/ viernes 19 de julio de 2019

Diálogo | Trump y la política del miedo

A lo largo de la historia, todas las instituciones que han tenido el poder han utilizado el miedo para conseguir sus objetivos y pareciera que el presidente Donald Trump está determinado a utilizarlo como su motor principal para lograr su reelección al frente de la Casa Blanca.

Tan sólo esta semana la agenda nacional norteamericana se centró en tres eventos de orden migratorio, que exhiben la política de polarización que impulsa el presidente Trump y que alimenta la xenofobia y el racismo en el vecino país.

El primero fue el anuncio de la implementación de redadas masivas para expulsar a un millón de inmigrantes indocumentados, de los cuales ya tienen sus nombres en lista, así como las órdenes judiciales, lo que permitiría que el proceso de deportación sea expedito.

Esto ha sembrado el miedo en la comunidad migrante, la gente no sale de sus casas y muchos de ellos no se han presentado a laborar por el temor a ser arrestados y deportados por las autoridades migratorias.

El mayor miedo que prevalece en la comunidad migrante es ser separados de sus familias, de sus hijos, que en muchos de los casos son ciudadanos americanos por nacimiento.

El segundo fue el incendiario tuit que desató una polémica racial, donde exhortó a cuatro congresistas demócratas a que: “regresaran a sus países de origen”.

Mediante el siguiente tuit: “Qué interesante ver a las congresistas demócratas ‘progresistas’, que proceden de países cuyos gobiernos son una completa y total catástrofe, y los peores, los más corruptos e ineptos del mundo (ni siquiera funcionan), decir en voz alta y con desprecio al pueblo de Estados Unidos, la nación más grande y poderosa sobre la Tierra, cómo llevar el Gobierno”, y añadió “¿Por qué no vuelven a sus países y ayudan a arreglar esos lugares, que están totalmente rotos e infectados de crímenes? Entonces que vuelvan aquí y nos digan cómo se hace”, subrayó.

Las congresistas demócratas aludidas son Alexandra Ocasio-Cortez, neoyorquina y de origen puertorriqueño; Pressley de origen afroamericano y nacida en Ohio; Ilhan Omar la única nacida fuera de EU y quien obtuvo su nacionalidad cuando era adolecente, después de llegar de Somalia y Rashida Tlaib, nacida en Detroit de padres palestinos.

Todas ellas tienen una particularidad, ganaron por un amplio margen de votación, llegaron con una alta legitimación que otorga la fuerza del voto ciudadano y que representa la pluralidad y diversidad que ha engrandecido a la Unión Americana.

El tercero y más preocupante es la publicación de las nuevas normas de asilo en EU, que agrega nuevos obstáculos de elegibilidad para todo migrante que intenta llegar por la frontera Sur.

La norma también se aplicará a niños que hayan cruzado la frontera solos.

Existen algunas excepciones para aquellos que se les haya negado el asilo en los países que cruzaron previamente o las personas que hayan sido sujetos de trata.

A una semana de que venza el plazo que EU impuso a México para frenar el flujo migratorio. Esta decisión unilateral, le da la vuelta a la insistencia que ha mantenido EU para que México y Guatemala se convirtieran en tercer país seguro; es decir ya lo somos y a la mala.

Con las nuevas restricciones de asilo de EU, las solicitudes que México recibirá se verán incrementadas significativamente, ocasionando una presión adicional a la crisis migratoria que hoy se enfrenta.

Es preciso destacar que las solicitudes de asilo en nuestro País han alcanzado un récord en el primer semestre del año, conforme a los datos de la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar) se registraron más de 31 mil solicitudes cifra que supera por mucho el primer semestre del año 2018.

El alto comisionado Filippo Grandi de Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) ha manifestado que esta medida pondrá en riesgo a las personas más vulnerables que invocan el derecho a la protección internacional por violencia o persecución en sus países de origen.

La política del miedo sigue operando y está avivando la discriminación entre quienes tienen y quienes no, entre ellos y nosotros y está dejando desprotegida a la población más marginada.

Es momento de revertir el ciclo de la ira y división que las políticas del miedo están fomentando.

Comentarios y retroalimentación a través de:

Correo: davidfigueroao@me.com

Twitter: @DavidFigueroaO

Facebook: David Figueroa O.

David Figueroa Ortega es empresario, ex cónsul de México en Los Ángeles y San José, California; ex diputado federal; ex alcalde de Agua Prieta; ex dirigente del PAN en Sonora.

