/ miércoles 8 de junio de 2022

El columnario | “Somos creativos sonorenses - No oposición…”  

La situación actual en relación a la administración de la cultura en Sonora no va del todo bien, por el contrario, son ya bastantes los comentarios en relación a la manera en que la actual administración del ISC ha operado desde hace meses (por cierto, nada positivos), ya que la forma de proceder en relación a una correcta empatía con el sector cultural ha sido por demás nula, provocando con ello una acumulación de situaciones por resolver de manera urgente e inmediata. Conceptos y expresiones como incapacidad, falta de liderazgo, de tacto e impericia, falta de rumbo, entre muchos otros, son una constante entre las expresiones por parte de varios artistas y hacedores creativos. Expresiones como “le quedó grande el puesto”, se suman a la lista de lo anterior y es que se ha evidenciado la manera en que contesta y responde a las personas que se dirigen realizando alguna observación o crítica respetuosa, generalmente reacciona visceralmente en redes sociales, aspecto por demás lamentable. No es de extrañarse que miles de personas hayan firmado la carta “Salvemos el Rumbo Cultural en Sonora”, recordemos el caso del reconocido tenor sonorense Jesús León, quien en su momento denunció malos tratos por parte de quienes lo anunciaron y contactaron para una tentativa presentación en el FAOT de la pasada edición, y del cual se publicó en este mismo espacio, (“Sobre el caso Jesús León-Tenor” El Sol de Hermosillo-Cultura-jueves 03 de febrero de 2022 / Columnario, Mtro. Benjamín Rosales). desatando una gran polémica esto debido a la manera y la forma en la que se manejó dicho asunto, así como el incorrecto, pésimo y errático trato que se le dio al artista por parte del mismo Instituto Sonorense de Cultura, dejando un precedente por demás muy negativo en la historia del mismo, amén de los múltiples tropiezos que han tenido desde que se tomó posesión en dicho cargo. Lo que ya de por sí representa una penosa situación.

Sin embargo, la comunidad cultural ha observado discretamente la manera y el mal proceder en relación a la falta de una verdadera y organizada vinculación con el sector artístico, volcándose en una gran apatía en cuanto a la poca o nula participación de programas, eventos y demás convocatorias por parte del mismo ISC. La institución actualmente se encuentra rebasada por los artistas que han desarrollado su carrera profesional con proyectos alternativos y de gran calidad creativa, sin necesidad de depender directamente del ISC, sin embargo, desgraciadamente otros, me refiero a una minoría muy reducida ven al Instituto como una fuente de ingresos y en el peor de los casos como el único empleador de su trabajo creativo, laboral, curricular, etc. lo que ya de por sí resulta irrisorio.

Por lo que me sorprende enormemente que dicha problemática haya hecho manifiesto, trascendiendo al panorama nacional, siendo retomado en la columna del reconocido escritor Humberto Musacchio la semana antepasada, para el periódico Excélsior en su acostumbrada columna semanal, titulado “Quejas contra Beatriz Aldaco”, donde se exhiben una serie de situaciones en relación al tema. Además, y dicho sea de paso que el Consejo Ciudadano de Cultura, mejor conocido por sus siglas como (CCC), ciertamente han sido la única organización que ha hecho o realizado varias recomendaciones de manera oportuna, de manera seria y respetuosa, apelando al diálogo y criterio, para fortalecer con ello la estructura cultural en la entidad, por el contrario, no se ha tenido una respuesta concreta por parte de las autoridades. Cabe mencionar, dichas observaciones están correctamente fundamentadas.

Por cierto, debo aclarar que lo anteriormente expresado en ningún momento pretende denostar aspectos en contra de la 4T en Sonora, las observaciones y la crítica es para quien se supone debería “dirigir” correctamente la dependencia, ya que en lo particular ha dejado mucho o bastante que desear... Lo que de alguna manera me lleva a reflexionar sobre las personas que ocupan cargos relevantes en el Gobierno, desconociendo a fondo la manera de administrar dichas dependencias y no al Gobierno en turno. Esperemos no estar contemplando un retroceso en la vida cultural de Sonora. “Politizar” la cultura nunca ha sido bueno.

No es de extrañarse que en la mayoría de los casos existan personas que en lo particular no piensen igual ó bien no compartan sus ideas, pensamientos, haya sido “Bloqueado/as” de la plataforma o red social mejor conocida como Facebook. Enemistarse con la gran mayoría de los creadores, artistas e intelectuales del conglomerado, considero no es la mejor solución, ya que se supone trabaja para todos y no para unos cuantos, se juró ante la autoridad estatal, hacer respetar la Constitución de los Estados Unidos Mexicanos, cosa que al parecer no se está ejerciendo de manera correcta y adecuada. Por el contrario, sólo se está velando por intereses particulares, ¡mejor que se afufé…!

