/ martes 20 de abril de 2021

Un ciudadano pensó | Los tiempos que vivimos…

Todos estos escenarios que actualmente hemos estado viviendo en todo el mundo, nos han forzado a reevaluar todo, absolutamente todo lo que creíamos y pensábamos del total de como seres humanos nos conformábamos. Hasta hace un año, veíamos todos los temas principales como temas que poco o nada tenían que ver unos con otros. Nuestra salud, nuestra mente y psicología, nuestra espiritualidad, nuestra sociedad, economía, política, de dónde viene el ser humano y para qué venimos a esta vida, así como aquellos temas que parecen ser fantasía o mitología.

Ninguno de estos temas generales, está separado uno de otro. Todos están mezclados o entrelazados. Seguido me topo con personas que me dicen que la psicología nada tiene que ver con la economía, por ejemplo. Cuando en realidad, cualquier persona que tiene problemas económicos tiene un estado de ánimo malo o si su situación económica es buena, la persona se siente tranquila, alegre y segura de sí misma. Por lo tanto, una u otra situación también incide en su salud mala o buena.

Me puedo extender en ejemplos de cómo afecta la política a la espiritualidad o como afecta la situación social general en la familia o nuestra mente. Pero alargaría mucho mi mensaje, pero creo que ya me di a entender a lo que me refiero y sé que demuestra lo que les comento.

¿Qué temas? El de la salud (Obviamente), la exploración espacial, las religiones, la comunicación, la economía global, la geopolítica, las “teorías” de conspiración y el tema extraterrestre y englobando a todo, el miedo generalizado (Psicología). Uno de los peores sentimientos que puede sentir usted, yo y toda la población, es la incertidumbre, es decir, no poder visualizar a dónde vamos a parar.

Del tema de la salud se ve afectada positiva o negativamente, por todos los temas mencionados. Desde que los medios de comunicación iniciaron desde finales de la Segunda Guerra Mundial, se nos ha venido acostumbrando (programando) a depender de las “autoridades”, los “expertos” (o sea cualquier suato con bata de científico o traje formal) y pastores, curas, rabinos y otros parecidos. Entonces, en estos tiempos donde estamos viendo diariamente cómo las “autoridades”, los “expertos”, pastores, curas, rabinos y otros parecidos, no “parecen” saber por dónde y además cambiando continuamente de parecer… Pues es entonces cuando la incertidumbre anida en nuestras mentes convirtiéndose en la semilla del miedo… Es aquí, donde la irracionalidad, empieza a campear en todo nuestro mundo, que parece no tener ni pies ni cabeza.

Aquí es donde debemos hacer nosotros, la gente común alejada de las élites que nos platican en las teorías de conspiración… Una pausa, recordar qué es lo básico y cuáles son nuestros valores humanos elementales, centrándonos en ellos y evitar totalmente las fuentes de información que normalmente acostumbramos usar, ya que es notorio que éstas, no están funcionando para el bien común.

Debemos buscar otras fuentes de información, debemos de abrir nuestra mente a otros contenidos sin importar lo extraño que nos suene, ya que seguramente nos sonará extraño ya que será información diferente. Si buscamos información que no nos suene extraña, seguramente será porque es la misma información que ya estábamos acostumbrados y eso nos dejará en el mismo lugar, es decir, no avanzaremos sólo habremos correteado nuestra propia cola.

Lo he dicho en otras columnas que he escrito y lo repetiré, “continuar haciendo lo mismo, esperando obtener resultados diferentes es sólo mantenernos engañados a nosotros mismos”.

En estos tiempos no podemos seguir haciendo lo mismo, escuchando a los mismos. Debemos hacer diferentes cosas y escuchar otras informaciones… Tal vez, lo que siempre nos dijeron que eran fantasías o mentiras, en realidad sea la verdad que nos ocultaron y que lo que siempre se enarboló como verdades absolutas, sólo fue manipulación y engaño.

Si sientes duda en tu corazón, seguramente es porque te engañan y no puedes esperar que quienes siempre te han engañado, sean la verdad que en este momento tan importante requieres. Busca en tu sentimientos, dentro de ti lo que ya sabes que es cierto sin duda en ello… Ahí encontrarás la seguridad, en ti, no en “ellos”.

