/ jueves 30 de abril de 2020

El faro | Cuando se trata de autenticidad, la perfección está sobrevalorada

El entrenamiento y la enseñanza no son todo deslumbramiento y glamour. Muchas veces, es tonto e imperfecto. Pero eso es lo que lo hace atractivo, que sea genuino y espontáneo. La mayoría de las personas ven cualquier producto terminado y lo consideran perfecto o extremadamente bueno, muchos piensan que no podrían hacer eso. Sin embargo, se equivocan.

RECIBE LAS NOTICIAS DE EL SOL DE HERMOSILLO DIRECTO EN TU WHATSAPP, SUSCRÍBETE AQUÍ

Es poco comprendido que incluso los profesionales con sus productos perfectos y pulidos cometen errores. Se equivocan y las cosas también se les tornan difíciles.

Ser un gran maestro no tiene casi nada que ver con la perfección, pero los mejores maestros y formadores saben que conectarse con las personas tiene mucho que ver con la autenticidad.

¿Qué significa realmente ser auténtico?

¿Por qué la autenticidad es más importante que la perfección?

Autenticidad es una palabra que se escucha alrededor de distintas comunidades; espirituales, artísticas, en áreas de la psicología, entre otras. Pero, ¿qué significa realmente la autenticidad?

Ser tu verdadero y auténtico ser se trata de la presencia. Se trata de vivir el momento con convicción y confianza y ser fiel a ti mismo. Significa ser congruente y demostrarlo con las acciones, con las palabras con los pensamientos y con los sentimientos. La autenticidad es más importante que la perfección en casi cualquier situación que implique hablarle a una audiencia.

Ya sea que presencial o virtual, ser auténtico se trata de compartir quién eres realmente. A la audiencia realmente no le cautivará si tus comentarios o intervención es perfecta. Lo que generaría un verdadero engagement es cómo te relacionas con los temas y la experiencia que puedas transmitirles.

3 formas en que la autenticidad mejora la comercialización en tu negocio

1. Las personas gravitan hacia la autenticidad

Las personas se relacionan con las personas, no con la versión fabricada que a veces intentamos proyectar.

Aceptar los defectos y hablar sobre los problemas es parte de ser auténtico. El compartir cómo se superaron esos desafíos, es sin duda muy valioso.

2. La transparencia ayuda a que las personas se conecten contigo

Algunos de los mejores oradores tienen dos grandes características; la honestidad y la transparencia. La honestidad es cuando compartes las verdades que sientes que los demás deberían saber. La transparencia es cuando las personas pueden ver por sí mismas las verdades que necesitan saber.

Cuando eres transparente, te pones en el lugar de tu audiencia y permites que tu audiencia se vea en ti. Y cuanto más se relacionen contigo, más confiarán en ti, y más querrán de lo que estás ofreciendo.

3. Preocúpate por los problemas de las personas y ofréceles una solución

Esta es, con mucho, la parte más importante de ser una persona auténtica y sobre todo eficaz en cualquier competencia que te desempeñes. No tiene sentido procurar ningún tipo de negocio si se dejaría de fuera el ayudar a la gente.

Antes de abrir la boca, pregúntese: ¿la información que voy a compartir será de utilidad?

¿Realmente tus acciones asisten en algo a los demás colaboradores con que participa en el día a día?

En pocas palabras: tiene mayor impacto y trascendencia cuando compartes algún tema o presentas algún trabajo e incluyes elementos propios y auténticos, incluso si son errores, esto es la vida real y tus interlocutores lo saben.

No se tiene que ser perfecto para ser efectivo

No confundamos la autenticidad con la vulnerabilidad. Se trata de buscar ese equilibrio y que el exterior coincida con el interior. Cuando realmente crees en lo que estás enseñando y te enfocas en ayudar a los demás, serás imparable.

David Martínez Aguirre. RMR Consultores. david@rmr.mx

El entrenamiento y la enseñanza no son todo deslumbramiento y glamour. Muchas veces, es tonto e imperfecto. Pero eso es lo que lo hace atractivo, que sea genuino y espontáneo. La mayoría de las personas ven cualquier producto terminado y lo consideran perfecto o extremadamente bueno, muchos piensan que no podrían hacer eso. Sin embargo, se equivocan.

RECIBE LAS NOTICIAS DE EL SOL DE HERMOSILLO DIRECTO EN TU WHATSAPP, SUSCRÍBETE AQUÍ

Es poco comprendido que incluso los profesionales con sus productos perfectos y pulidos cometen errores. Se equivocan y las cosas también se les tornan difíciles.

Ser un gran maestro no tiene casi nada que ver con la perfección, pero los mejores maestros y formadores saben que conectarse con las personas tiene mucho que ver con la autenticidad.

¿Qué significa realmente ser auténtico?

¿Por qué la autenticidad es más importante que la perfección?

Autenticidad es una palabra que se escucha alrededor de distintas comunidades; espirituales, artísticas, en áreas de la psicología, entre otras. Pero, ¿qué significa realmente la autenticidad?

Ser tu verdadero y auténtico ser se trata de la presencia. Se trata de vivir el momento con convicción y confianza y ser fiel a ti mismo. Significa ser congruente y demostrarlo con las acciones, con las palabras con los pensamientos y con los sentimientos. La autenticidad es más importante que la perfección en casi cualquier situación que implique hablarle a una audiencia.

Ya sea que presencial o virtual, ser auténtico se trata de compartir quién eres realmente. A la audiencia realmente no le cautivará si tus comentarios o intervención es perfecta. Lo que generaría un verdadero engagement es cómo te relacionas con los temas y la experiencia que puedas transmitirles.

3 formas en que la autenticidad mejora la comercialización en tu negocio

1. Las personas gravitan hacia la autenticidad

Las personas se relacionan con las personas, no con la versión fabricada que a veces intentamos proyectar.

Aceptar los defectos y hablar sobre los problemas es parte de ser auténtico. El compartir cómo se superaron esos desafíos, es sin duda muy valioso.

2. La transparencia ayuda a que las personas se conecten contigo

Algunos de los mejores oradores tienen dos grandes características; la honestidad y la transparencia. La honestidad es cuando compartes las verdades que sientes que los demás deberían saber. La transparencia es cuando las personas pueden ver por sí mismas las verdades que necesitan saber.

Cuando eres transparente, te pones en el lugar de tu audiencia y permites que tu audiencia se vea en ti. Y cuanto más se relacionen contigo, más confiarán en ti, y más querrán de lo que estás ofreciendo.

3. Preocúpate por los problemas de las personas y ofréceles una solución

Esta es, con mucho, la parte más importante de ser una persona auténtica y sobre todo eficaz en cualquier competencia que te desempeñes. No tiene sentido procurar ningún tipo de negocio si se dejaría de fuera el ayudar a la gente.

Antes de abrir la boca, pregúntese: ¿la información que voy a compartir será de utilidad?

¿Realmente tus acciones asisten en algo a los demás colaboradores con que participa en el día a día?

En pocas palabras: tiene mayor impacto y trascendencia cuando compartes algún tema o presentas algún trabajo e incluyes elementos propios y auténticos, incluso si son errores, esto es la vida real y tus interlocutores lo saben.

No se tiene que ser perfecto para ser efectivo

No confundamos la autenticidad con la vulnerabilidad. Se trata de buscar ese equilibrio y que el exterior coincida con el interior. Cuando realmente crees en lo que estás enseñando y te enfocas en ayudar a los demás, serás imparable.

David Martínez Aguirre. RMR Consultores. david@rmr.mx