/ martes 11 de mayo de 2021

Lo digo como es | Arar el desierto

En su libro titulado “No decir adiós a la esperanza” el hoy presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador dice: “…nuestra lucha es complicada y difícil, y creo que debe entenderse bien el significado de la palabra transformación. Si se concibe a la ligera, en lo superficial, puede pensarse en que es más de lo mismo: demagogia y búsqueda de dinero y poder…”

Me quedo con la advertencia de la frase a no ver la transformación de forma ligera ni superficial para luego preguntarme ¿Acaso no se actuó de forma ligera en la elaboración de los nuevos Libros de Texto Gratuitos (LTG)?

La decisión ha estado sumamente cuestionada desde que se impuso el plazo y las formas para llevarse a cabo.

Y vaya que al referirse a la educación en otro de sus libros “2018, la salida” el mismo autor establece: “El acceso al conocimiento no debe ser visto como un paso a la subordinación de las decisiones que tomen otros…”

Pero vuelvo a la ligereza con la que se tomó elaborar algo tan trascendente como lo son los 234 materiales que van a servir de apoyo para la educación a través de 16 libros de texto sobre Español, Ciencias Naturales, Historia, Geografía, Atlas de Geografía y cuadernos de actividades de tercero, cuarto, quinto y sexto grados de primaria. Son 194 millones de LTG que se imprimen cada año en México y son estos una de las herramientas fundamentales para la educación básica en nuestro país.

Y es que fundamentalmente se ha criticado, además de la premura, que no existe claridad de hacia dónde se quieren dirigir los contenidos dado que la respectiva convocatoria de manera escueta señala que se busca “convertirlos (los LTG) en una pieza clave para la solidaridad y la integración del país desde una visión humanista”, y lo que han criticado expertos en el tema es que no se especifica cómo lograría esa meta.

Quizá también sirva de norte tomar en cuenta el exhorto que hizo Max Arriaga el responsable de materiales educativos de la SEP cuando en el curso de 8 horas en las que se capacitó a quienes participaron en las modificaciones a los LTG les dijo que tenían la oportunidad de rediseñar los materiales para evadir un sistema capitalista. https://www.latimes.com/espanol/mexico/articulo/2021-04-08/por-que-causaron-polemica-los-libros-de-la-sep

La Red por los Derechos de la Infancia (Redim) va más allá y en palabras de su director ejecutivo, Juan Martín Pérez García, la rapidez con que se hicieron las modificaciones es violatoria a los derechos humanos de al menos 26 millones de infantes a los que se le entregarán los materiales educativos; en entrevista reciente a la revista Proceso consideró que la decisión de no destinar presupuesto para la elaboración de los libros de texto es un acto de “discriminación”, además de que se viola el párrafo octavo del artículo cuarto constitucional, que considera que en todas sus decisiones el Estado debe considerar “el interés superior de la niñez”.

Y otras voces se han sumado a arar en el desierto; aquí algunas referencias:

— La organización Educación con Rumbo señaló que, por su importancia para los alumnos, se tiene que llevar a cabo en un proceso ordenado y “no supeditado a ocurrencias”. https://www.mural.com.mx/aplicacioneslibre/preacceso/articulo/default.aspx?__rval=1&urlredirect=https://www.mural.com.mx/critican-proceso-al-vapor-para-libros-de-texto/ar2157871?referer=--7d616165662f3a3a6262623b727a7a7279703b70663a--

— Esther López Portillo, autora de libros de texto y experta en elaboración de materiales educativos dijo: “El proceso de hacer un libro de texto se puede llevar seis meses, un año, hasta dos años, dependiendo del proyecto, pero no cuatro días para escribir algo, no cuatro días para evaluar y no cuatro días para ilustrar y luego diseñarlo todo”. https://www.elmanana.com/quieren-al-vapor-los-libros-de-texto-nueva-escuela-mexicana/5284263

— Antonia Candela Martín, investigadora del Departamento de Investigación Educativa (DIE) del Centro de Investigación y de Estudios Avanzados (Cinvestav), quien desde 1970 participa en la elaboración de LTG asume que la actual administración federal “necesita tener sus propios libros de texto, pero si los sacan así, va a ser un desastre, porque tiene que ser un material muy bien pensado, profundizado, recogiendo la mejor experiencia que hay en el país, si no, les puede salir el tiro por la culata”. https://ljz.mx/2021/05/09/en-dos-semanas-la-sep-rediseno-materiales-de-16-libros-de-texto/

Es realmente preocupante la forma tan relajada en que se toman cosas tan trascendentes en nuestro país y peor aún es que las voces no se alcancen a escuchar porque son tenues y pocas, mientras la cerilla que tapa oídos de quienes tienen el poder, es cada vez más gruesa y sólida.