Incluso, tengo conocimiento de que grandes, valiosos y reconocidos artistas con una gran trayectoria dentro de la cultura y las artes, han preferido mantenerse al margen de la institución manteniéndose en un autoexilio temporal, mientras no exista una correcta administración de los recursos tanto culturales como capitales para los que han sido destinados, así como el respeto irrestricto a la noble y gran labor de los artistas que han fortalecido la historia cultural dentro de la diversidad y pluriculturalidad en nuestro estado, en todas y cada una de las áreas.

Existen varios ejemplos de desencuentros con la comunidad cultural, ejemplos varios, además de sostener una antigua disputa con la reconocida y prestigiada escritora Eve Gil, de quien me informan se ha ensañado de manera un tanto particular, desprestigiando su labor creativo-literaria, tengo entendido con una antigüedad de años atrás.

De último momento, me comentan sobre el cierre temporal de Musas, lo anterior debido a múltiples aspectos como la falta de mantenimiento, entre otros. Pregunto: ¿Por qué no se le dio el debido servicio a las instalaciones en tiempo oportuno, etc.? ¿En qué condiciones de resguardo, temperatura adecuada para cada una de las obras quedarán? ¿Quién garantizará su correcta seguridad, etc.? No obstante, lo anterior se viene a sumar a la desafortunada y larga lista de aspectos nada positivos de la actual administración cultural en Sonora. Dicho cierre ha levantado por sí, ya una serie de rumores, en la cual por cierto Musacchio ha hecho referencia en su columna de esta semana. No es de sorprender que varios donantes de prestigiado nivel muestren su molestia y preocupación en torno a este tema.

Los artistas en Sonora No somos “oposición”, somos ciudadanos e individuos libres que reclamamos el correcto funcionamiento de una Institución hecha por y para los creativos de la entidad, dependencia por demás muy lastimada durante mucho tiempo en muchos aspectos… Por lo que deseamos ver un cambio de fondo en relación a la manera de gobernar y marcar la diferencia. Por lo que exigimos de manera respetuosa al C. Gobernador Constitucional del Estado de Sonora. Dr. Alfonso Durazo Montaño atienda de manera oportuna y pertinente lo anterior. Agradeciendo de antemano su atención a la misma, así como el compromiso adquirido por y para los sonorenses.


La situación actual en relación a la administración de la cultura en Sonora no va del todo bien, por el contrario, son ya bastantes los comentarios en relación a la manera en que la actual administración del ISC ha operado desde hace meses (por cierto, nada positivos), ya que la forma de proceder en relación a una correcta empatía con el sector cultural ha sido por demás nula, provocando con ello una acumulación de situaciones por resolver de manera urgente e inmediata. Conceptos y expresiones como incapacidad, falta de liderazgo, de tacto e impericia, falta de rumbo, entre muchos otros, son una constante entre las expresiones por parte de varios artistas y hacedores creativos. Expresiones como “le quedó grande el puesto”, se suman a la lista de lo anterior y es que se ha evidenciado la manera en que contesta y responde a las personas que se dirigen realizando alguna observación o crítica respetuosa, generalmente reacciona visceralmente en redes sociales, aspecto por demás lamentable. No es de extrañarse que miles de personas hayan firmado la carta “Salvemos el Rumbo Cultural en Sonora”, recordemos el caso del reconocido tenor sonorense Jesús León, quien en su momento denunció malos tratos por parte de quienes lo anunciaron y contactaron para una tentativa presentación en el FAOT de la pasada edición, y del cual se publicó en este mismo espacio, (“Sobre el caso Jesús León-Tenor” El Sol de Hermosillo-Cultura-jueves 03 de febrero de 2022 / Columnario, Mtro. Benjamín Rosales). desatando una gran polémica esto debido a la manera y la forma en la que se manejó dicho asunto, así como el incorrecto, pésimo y errático trato que se le dio al artista por parte del mismo Instituto Sonorense de Cultura, dejando un precedente por demás muy negativo en la historia del mismo, amén de los múltiples tropiezos que han tenido desde que se tomó posesión en dicho cargo. Lo que ya de por sí representa una penosa situación.

Sin embargo, la comunidad cultural ha observado discretamente la manera y el mal proceder en relación a la falta de una verdadera y organizada vinculación con el sector artístico, volcándose en una gran apatía en cuanto a la poca o nula participación de programas, eventos y demás convocatorias por parte del mismo ISC. La institución actualmente se encuentra rebasada por los artistas que han desarrollado su carrera profesional con proyectos alternativos y de gran calidad creativa, sin necesidad de depender directamente del ISC, sin embargo, desgraciadamente otros, me refiero a una minoría muy reducida ven al Instituto como una fuente de ingresos y en el peor de los casos como el único empleador de su trabajo creativo, laboral, curricular, etc. lo que ya de por sí resulta irrisorio.

