemos ver en múltiples dispositivos ha sido constante, la pandemia ha generado más variedad en los mismos y debido al encierro forzado también mayor consumo de éstos, que son de todo tipo, unos muy especializados en temas deportivos, sociales, culturales, otros políticos, algunos más incluso que incitan a la violencia, en fin, hay de todo y para todos.

También se han producido consecuencias, muchas lamentables y otras muy afortunadas. Hoy quiero hacer una pausa para hablar de un contenido que resulta y genera consecuencias afortunadas.

Marilyn Miles, conocida en el mundo de las redes como “La Master”, “recetasdelamaster”, es su cuenta en Instagram, ha logrado conectar mediante una honesta forma de comunicar, con un gran público.

Ella originaria de Hermosillo, Sonora y ahora viviendo en El Paso, Texas, ha sabido llevar su gusto por la cocina a niveles de comunicación que resultan entretenidos, divertidos y también útiles, no sólo para un público en particular, sino para un público muy amplio, ya que resultado de su propio contenido, ha convertido en parte de las historias a su familia.

Ella ya era un personaje (dicho esto en el mejor de los sentidos), y ha convertido en personajes a sus allegados, por ejemplo, sus hijas son “las artistas”, su esposo es “el hombre”, es más el novio de una de las artistas es también ya un personaje conocido como “el artisto”. Así es como la audiencia, nos vamos identificando con alguna o con alguno de los que forman parte del elenco, que incluye a tres perritas.

También nos ha llevado de la mano de sus recetas y gusto por la decoración a conocer su casa, su estilo de vida, su familia y sus viajes. Ya tenemos varias vacaciones que hacemos juntos. Hemos cantado en el karaoke y nos hemos divertido en las compras, pero todavía nos brinda más y conocemos ya a sus padres, a sus hermanos, sobrinos, a su abuela (Mamachía), con la que celebramos su cumpleaños 90. Ahora ya todos queremos una “Keny” en nuestras casas.

Sumado a lo anterior y dando un uso responsable a su popularidad promociona el consumo de productos que considera merecen ser conocidos, es solidaria.

Así como antes la televisión nos ofrecía contenido para diferentes audiencias, ahora las redes, en particular las de “La Master”, nos brinda un contenido, “para toda la familia”. Esto nos da un respiro ante tantas malas noticias que nos rodean, nos divierte y con suerte comeremos algo rico, en el marco de una hermosa decoración.

Nota: no sé qué esperan los editores para sacar al mercado no uno, varios libros de recetas y decoraciones. Ya me imagino las filas de personas con libro en mano, esperando que se los firme “La Master”.

Nota 2: que levante la mano el que no haya comido una receta de La Master.


Los procesos de comunicación mediante las redes sociales siguen creciendo, desarrollándose y llenando de contenido millones de dispositivos, así hemos pasamos del Homo Videns de Sartori; Transitando por las duras críticas de Umberto Eco a las redes; Disfrutado el gran ensayo, “La sociedad del espectáculo”, de Vargas Llosa; Conocido, la comunicación y el poder, de Manuel Castells, a un momento en el cual la pandemia ha generado más y más contenidos en las redes.

Con o sin pandemia, el incremento de los personajes y los contenidos que podemos ver en múltiples dispositivos ha sido constante, la pandemia ha generado más variedad en los mismos y debido al encierro forzado también mayor consumo de éstos, que son de todo tipo, unos muy especializados en temas deportivos, sociales, culturales, otros políticos, algunos más incluso que incitan a la violencia, en fin, hay de todo y para todos.

También se han producido consecuencias, muchas lamentables y otras muy afortunadas. Hoy quiero hacer una pausa para hablar de un contenido que resulta y genera consecuencias afortunadas.

Marilyn Miles, conocida en el mundo de las redes como “La Master”, “recetasdelamaster”, es su cuenta en Instagram, ha logrado conectar mediante una honesta forma de comunicar, con un gran público.

Ella originaria de Hermosillo, Sonora y ahora viviendo en El Paso, Texas, ha sabido llevar su gusto por la cocina a niveles de comunicación que resultan entretenidos, divertidos y también útiles, no sólo para un público en particular, sino para un público muy amplio, ya que resultado de su propio contenido, ha convertido en parte de las historias a su familia.

Ella ya era un personaje (dicho esto en el mejor de los sentidos), y ha convertido en personajes a sus allegados, por ejemplo, sus hijas son “las artistas”, su esposo es “el hombre”, es más el novio de una de las artistas es también ya un personaje conocido como “el artisto”. Así es como la audiencia, nos vamos identificando con alguna o con alguno de los que forman parte del elenco, que incluye a tres perritas.

También nos ha llevado de la mano de sus recetas y gusto por la decoración a conocer su casa, su estilo de vida, su familia y sus viajes. Ya tenemos varias vacaciones que hacemos juntos. Hemos cantado en el karaoke y nos hemos divertido en las compras, pero todavía nos brinda más y conocemos ya a sus padres, a sus hermanos, sobrinos, a su abuela (Mamachía), con la que celebramos su cumpleaños 90. Ahora ya todos queremos una “Keny” en nuestras casas.

Sumado a lo anterior y dando un uso responsable a su popularidad promociona el consumo de productos que considera merecen ser conocidos, es solidaria.

Así como antes la televisión nos ofrecía contenido para diferentes audiencias, ahora las redes, en particular las de “La Master”, nos brinda un contenido, “para toda la familia”. Esto nos da un respiro ante tantas malas noticias que nos rodean, nos divierte y con suerte comeremos algo rico, en el marco de una hermosa decoración.

Nota: no sé qué esperan los editores para sacar al mercado no uno, varios libros de recetas y decoraciones. Ya me imagino las filas de personas con libro en mano, esperando que se los firme “La Master”.

Nota 2: que levante la mano el que no haya comido una receta de La Master.