/ jueves 9 de mayo de 2019

El Faro / Será el cuarto

El pasado 5 de mayo fue para alzar la voz en diversas ciudades del país, entre ellas; la Ciudad de México, Guadalajara, Hermosillo, Querétaro, Puebla, Monterrey, Morelia, León y Mérida, hubo una serie de marchas en contra de las acciones del gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador.

La fe de los mexicanos en el gobierno de AMLO empieza a cambiar, dado a las políticas públicas implementadas o a las inexistentes políticas públicas implementadas. El gobierno federal deja un mal sabor de boca y mucho que desear, los mexicanos expresan “¡No somos fifís, somos mexicanos!” “¡así no AMLO!”, “¡Fuera el socialismo!” entre otras expresiones más.

Es normal que la aprobación del gobierno por parte de los ciudadanos cambie para bien o para mal, pero en el caso del presidente López Obrador los cambios han sido muy notorios, drásticos y negativos. Al día de hoy según encuestas Mitofsky AMLO cuenta con un 60.5 por ciento de aprobación, dicha encuesta inicio el 14 de abril con una aceptación de 67.8%.

Como prueba de que las cosas van mal, México registró una caída de ocho lugares entre los países que más inversión extranjera directa (IED) reciben en el mundo, es decir, que de la posición número 17 paso a la 25, lo anterior fue dado a conocer por la consultoría AT Kearney (https://www.atkearney.com/). Esto significa que los inversionistas no confían en el crecimiento y sector económico del país y por lo tanto no le apuestan a invertir su dinero en México. El estudio revela que Estados Unidos se encuentra en el primer lugar del ranking mundial de IED, seguido por Alemania y Canadá.

Es importante analizar las acciones de gobierno y las políticas públicas que se están aplicando por parte del gobierno federal, ya que el daño que están ocasionando al país podría ser irreparable, además la tolerancia de los ciudadanos cada vez es menor y esto podría provocar un caos en todo el país por diversas manifestaciones y marchas por la constante inconformidad.

El descenso de la popularidad del Presidente trae consigo mismo también problemas de seguridad pública que vive el país diariamente. A cinco meses de haber asumido la titularidad del Poder Ejecutivo, un grupo de ciudadanos piden la salida del presidente.

El discurso del presidente López ante los hechos ocurridos ha sido dirigido con la intención de dividir a los mexicanos, esto afectando más la situación delicada en la que muchos se encuentran, ya que actualmente existe una penumbra por la incertidumbre y volatilidad en la que se encuentra nuestra economía, aumento en el índice de desempleo, caída del PIB, entre otros indicadores alarmantes.

López Obrador debe de asumir el cargo de presidente de todos los mexicanos, dejar atrás el discurso populista y orientar los recursos hacia atinadas y técnicas políticas públicas con visión de futuro, INDEPENDIENTEMENTE que afecte su popularidad individual, al fin y al cabo, ya está sucediendo. Debe de iniciar a implementar acciones en el sector económico y fomentar la innovación en el país, asimismo el gobierno federal tiene la obligación de desarrollar condiciones sostenibles a favor de los mexicanos bajo medidas razonables y decisiones congruentes, sin embargo vemos todo lo contrario, ya que desde el inicio de su mandato ha venido cancelando proyectos que aportarían beneficios para México, además de una serie de adjudicaciones directas que ha realizado, siendo estas igual o peor que actos de corrupción.

Nuestro gobierno (país) necesita generar confianza suficiente para atraer inversionistas, contener y disminuir el estancamiento en la economía. A México y al comercio aun le duele y le dolerá la cancelación del nuevo aeropuerto en el Lago de Texcoco, esto sin duda fue un golpe fuerte para los inversionistas nacionales y extranjeros.

El Sr. López Obrador, además, tiene grandes retos en materia de corrupción, salud, educación, seguridad y migración. La cuarta transformación necesita iniciar un plan de gobierno con resultados efectivos a mediano plazo, recuperando la fe, confianza y apoyo de los mexicanos.

Actualmente en nuestro país no existe la revocación de mandato, que es un procedimiento mediante el cual los ciudadanos pueden cesar de su cargo público a un funcionario.

Dicho lo anterior, lo único que queda es que AMLO sea el cuarto presidente a renunciar al máximo cargo de la república mexicana, así como lo hicieron Francisco I. Madero (1913), Pedro J. Lascurain (1913) y Pascual Ortiz Rubio (1932).

El presidente de México se encuentra ante una oportunidad de demostrar capacidad de gobierno y retomar su posición como el primer mandatario del país, ya que actualmente no importa su popularidad como individuo, sino el bienestar colectivo de México.

Konrad Adenauer “En política lo importante no es tener razón, sino que se la den a uno”.

