“No conozco la clave del éxito, pero sé que la clave del fracaso es tratar de complacer a todo el mundo.”
Woody Allen
Es correcto estar en desacuerdo, pero debes de ser muy hábil para defender y sostener tu punto de vista.
Constantemente en el sector empresarial se generan diferentes tipos de conflictos y discusiones entre los colaboradores, proveedores, clientes, superiores, asociados, inversionistas entre otros más.
Estar en desacuerdo no es algo negativo, en realidad es algo positivo, ya que da pie a un puntos de vista diferentes, lo interesante del desacuerdo es que nos permite exponer y expresar nuestros argumentos, los cuales sirven para conocer y descubrir otros puntos de vista que permitan generar una gestión más adecuada o mejor a la propuesta de alguien más, adicionalmente esto nos ayuda a madurar como profesionales y personas.
Como se ha dicho, el desacuerdo es algo bueno, y es muy común en los equipos de alto rendimiento que buscan los mejores resultados. Además, esto te ayudará a ser un mejor profesional día a día, ya que constantemente estarás desarrollando y empoderando tus habilidades de negociación, asimismo aprenderás a introducirte en la mesa y que tu voz sea escuchada.
Desahogar un desacuerdo al interior de una empresa de manera positiva es un gran desafío, pero no significa que no se puede hacer, es necesario la voluntad de todos los involucrados y valorar los factores entre sí. Un gran reto es que todos los colaboradores independientemente de los niveles o rangos que tengan al interior de la empresa aprendan a expresar sus puntos de vista en el afán de contribuir y no enfrentarse uno al otro.
También es muy importante que los equipos de trabajo de la empresa estén muy bien estructurados y bien cohesionados. Difícilmente una empresa podrá salir adelante si tiene conflictos internos con su personal, ya que se destruye la cooperación, el ánimo de los empleados decae, se dificulta la toma de decisiones y se genera una actitud anti-profesional por parte de los colaboradores.
Por otra parte, cultivar el desacuerdo entre los ejecutivos y los tomadores de decisiones permite avanzar mediante nuevas y mejores estrategias operativas.
Asimismo, hablar de los desacuerdos fomenta que se analicen y se acepten las diferencias para crear un beneficio y una solución a los problemas que enfrenta la empresa en determinado momento.
Aquí debemos de resaltar que es necesario tener muy claro nuestro papel dentro de la empresa, ya que a raíz de esto tendremos la posibilidad de valorar cuando es oportuno participar y dar nuestro punto de vista, es decir, solo en temas que sean de nuestra competencia y departamento o proyecto. No es correcto andar ventilando opiniones y creando desacuerdos en temas que no son de nuestra competencia.
Otra situación a valorar es la de socializar los puntos de vista con los colaboradores del proyecto, es decir, antes de exponer y expresar tus puntos de vista arma tu equipo de colaboradores que respalden tu visión, así estarás respaldado a la hora de exponer tu punto de vista.
El estar intercambiando puntos de vista y generando desacuerdos positivos mantiene activa la interacción y fluidez de ideas con los colaboradores o de los tomadores de decisiones de la empresa. Además, favorece a la cohesión del personal, mejora la calidad del trabajo y tiene como consecuencia un mayor entendimiento entre su equipo, el cual beneficia a la empresa ya que logra sus objetivos y mejora su productividad.
Para implementar todo lo anterior es necesario que exista una comunicación efectiva la cual permitirá resolver las diferencias.
Será necesario aceptar los desacuerdos y verlos como algo normal, también es importante comprender la situación y no tomarlo como algo personal para no actuar a la defensiva, así no se generará un ambiente de conflicto y discusión.
Recuerda no interrumpir a la persona que tiene la voz, dale la oportunidad de que exprese su punto de vista sin cortarle la inspiración, respeta su opinión, para que al final de cuentas se logre un punto de equilibrio, el cual permita generar un acuerdo entre ambos tomadores de decisiones. Aquí es preciso estudiar y analizar a cabeza fría los puntos de desacuerdo de la otra persona, pueda que sus argumentos sean correctos, tómate tu tiempo para tomar la decisión, es válido crear un consenso para implementar la decisión que más beneficie a la empresa.
Por último, debes tener muy presente que la decisión que vayas a tomar debe ser la mejor y la que más beneficie al proyecto, que quiero decir con esto, que no se trata de querer tener la razón o de perder y ganar, simplemente es resolver un desacuerdo de una manera positiva y de crear un acuerdo o una política favorable para la empresa.
Si aceptas y escuchas el desacuerdo puedes empezar a empujar y a crear las circunstancias para generar los cambios que deseas, sólo valora y recuerda que no siempre tendrás la razón. Tener los objetivos claros es positivo, pero no significa suficiente para resolver un desacuerdo.
David Martínez. RMR Consultores en Innovación Disruptiva.
Correo: david@rmr.mx
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