Todos estos escenarios que actualmente hemos estado viviendo en todo el mundo, nos han forzado a reevaluar todo, absolutamente todo lo que creíamos y pensábamos del total de como seres humanos nos conformábamos. Hasta hace un año, veíamos todos los temas principales como temas que poco o nada tenían que ver unos con otros. Nuestra salud, nuestra mente y psicología, nuestra espiritualidad, nuestra sociedad, economía, política, de dónde viene el ser humano y para qué venimos a esta vida, así como aquellos temas que parecen ser fantasía o mitología.

Ninguno de estos temas generales, está separado uno de otro. Todos están mezclados o entrelazados. Seguido me topo con personas que me dicen que la psicología nada tiene que ver con la economía, por ejemplo. Cuando en realidad, cualquier persona que tiene problemas económicos tiene un estado de ánimo malo o si su situación económica es buena, la persona se siente tranquila, alegre y segura de sí misma. Por lo tanto, una u otra situación también incide en su salud mala o buena.

Me puedo extender en ejemplos de cómo afecta la política a la espiritualidad o como afecta la situación social general en la familia o nuestra mente. Pero alargaría mucho mi mensaje, pero creo que ya me di a entender a lo que me refiero y sé que demuestra lo que les comento.

¿Qué temas? El de la salud (Obviamente), la exploración espacial, las religiones, la comunicación, la economía global, la geopolítica, las “teorías” de conspiración y el tema extraterrestre y englobando a todo, el miedo generalizado (Psicología). Uno de los peores sentimientos que puede sentir usted, yo y toda la población, es la incertidumbre, es decir, no poder visualizar a dónde vamos a parar.

Del tema de la salud se ve afectada positiva o negativamente, por todos los temas mencionados. Desde que los medios de comunicación iniciaron desde finales de la Segunda Guerra Mundial, se nos ha venido acostumbrando (programando) a depender de las “autoridades”, los “expertos” (o sea cualquier suato con bata de científico o traje formal) y pastores, curas, rabinos y otros parecidos. Entonces, en estos tiempos donde estamos viendo diariamente cómo las “autoridades”, los “expertos”, pastores, curas, rabinos y otros parecidos, no “parecen” saber por dónde y además cambiando continuamente de parecer… Pues es entonces cuando la incertidumbre anida en nuestras mentes convirtiéndose en la semilla del miedo… Es aquí, donde la irracionalidad, empieza a campear en todo nuestro mundo, que parece no tener ni pies ni cabeza.

Aquí es donde debemos hacer nosotros, la gente común alejada de las élites que nos platican en las teorías de conspiración… Una pausa, recordar qué es lo básico y cuáles son nuestros valores humanos elementales, centrándonos en ellos y evitar totalmente las fuentes de información que normalmente acostumbramos usar, ya que es notorio que éstas, no están funcionando para el bien común.

Debemos buscar otras fuentes de información, debemos de abrir nuestra mente a otros contenidos sin importar lo extraño que nos suene, ya que seguramente nos sonará extraño ya que será información diferente. Si buscamos información que no nos suene extraña, seguramente será porque es la misma información que ya estábamos acostumbrados y eso nos dejará en el mismo lugar, es decir, no avanzaremos sólo habremos correteado nuestra propia cola.

Lo he dicho en otras columnas que he escrito y lo repetiré, “continuar haciendo lo mismo, esperando obtener resultados diferentes es sólo mantenernos engañados a nosotros mismos”.

En estos tiempos no podemos seguir haciendo lo mismo, escuchando a los mismos. Debemos hacer diferentes cosas y escuchar otras informaciones… Tal vez, lo que siempre nos dijeron que eran fantasías o mentiras, en realidad sea la verdad que nos ocultaron y que lo que siempre se enarboló como verdades absolutas, sólo fue manipulación y engaño.

Si sientes duda en tu corazón, seguramente es porque te engañan y no puedes esperar que quienes siempre te han engañado, sean la verdad que en este momento tan importante requieres. Busca en tu sentimientos, dentro de ti lo que ya sabes que es cierto sin duda en ello… Ahí encontrarás la seguridad, en ti, no en “ellos”.