/ viernes 8 de febrero de 2019

Lo digo como es | Gobierno excepcional y de excepciones

¿En qué radica la diferencia entre un gobierno excepcional y otro que hace excepciones?

Bueno, partamos de lo básico de las definiciones para acercarnos a un terreno en que las cosas reciban su nombre mismo que ha sido ya aceptado y autorizado por un grupo de letrados que domina tales temas.

Se considera excepcional algo que se aparta de lo ordinario; que ocurre rara vez; se hacen excepciones cuando la regla general se puede emitir para ciertos casos o personajes.

Sin duda, por muchas razones el actual Gobierno de la República es excepcional porque sus acciones suponen el bien generalizado o por lo menos el de una gran mayoría de mexicanos. Lo anterior es por supuesto, deseable en cualquier territorio. Gobernar para todos y no para unos cuantos. Primero los pobres. Acabar con la corrupción. Darle dinero a los más vulnerables etc, etc. Son expresiones que están en todos los discursos y que quizá en otros tiempos se han dicho ya pero en otras palabras. Cuestión de semántica.

Cuando nos referimos a un gobierno que hace excepciones o por lo menos el sentido que busco imprimir a estas reflexiones, es una adaptación “dominguera” al dicho aquel: “Aplíquense las leyes en los bueyes de mi compadre”.

De todos los tiempos hemos sabido que los gobiernos en turno adecuan las leyes a su conveniencia, a las del grupo en el poder, a lo que oriente hacia el sendero que los gobernantes pretenden que el pueblo transite.

El actual Gobierno no es la excepción. También hace excepciones o adecuaciones legales para conseguir sus objetivos. ¿Pecado? No; o por lo menos no estoy sacando el catecismo del Padre Ripalda o algún otro respetable documento eclesiástico para calificarlo. Simplemente es.

Cito sólo dos ejemplos de tales excepciones o adecuaciones:

– Se exceptuó la legislación vigente, o se le sacó la vuelta para entrar en el proceso que más temprano que tarde con dobleces o sin ellos, Paco Ignacio Taibo II se hiciera cargo del Fondo de Cultura Económica.

– Se ignoró la norma respectiva que establece las características para las pipas que transportan gasolina (no sé si antes o después de la compra) y como ya se había hecho el viaje de buena parte del gabinete a gastar los millones de dolares en tal compra –sin la licitación respectiva– pues muy sencillo, se adecua la norma y las unidades ya pueden rodar por las carreteras mexicanas.

Y es que dicha disposición data del año 2008 y especifica que los transportes de materiales peligrosos deben tener llanta doble y no sencilla como las 671 pipas que se compraron por 92 mdd.

Cito pues sólo breves ejemplos con base en los cuales afirmo que tenemos un gobierno excepcional pero que también hace excepciones o adecuaciones…sí, como todos lo han hecho… entonces, si es como todos ¿No es excepcional verdad?

En este espacio me referí al silencio de CFE con respecto al tema del alumbrado público en Hermosillo.

Alguien enterado en el tema, me aclara que CFE no tiene porqué hacer labores de autorización de ningún tipo porque lo que contempla el famoso censo que se argumenta como no concluido y en consecuencia no se pueden contabilizar los ahorros que el nuevo alumbrado representa para la Comuna, es una labor de acompañamiento que hace personal de CFE con una representación del Ayuntamiento que acuden a la comprobación en campo de lo que dice la empresa que ha instalado.

Otra cosa también me precisa, los ahorros por las nuevas instalaciones ya deben estarse reflejando en el concepto del DAP porque “es similar a lo que ocurre cuando en tu casa cambias los focos tradicionales por ahorradores”.

Web: www.soledaddurazo.com

@SoledadDurazo

¿En qué radica la diferencia entre un gobierno excepcional y otro que hace excepciones?

Bueno, partamos de lo básico de las definiciones para acercarnos a un terreno en que las cosas reciban su nombre mismo que ha sido ya aceptado y autorizado por un grupo de letrados que domina tales temas.

Se considera excepcional algo que se aparta de lo ordinario; que ocurre rara vez; se hacen excepciones cuando la regla general se puede emitir para ciertos casos o personajes.

Sin duda, por muchas razones el actual Gobierno de la República es excepcional porque sus acciones suponen el bien generalizado o por lo menos el de una gran mayoría de mexicanos. Lo anterior es por supuesto, deseable en cualquier territorio. Gobernar para todos y no para unos cuantos. Primero los pobres. Acabar con la corrupción. Darle dinero a los más vulnerables etc, etc. Son expresiones que están en todos los discursos y que quizá en otros tiempos se han dicho ya pero en otras palabras. Cuestión de semántica.

Cuando nos referimos a un gobierno que hace excepciones o por lo menos el sentido que busco imprimir a estas reflexiones, es una adaptación “dominguera” al dicho aquel: “Aplíquense las leyes en los bueyes de mi compadre”.

De todos los tiempos hemos sabido que los gobiernos en turno adecuan las leyes a su conveniencia, a las del grupo en el poder, a lo que oriente hacia el sendero que los gobernantes pretenden que el pueblo transite.

El actual Gobierno no es la excepción. También hace excepciones o adecuaciones legales para conseguir sus objetivos. ¿Pecado? No; o por lo menos no estoy sacando el catecismo del Padre Ripalda o algún otro respetable documento eclesiástico para calificarlo. Simplemente es.

Cito sólo dos ejemplos de tales excepciones o adecuaciones:

– Se exceptuó la legislación vigente, o se le sacó la vuelta para entrar en el proceso que más temprano que tarde con dobleces o sin ellos, Paco Ignacio Taibo II se hiciera cargo del Fondo de Cultura Económica.

– Se ignoró la norma respectiva que establece las características para las pipas que transportan gasolina (no sé si antes o después de la compra) y como ya se había hecho el viaje de buena parte del gabinete a gastar los millones de dolares en tal compra –sin la licitación respectiva– pues muy sencillo, se adecua la norma y las unidades ya pueden rodar por las carreteras mexicanas.

Y es que dicha disposición data del año 2008 y especifica que los transportes de materiales peligrosos deben tener llanta doble y no sencilla como las 671 pipas que se compraron por 92 mdd.

Cito pues sólo breves ejemplos con base en los cuales afirmo que tenemos un gobierno excepcional pero que también hace excepciones o adecuaciones…sí, como todos lo han hecho… entonces, si es como todos ¿No es excepcional verdad?

En este espacio me referí al silencio de CFE con respecto al tema del alumbrado público en Hermosillo.

Alguien enterado en el tema, me aclara que CFE no tiene porqué hacer labores de autorización de ningún tipo porque lo que contempla el famoso censo que se argumenta como no concluido y en consecuencia no se pueden contabilizar los ahorros que el nuevo alumbrado representa para la Comuna, es una labor de acompañamiento que hace personal de CFE con una representación del Ayuntamiento que acuden a la comprobación en campo de lo que dice la empresa que ha instalado.

Otra cosa también me precisa, los ahorros por las nuevas instalaciones ya deben estarse reflejando en el concepto del DAP porque “es similar a lo que ocurre cuando en tu casa cambias los focos tradicionales por ahorradores”.

Web: www.soledaddurazo.com

@SoledadDurazo