David Martínez

RMR Consultores en Innovación Disruptiva

david@rmr.mx

El pasado 5 de mayo fue para alzar la voz en diversas ciudades del país, entre ellas; la Ciudad de México, Guadalajara, Hermosillo, Querétaro, Puebla, Monterrey, Morelia, León y Mérida, hubo una serie de marchas en contra de las acciones del gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador.

La fe de los mexicanos en el gobierno de AMLO empieza a cambiar, dado a las políticas públicas implementadas o a las inexistentes políticas públicas implementadas. El gobierno federal deja un mal sabor de boca y mucho que desear, los mexicanos expresan “¡No somos fifís, somos mexicanos!” “¡así no AMLO!”, “¡Fuera el socialismo!” entre otras expresiones más.

Es normal que la aprobación del gobierno por parte de los ciudadanos cambie para bien o para mal, pero en el caso del presidente López Obrador los cambios han sido muy notorios, drásticos y negativos. Al día de hoy según encuestas Mitofsky AMLO cuenta con un 60.5 por ciento de aprobación, dicha encuesta inicio el 14 de abril con una aceptación de 67.8%.

Como prueba de que las cosas van mal, México registró una caída de ocho lugares entre los países que más inversión extranjera directa (IED) reciben en el mundo, es decir, que de la posición número 17 paso a la 25, lo anterior fue dado a conocer por la consultoría AT Kearney (https://www.atkearney.com/). Esto significa que los inversionistas no confían en el crecimiento y sector económico del país y por lo tanto no le apuestan a invertir su dinero en México. El estudio revela que Estados Unidos se encuentra en el primer lugar del ranking mundial de IED, seguido por Alemania y Canadá.

Es importante analizar las acciones de gobierno y las políticas públicas que se están aplicando por parte del gobierno federal, ya que el daño que están ocasionando al país podría ser irreparable, además la tolerancia de los ciudadanos cada vez es menor y esto podría provocar un caos en todo el país por diversas manifestaciones y marchas por la constante inconformidad.

El descenso de la popularidad del Presidente trae consigo mismo también problemas de seguridad pública que vive el país diariamente. A cinco meses de haber asumido la titularidad del Poder Ejecutivo, un grupo de ciudadanos piden la salida del presidente.

El discurso del presidente López ante los hechos ocurridos ha sido dirigido con la intención de dividir a los mexicanos, esto afectando más la situación delicada en la que muchos se encuentran, ya que actualmente existe una penumbra por la incertidumbre y volatilidad en la que se encuentra nuestra economía, aumento en el índice de desempleo, caída del PIB, entre otros indicadores alarmantes.

López Obrador debe de asumir el cargo de presidente de todos los mexicanos, dejar atrás el discurso populista y orientar los recursos hacia atinadas y técnicas políticas públicas con visión de futuro, INDEPENDIENTEMENTE que afecte su popularidad individual, al fin y al cabo, ya está sucediendo. Debe de iniciar a implementar acciones en el sector económico y fomentar la innovación en el país, asimismo el gobierno federal tiene la obligación de desarrollar condiciones sostenibles a favor de los mexicanos bajo medidas razonables y decisiones congruentes, sin embargo vemos todo lo contrario, ya que desde el inicio de su mandato ha venido cancelando proyectos que aportarían beneficios para México, además de una serie de adjudicaciones directas que ha realizado, siendo estas igual o peor que actos de corrupción.

Nuestro gobierno (país) necesita generar confianza suficiente para atraer inversionistas, contener y disminuir el estancamiento en la economía. A México y al comercio aun le duele y le dolerá la cancelación del nuevo aeropuerto en el Lago de Texcoco, esto sin duda fue un golpe fuerte para los inversionistas nacionales y extranjeros.

El Sr. López Obrador, además, tiene grandes retos en materia de corrupción, salud, educación, seguridad y migración. La cuarta transformación necesita iniciar un plan de gobierno con resultados efectivos a mediano plazo, recuperando la fe, confianza y apoyo de los mexicanos.

Actualmente en nuestro país no existe la revocación de mandato, que es un procedimiento mediante el cual los ciudadanos pueden cesar de su cargo público a un funcionario.

Dicho lo anterior, lo único que queda es que AMLO sea el cuarto presidente a renunciar al máximo cargo de la república mexicana, así como lo hicieron Francisco I. Madero (1913), Pedro J. Lascurain (1913) y Pascual Ortiz Rubio (1932).

El presidente de México se encuentra ante una oportunidad de demostrar capacidad de gobierno y retomar su posición como el primer mandatario del país, ya que actualmente no importa su popularidad como individuo, sino el bienestar colectivo de México.

Konrad Adenauer “En política lo importante no es tener razón, sino que se la den a uno”.

David Martínez

RMR Consultores en Innovación Disruptiva

david@rmr.mx