A lo largo de la historia, todas las instituciones que han tenido el poder han utilizado el miedo para conseguir sus objetivos y pareciera que el presidente Donald Trump está determinado a utilizarlo como su motor principal para lograr su reelección al frente de la Casa Blanca.

Tan sólo esta semana la agenda nacional norteamericana se centró en tres eventos de orden migratorio, que exhiben la política de polarización que impulsa el presidente Trump y que alimenta la xenofobia y el racismo en el vecino país.

El primero fue el anuncio de la implementación de redadas masivas para expulsar a un millón de inmigrantes indocumentados, de los cuales ya tienen sus nombres en lista, así como las órdenes judiciales, lo que permitiría que el proceso de deportación sea expedito.

Esto ha sembrado el miedo en la comunidad migrante, la gente no sale de sus casas y muchos de ellos no se han presentado a laborar por el temor a ser arrestados y deportados por las autoridades migratorias.

El mayor miedo que prevalece en la comunidad migrante es ser separados de sus familias, de sus hijos, que en muchos de los casos son ciudadanos americanos por nacimiento.

El segundo fue el incendiario tuit que desató una polémica racial, donde exhortó a cuatro congresistas demócratas a que: “regresaran a sus países de origen”.

Mediante el siguiente tuit: “Qué interesante ver a las congresistas demócratas ‘progresistas’, que proceden de países cuyos gobiernos son una completa y total catástrofe, y los peores, los más corruptos e ineptos del mundo (ni siquiera funcionan), decir en voz alta y con desprecio al pueblo de Estados Unidos, la nación más grande y poderosa sobre la Tierra, cómo llevar el Gobierno”, y añadió “¿Por qué no vuelven a sus países y ayudan a arreglar esos lugares, que están totalmente rotos e infectados de crímenes? Entonces que vuelvan aquí y nos digan cómo se hace”, subrayó.

Las congresistas demócratas aludidas son Alexandra Ocasio-Cortez, neoyorquina y de origen puertorriqueño; Pressley de origen afroamericano y nacida en Ohio; Ilhan Omar la única nacida fuera de EU y quien obtuvo su nacionalidad cuando era adolecente, después de llegar de Somalia y Rashida Tlaib, nacida en Detroit de padres palestinos.

Todas ellas tienen una particularidad, ganaron por un amplio margen de votación, llegaron con una alta legitimación que otorga la fuerza del voto ciudadano y que representa la pluralidad y diversidad que ha engrandecido a la Unión Americana.

El tercero y más preocupante es la publicación de las nuevas normas de asilo en EU, que agrega nuevos obstáculos de elegibilidad para todo migrante que intenta llegar por la frontera Sur.

La norma también se aplicará a niños que hayan cruzado la frontera solos.

Existen algunas excepciones para aquellos que se les haya negado el asilo en los países que cruzaron previamente o las personas que hayan sido sujetos de trata.

A una semana de que venza el plazo que EU impuso a México para frenar el flujo migratorio. Esta decisión unilateral, le da la vuelta a la insistencia que ha mantenido EU para que México y Guatemala se convirtieran en tercer país seguro; es decir ya lo somos y a la mala.

Con las nuevas restricciones de asilo de EU, las solicitudes que México recibirá se verán incrementadas significativamente, ocasionando una presión adicional a la crisis migratoria que hoy se enfrenta.

Es preciso destacar que las solicitudes de asilo en nuestro País han alcanzado un récord en el primer semestre del año, conforme a los datos de la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar) se registraron más de 31 mil solicitudes cifra que supera por mucho el primer semestre del año 2018.

El alto comisionado Filippo Grandi de Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) ha manifestado que esta medida pondrá en riesgo a las personas más vulnerables que invocan el derecho a la protección internacional por violencia o persecución en sus países de origen.

La política del miedo sigue operando y está avivando la discriminación entre quienes tienen y quienes no, entre ellos y nosotros y está dejando desprotegida a la población más marginada.

Es momento de revertir el ciclo de la ira y división que las políticas del miedo están fomentando.

Comentarios y retroalimentación a través de:

Correo: davidfigueroao@me.com

Twitter: @DavidFigueroaO

Facebook: David Figueroa O.

David Figueroa Ortega es empresario, ex cónsul de México en Los Ángeles y San José, California; ex diputado federal; ex alcalde de Agua Prieta; ex dirigente del PAN en Sonora.