Por lo que me sorprende enormemente que dicha problemática haya hecho manifiesto, trascendiendo al panorama nacional, siendo retomado en la columna del reconocido escritor Humberto Musacchio la semana antepasada, para el periódico Excélsior en su acostumbrada columna semanal, titulado “Quejas contra Beatriz Aldaco”, donde se exhiben una serie de situaciones en relación al tema. Además, y dicho sea de paso que el Consejo Ciudadano de Cultura, mejor conocido por sus siglas como (CCC), ciertamente han sido la única organización que ha hecho o realizado varias recomendaciones de manera oportuna, de manera seria y respetuosa, apelando al diálogo y criterio, para fortalecer con ello la estructura cultural en la entidad, por el contrario, no se ha tenido una respuesta concreta por parte de las autoridades. Cabe mencionar, dichas observaciones están correctamente fundamentadas.

Por cierto, debo aclarar que lo anteriormente expresado en ningún momento pretende denostar aspectos en contra de la 4T en Sonora, las observaciones y la crítica es para quien se supone debería “dirigir” correctamente la dependencia, ya que en lo particular ha dejado mucho o bastante que desear... Lo que de alguna manera me lleva a reflexionar sobre las personas que ocupan cargos relevantes en el Gobierno, desconociendo a fondo la manera de administrar dichas dependencias y no al Gobierno en turno. Esperemos no estar contemplando un retroceso en la vida cultural de Sonora. “Politizar” la cultura nunca ha sido bueno.

No es de extrañarse que en la mayoría de los casos existan personas que en lo particular no piensen igual ó bien no compartan sus ideas, pensamientos, haya sido “Bloqueado/as” de la plataforma o red social mejor conocida como Facebook. Enemistarse con la gran mayoría de los creadores, artistas e intelectuales del conglomerado, considero no es la mejor solución, ya que se supone trabaja para todos y no para unos cuantos, se juró ante la autoridad estatal, hacer respetar la Constitución de los Estados Unidos Mexicanos, cosa que al parecer no se está ejerciendo de manera correcta y adecuada. Por el contrario, sólo se está velando por intereses particulares, ¡mejor que se afufé…!

Incluso, tengo conocimiento de que grandes, valiosos y reconocidos artistas con una gran trayectoria dentro de la cultura y las artes, han preferido mantenerse al margen de la institución manteniéndose en un autoexilio temporal, mientras no exista una correcta administración de los recursos tanto culturales como capitales para los que han sido destinados, así como el respeto irrestricto a la noble y gran labor de los artistas que han fortalecido la historia cultural dentro de la diversidad y pluriculturalidad en nuestro estado, en todas y cada una de las áreas.

Existen varios ejemplos de desencuentros con la comunidad cultural, ejemplos varios, además de sostener una antigua disputa con la reconocida y prestigiada escritora Eve Gil, de quien me informan se ha ensañado de manera un tanto particular, desprestigiando su labor creativo-literaria, tengo entendido con una antigüedad de años atrás.

De último momento, me comentan sobre el cierre temporal de Musas, lo anterior debido a múltiples aspectos como la falta de mantenimiento, entre otros. Pregunto: ¿Por qué no se le dio el debido servicio a las instalaciones en tiempo oportuno, etc.? ¿En qué condiciones de resguardo, temperatura adecuada para cada una de las obras quedarán? ¿Quién garantizará su correcta seguridad, etc.? No obstante, lo anterior se viene a sumar a la desafortunada y larga lista de aspectos nada positivos de la actual administración cultural en Sonora. Dicho cierre ha levantado por sí, ya una serie de rumores, en la cual por cierto Musacchio ha hecho referencia en su columna de esta semana. No es de sorprender que varios donantes de prestigiado nivel muestren su molestia y preocupación en torno a este tema.

Los artistas en Sonora No somos “oposición”, somos ciudadanos e individuos libres que reclamamos el correcto funcionamiento de una Institución hecha por y para los creativos de la entidad, dependencia por demás muy lastimada durante mucho tiempo en muchos aspectos… Por lo que deseamos ver un cambio de fondo en relación a la manera de gobernar y marcar la diferencia. Por lo que exigimos de manera respetuosa al C. Gobernador Constitucional del Estado de Sonora. Dr. Alfonso Durazo Montaño atienda de manera oportuna y pertinente lo anterior. Agradeciendo de antemano su atención a la misma, así como el compromiso adquirido por y para los sonorenses.