/ martes 23 de noviembre de 2021

Salud y bienestar | ¿Los niños para cuándo?

Desde el inicio de la pandemia, el grupo pediátrico presentó menor cantidad de casos graves, hospitalizaciones y muertes, comparado con lo observado en adultos, reportaban tasas de prevalencia variables de acuerdo a cada región. Sin embargo, en países como Estados Unidos, en los meses más recientes, se ha registrado un incremento en el porcentaje de casos.

Para agosto 26 de 2021, se habían acumulado 4.8 millones de casos en niños, con un incremento exponencial en el último mes de cinco veces más con respecto a los registros previos. Así, los niños representaron 22% de los casos reportados a la semana, con un incremento de 7% durante las últimas dos semanas.

En México, en agosto de 2021 se acumularon 156,990 casos en niños. El grupo más afectado es el de 12 a 17 años, que concentra 59% de los casos, y en el que han ocurrido 758 defunciones. En México, desde abril de 2020, se estableció el Acelerador de Acceso a Herramientas Covid-19 como una colaboración para el desarrollo, producción y acceso equitativo a las pruebas, tratamientos y vacunas Covid-19.

El Grupo de Expertos de Asesoramiento Estratégico sobre Inmunización de la OMS emite recomendaciones sobre la aprobación de las vacunas que han demostrado ser seguras y eficaces. Este organismo establece una guía para la vacunación de grupos prioritarios, de acuerdo con la disponibilidad y tomando en cuenta diferentes contextos epidemiológicos, pero reconociendo que, en las etapas iniciales, el objetivo es la reducción de la morbilidad y mortalidad por Covid-19.

Desde el inicio de la vacunación, sabemos que existe un suministro limitado, lo cual supera ampliamente a la demanda pero en cualquier país o región la prioridad es vacunar a las personas con mayor riesgo de enfermedad grave y muerte. Por esta razón, y dado que los niños se han considerado un grupo de bajo riesgo, se han quedado como meta secundaria para vacunar, hasta garantizar la seguridad de la población de mayor riesgo.

En los niños, el impacto de la pandemia de Covid-19 ha sido importante en su educación, salud y su bienestar general. Si bien la mayoría presenta un cuadro clínico leve o asintomático, contribuyen a la transmisión comunitaria, con implicaciones para el control de la pandemia. La OMS ha aprobado el uso de emergencia de al menos 13 vacunas distintas a través de cuatro plataformas para su aplicación en la población adulta; sin embargo, hasta ahora, para la edad pediátrica únicamente ha recomendado el uso de la vacuna Pfizer/ BioNTech.

La estrategia de vacunación en México estimó que para agosto, aproximadamente 58% de la población mayor de 18 años tuviera un esquema completo. Pero el 11 de junio de 2021, la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) amplió el grupo etario a mayores de 12 años, para el uso de emergencia de la vacuna Pfizer/BioNTech.

En octubre de 2021 se inició en México el registro de los menores de 12 a 17 años con comorbilidades para que sean vacunados con vacuna Pfizer/BioNTech. Las comorbilidades o condiciones subyacentes incluyen: enfermedades cardiacas crónicas, enfermedad pulmonar crónica, afecciones crónicas de riñón, hígado o sistema digestivo, enfermedad neurológica crónica, enfermedades endocrinas, inmunosupresión, asplenia o disfunción del bazo y enfermedades hematológicas, anomalías genéticas graves que afectan a varios sistemas, así como adolescentes embarazadas.

Es muy probable que, conforme avance el programa de vacunación, se modificará la población susceptible, por lo que se puede incrementar el riesgo de infección por Covid-19, tanto en niños como en individuos no vacunados.

Los médicos tenemos la responsabilidad de promover los beneficios de las vacunas ya existentes, a fin de acelerar los esquemas atrasados y enfatizar las medidas de prevención hasta que sea posible vacunar al grupo pediátrico.

Desde el inicio de la pandemia, el grupo pediátrico presentó menor cantidad de casos graves, hospitalizaciones y muertes, comparado con lo observado en adultos, reportaban tasas de prevalencia variables de acuerdo a cada región. Sin embargo, en países como Estados Unidos, en los meses más recientes, se ha registrado un incremento en el porcentaje de casos.

Para agosto 26 de 2021, se habían acumulado 4.8 millones de casos en niños, con un incremento exponencial en el último mes de cinco veces más con respecto a los registros previos. Así, los niños representaron 22% de los casos reportados a la semana, con un incremento de 7% durante las últimas dos semanas.

En México, en agosto de 2021 se acumularon 156,990 casos en niños. El grupo más afectado es el de 12 a 17 años, que concentra 59% de los casos, y en el que han ocurrido 758 defunciones. En México, desde abril de 2020, se estableció el Acelerador de Acceso a Herramientas Covid-19 como una colaboración para el desarrollo, producción y acceso equitativo a las pruebas, tratamientos y vacunas Covid-19.

El Grupo de Expertos de Asesoramiento Estratégico sobre Inmunización de la OMS emite recomendaciones sobre la aprobación de las vacunas que han demostrado ser seguras y eficaces. Este organismo establece una guía para la vacunación de grupos prioritarios, de acuerdo con la disponibilidad y tomando en cuenta diferentes contextos epidemiológicos, pero reconociendo que, en las etapas iniciales, el objetivo es la reducción de la morbilidad y mortalidad por Covid-19.

Desde el inicio de la vacunación, sabemos que existe un suministro limitado, lo cual supera ampliamente a la demanda pero en cualquier país o región la prioridad es vacunar a las personas con mayor riesgo de enfermedad grave y muerte. Por esta razón, y dado que los niños se han considerado un grupo de bajo riesgo, se han quedado como meta secundaria para vacunar, hasta garantizar la seguridad de la población de mayor riesgo.

En los niños, el impacto de la pandemia de Covid-19 ha sido importante en su educación, salud y su bienestar general. Si bien la mayoría presenta un cuadro clínico leve o asintomático, contribuyen a la transmisión comunitaria, con implicaciones para el control de la pandemia. La OMS ha aprobado el uso de emergencia de al menos 13 vacunas distintas a través de cuatro plataformas para su aplicación en la población adulta; sin embargo, hasta ahora, para la edad pediátrica únicamente ha recomendado el uso de la vacuna Pfizer/ BioNTech.

La estrategia de vacunación en México estimó que para agosto, aproximadamente 58% de la población mayor de 18 años tuviera un esquema completo. Pero el 11 de junio de 2021, la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) amplió el grupo etario a mayores de 12 años, para el uso de emergencia de la vacuna Pfizer/BioNTech.

En octubre de 2021 se inició en México el registro de los menores de 12 a 17 años con comorbilidades para que sean vacunados con vacuna Pfizer/BioNTech. Las comorbilidades o condiciones subyacentes incluyen: enfermedades cardiacas crónicas, enfermedad pulmonar crónica, afecciones crónicas de riñón, hígado o sistema digestivo, enfermedad neurológica crónica, enfermedades endocrinas, inmunosupresión, asplenia o disfunción del bazo y enfermedades hematológicas, anomalías genéticas graves que afectan a varios sistemas, así como adolescentes embarazadas.

Es muy probable que, conforme avance el programa de vacunación, se modificará la población susceptible, por lo que se puede incrementar el riesgo de infección por Covid-19, tanto en niños como en individuos no vacunados.

Los médicos tenemos la responsabilidad de promover los beneficios de las vacunas ya existentes, a fin de acelerar los esquemas atrasados y enfatizar las medidas de prevención hasta que sea posible vacunar al grupo pediátrico.