/ miércoles 8 de abril de 2020

La crítica | María Magdalena

Una serie que sigue al famoso personaje bíblico del Nuevo Testamento, pero contada a través de una visión contemporánea.

RECIBE LAS NOTICIAS DE EL SOL DE HERMOSILLO DIRECTO EN TU CELULAR, SUSCRÍBETE AQUÍ

La historia nos cuenta sobre María Magdalena, una mujer que lucha y no se deja de la gente, que ha vivido violencia intrafamiliar, ha sido calumniada y la serie deja en claro la fuerza y poder del personaje principal.

En estos días de Semana Santa podemos disfrutar el final de la serie por televisión abierta (Azteca 7) que regresa después de un año de receso o verla de principio a fin en Netflix.

Todo comienza cuando la judía Magdalena (María Fernanda Yepes), contrae matrimonio con Ur (Claudio Cataño), un hombre que más allá del interés por ella, busca poseer la fortuna de su familia.

El tiempo pasa y tras sufrir violencia física, Magdalena escapa de su hogar, en su travesía se encuentra a Cayo Valerio (Luis Roberto Guzmán), un general romano que la salva de ser lapidada por su marido y amigos. Cayo Valerio la convierte en su esclava, pero pronto la atracción comenzará a surgir entre ambos, a pesar de la rivalidad entre judíos y romanos.

Mientras todo esto sucede vemos una historia en paralelo y es la de Jesús de Nazarteh, sus viajes, como va conociendo a sus discípulos, y sus últimos días, pero antes la vida de Magdalena y Jesús se cruzan para cambiar la historia de ambos.

La serie producida por Dopamine (México) tiene una documentación y respaldo histórico excelente, pero cabe resaltar que se toma ciertas libertades para crear historias de ficción del personaje de María Magdalena, que aunque es conocida por todos, poco se sabe de ella en los textos bíblicos.

Es protagonizada por talento actoral mexicano y colombiano en su mayoría, en los papeles principales encontramos a María Fernanda Yepes (La teniente), Manolo Cardona (El cártel de los sapos), Andrés Parra (Pablo Escobar, el patrón del mal), Luis Roberto Guzmán (Infames), Diana Lein (Cantinflas) y Gustavo Sánchez Parra (Cloroformo).

María Magdalena cuenta una calidad en producción, la historia tiene un gran ritmo, que presenta tensión, acción, momentos de romance, con un lenguaje mucho más dinámico, más vigente y menos teatral que las telenovelas.

El equipo de producción realizó un gran trabajo en diseño, desde la ambientación, vestuario, locaciones, además le dan un tono visual en la postproducción para transportarnos al entorno y a la época de la serie.

No es una serie “gringa, española o inglesa” como Juego de Tronos, Isabel La Católica o The Tudors, pero si es una producción diferente a lo que se presenta y se produce en nuestro país, mucho mejor que cualquier telenovela actual, por eso es interesante verla.

Es una serie emocionante que tiene una estructura que te lleva del romance a la acción, de la aventura al drama, es una fusión de bioserie, novela bíblica y producción histórica que no te puedes perder si eres de los que disfruta la Semana Santa con películas o series de Jesús.

Hasta aquí nuestra aventura televisiva en “La crítica” soy Flavio Valencia y los espero en la próxima edición.

Una serie que sigue al famoso personaje bíblico del Nuevo Testamento, pero contada a través de una visión contemporánea.

RECIBE LAS NOTICIAS DE EL SOL DE HERMOSILLO DIRECTO EN TU CELULAR, SUSCRÍBETE AQUÍ

La historia nos cuenta sobre María Magdalena, una mujer que lucha y no se deja de la gente, que ha vivido violencia intrafamiliar, ha sido calumniada y la serie deja en claro la fuerza y poder del personaje principal.

En estos días de Semana Santa podemos disfrutar el final de la serie por televisión abierta (Azteca 7) que regresa después de un año de receso o verla de principio a fin en Netflix.

Todo comienza cuando la judía Magdalena (María Fernanda Yepes), contrae matrimonio con Ur (Claudio Cataño), un hombre que más allá del interés por ella, busca poseer la fortuna de su familia.

El tiempo pasa y tras sufrir violencia física, Magdalena escapa de su hogar, en su travesía se encuentra a Cayo Valerio (Luis Roberto Guzmán), un general romano que la salva de ser lapidada por su marido y amigos. Cayo Valerio la convierte en su esclava, pero pronto la atracción comenzará a surgir entre ambos, a pesar de la rivalidad entre judíos y romanos.

Mientras todo esto sucede vemos una historia en paralelo y es la de Jesús de Nazarteh, sus viajes, como va conociendo a sus discípulos, y sus últimos días, pero antes la vida de Magdalena y Jesús se cruzan para cambiar la historia de ambos.

La serie producida por Dopamine (México) tiene una documentación y respaldo histórico excelente, pero cabe resaltar que se toma ciertas libertades para crear historias de ficción del personaje de María Magdalena, que aunque es conocida por todos, poco se sabe de ella en los textos bíblicos.

Es protagonizada por talento actoral mexicano y colombiano en su mayoría, en los papeles principales encontramos a María Fernanda Yepes (La teniente), Manolo Cardona (El cártel de los sapos), Andrés Parra (Pablo Escobar, el patrón del mal), Luis Roberto Guzmán (Infames), Diana Lein (Cantinflas) y Gustavo Sánchez Parra (Cloroformo).

María Magdalena cuenta una calidad en producción, la historia tiene un gran ritmo, que presenta tensión, acción, momentos de romance, con un lenguaje mucho más dinámico, más vigente y menos teatral que las telenovelas.

El equipo de producción realizó un gran trabajo en diseño, desde la ambientación, vestuario, locaciones, además le dan un tono visual en la postproducción para transportarnos al entorno y a la época de la serie.

No es una serie “gringa, española o inglesa” como Juego de Tronos, Isabel La Católica o The Tudors, pero si es una producción diferente a lo que se presenta y se produce en nuestro país, mucho mejor que cualquier telenovela actual, por eso es interesante verla.

Es una serie emocionante que tiene una estructura que te lleva del romance a la acción, de la aventura al drama, es una fusión de bioserie, novela bíblica y producción histórica que no te puedes perder si eres de los que disfruta la Semana Santa con películas o series de Jesús.

Hasta aquí nuestra aventura televisiva en “La crítica” soy Flavio Valencia y los espero en la próxima edición.