En su libro titulado “No decir adiós a la esperanza” el hoy presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador dice: “…nuestra lucha es complicada y difícil, y creo que debe entenderse bien el significado de la palabra transformación. Si se concibe a la ligera, en lo superficial, puede pensarse en que es más de lo mismo: demagogia y búsqueda de dinero y poder…”

Me quedo con la advertencia de la frase a no ver la transformación de forma ligera ni superficial para luego preguntarme ¿Acaso no se actuó de forma ligera en la elaboración de los nuevos Libros de Texto Gratuitos (LTG)?

La decisión ha estado sumamente cuestionada desde que se impuso el plazo y las formas para llevarse a cabo.

Y vaya que al referirse a la educación en otro de sus libros “2018, la salida” el mismo autor establece: “El acceso al conocimiento no debe ser visto como un paso a la subordinación de las decisiones que tomen otros…”

Pero vuelvo a la ligereza con la que se tomó elaborar algo tan trascendente como lo son los 234 materiales que van a servir de apoyo para la educación a través de 16 libros de texto sobre Español, Ciencias Naturales, Historia, Geografía, Atlas de Geografía y cuadernos de actividades de tercero, cuarto, quinto y sexto grados de primaria. Son 194 millones de LTG que se imprimen cada año en México y son estos una de las herramientas fundamentales para la educación básica en nuestro país.

Y es que fundamentalmente se ha criticado, además de la premura, que no existe claridad de hacia dónde se quieren dirigir los contenidos dado que la respectiva convocatoria de manera escueta señala que se busca “convertirlos (los LTG) en una pieza clave para la solidaridad y la integración del país desde una visión humanista”, y lo que han criticado expertos en el tema es que no se especifica cómo lograría esa meta.

Quizá también sirva de norte tomar en cuenta el exhorto que hizo Max Arriaga el responsable de materiales educativos de la SEP cuando en el curso de 8 horas en las que se capacitó a quienes participaron en las modificaciones a los LTG les dijo que tenían la oportunidad de rediseñar los materiales para evadir un sistema capitalista. https://www.latimes.com/espanol/mexico/articulo/2021-04-08/por-que-causaron-polemica-los-libros-de-la-sep

La Red por los Derechos de la Infancia (Redim) va más allá y en palabras de su director ejecutivo, Juan Martín Pérez García, la rapidez con que se hicieron las modificaciones es violatoria a los derechos humanos de al menos 26 millones de infantes a los que se le entregarán los materiales educativos; en entrevista reciente a la revista Proceso consideró que la decisión de no destinar presupuesto para la elaboración de los libros de texto es un acto de “discriminación”, además de que se viola el párrafo octavo del artículo cuarto constitucional, que considera que en todas sus decisiones el Estado debe considerar “el interés superior de la niñez”.

Y otras voces se han sumado a arar en el desierto; aquí algunas referencias:

— La organización Educación con Rumbo señaló que, por su importancia para los alumnos, se tiene que llevar a cabo en un proceso ordenado y “no supeditado a ocurrencias”. https://www.mural.com.mx/aplicacioneslibre/preacceso/articulo/default.aspx?__rval=1&urlredirect=https://www.mural.com.mx/critican-proceso-al-vapor-para-libros-de-texto/ar2157871?referer=--7d616165662f3a3a6262623b727a7a7279703b70663a--

— Esther López Portillo, autora de libros de texto y experta en elaboración de materiales educativos dijo: “El proceso de hacer un libro de texto se puede llevar seis meses, un año, hasta dos años, dependiendo del proyecto, pero no cuatro días para escribir algo, no cuatro días para evaluar y no cuatro días para ilustrar y luego diseñarlo todo”. https://www.elmanana.com/quieren-al-vapor-los-libros-de-texto-nueva-escuela-mexicana/5284263

— Antonia Candela Martín, investigadora del Departamento de Investigación Educativa (DIE) del Centro de Investigación y de Estudios Avanzados (Cinvestav), quien desde 1970 participa en la elaboración de LTG asume que la actual administración federal “necesita tener sus propios libros de texto, pero si los sacan así, va a ser un desastre, porque tiene que ser un material muy bien pensado, profundizado, recogiendo la mejor experiencia que hay en el país, si no, les puede salir el tiro por la culata”. https://ljz.mx/2021/05/09/en-dos-semanas-la-sep-rediseno-materiales-de-16-libros-de-texto/

Es realmente preocupante la forma tan relajada en que se toman cosas tan trascendentes en nuestro país y peor aún es que las voces no se alcancen a escuchar porque son tenues y pocas, mientras la cerilla que tapa oídos de quienes tienen el poder, es cada vez más gruesa y sólida.