/ domingo 28 de marzo de 2021

Visión económica | Estrategias para la próxima Rectoría de la Unison

La doctora María Rita Plancarte Martínez, recién electa rectora de la Universidad de Sonora, la Unison, muy atinadamente está convocando a toda la comunidad universitaria en particular, y a la sociedad sonorense en general, para que retoquemos su Plan de Desarrollo Institucional, mediante la aportación de algunas reflexiones, ideas, o pertinentes propuestas viables de metas, programas, proyectos, objetivos y líneas de acción, a fin de engrandecer aún más nuestra máxima casa de estudios.

El gran propósito inmediato, es resolver exitosamente el difícil problema tan adverso que la Unison emprende, ante el grave reto de la crisis pospandémica que genera el Covid 19. Esto es un monumental desafío para todo el mundo, lo mismo que para los universitarios.

Debemos admitir y comprender que nunca antes en la historia de la Universidad, el inicio de una nueva administración de Rectoría, se había presentado ante un panorama tan difícil como al que ahora enfrenta la doctora Rita Plancarte.

En consecuencia, hoy más que nunca se requiere la decisiva colaboración de los sonorenses, dentro y fuera del campus, para poder alcanzar los grandes propósitos y fines universitarios, que todos nos proponemos.

Ahora bien, en estas reflexiones, y en un principio, es justo y necesario precisar que la doctora Plancarte, alcanzó el máximo liderato de la Unison, no sólo por el hecho de ser mujer, lo cual es histórico, sino por sus propios antecedentes, cualidades, méritos y capacidades personales, profesionales, académicas y científicas.

En tal virtud, pronto atestiguaremos sus habilidades y competencias idóneas para sumar voluntades, propias y extrañas a su proyecto de dirigir la Universidad hacia los máximos estándares nacionales e internacionales de calidad educativa.

Para lograrlo, y en un primerísimo lugar, su gran proyecto visionario, se debe sustentar en el reforzamiento de los valores universitarios de solidaridad, honestidad, pluralismo, igualdad, tolerancia, justicia, transparencia, derechos universitarios, equidad de género, universalidad de pensamiento y libertad de cátedra, entre otros. Estos excelsos principios y valores, tienen que ser el pilar básico y conformar los cimientos fundamentales de los seis ejes rectores de su Plan de Desarrollo Institucional: identidad y pertenencia de universitarios; formación profesional y posgrados; investigación y creación artística; vinculación y extensión regional transfronteriza; difusión y promoción; y, óptima administración eficiente y transparente.

Con una gran visión estratégica, la filosofía educativa de la Unison del presente y del futuro, debe sustentarse en una visionaria formación y educación integral, no sólo de conocimientos tecnológicos, sino también en el arraigo e impulso, en todos los elementos y miembros de la comunidad universitaria, de los citados principios y valores de su Alma Máter.

Para intervenir en el desarrollo y óptima formación integral de los jóvenes estudiosos, debemos fortalecer en sumo grado la inherencia de su orgullo Búho, tenemos que instruirlos para que aspiren a sucesos y situaciones grandes, a que se formen como los mejores profesionistas; y, para que siempre eviten la mediocridad y el conformismo.

Adicionalmente, la ética, el civismo, el amor patrio, respeto al medio ambiente, al bien común, así como la honradez, se tienen que integrar al nuevo modelo de calidad para llegar a los más altos estándares; y esto, se logrará mediante mejores condiciones armónicas para impulsar el trabajo en equipo estilo japonés, e instrumentar la meritocracia confuciana china, en todas las oficinas, aulas y laboratorios, aun con los futuros sistemas presencial, virtual o híbrido.

Como acertadamente lo afirma la doctora Rita Plancarte, la Unison será un espacio libre violencia de género, pero también libre de basuras y violencia en general, de robos, delincuencia, daños patrimoniales y de drogas.

Ahora bien, los futuros tiempos pospandémicos, la prevista escasez de recursos económicos, la intensidad de la inevitable globalización, la necesaria e impostergable internacionalización universitaria; así como, una mayor y más efectiva vinculación con los agentes económicos y sectores productivos, son cuestiones fundamentales para la modernización de la Unison, que el espacio limitado nos obliga a compartir en siguiente entrega.


La doctora María Rita Plancarte Martínez, recién electa rectora de la Universidad de Sonora, la Unison, muy atinadamente está convocando a toda la comunidad universitaria en particular, y a la sociedad sonorense en general, para que retoquemos su Plan de Desarrollo Institucional, mediante la aportación de algunas reflexiones, ideas, o pertinentes propuestas viables de metas, programas, proyectos, objetivos y líneas de acción, a fin de engrandecer aún más nuestra máxima casa de estudios.

El gran propósito inmediato, es resolver exitosamente el difícil problema tan adverso que la Unison emprende, ante el grave reto de la crisis pospandémica que genera el Covid 19. Esto es un monumental desafío para todo el mundo, lo mismo que para los universitarios.

Debemos admitir y comprender que nunca antes en la historia de la Universidad, el inicio de una nueva administración de Rectoría, se había presentado ante un panorama tan difícil como al que ahora enfrenta la doctora Rita Plancarte.

En consecuencia, hoy más que nunca se requiere la decisiva colaboración de los sonorenses, dentro y fuera del campus, para poder alcanzar los grandes propósitos y fines universitarios, que todos nos proponemos.

Ahora bien, en estas reflexiones, y en un principio, es justo y necesario precisar que la doctora Plancarte, alcanzó el máximo liderato de la Unison, no sólo por el hecho de ser mujer, lo cual es histórico, sino por sus propios antecedentes, cualidades, méritos y capacidades personales, profesionales, académicas y científicas.

En tal virtud, pronto atestiguaremos sus habilidades y competencias idóneas para sumar voluntades, propias y extrañas a su proyecto de dirigir la Universidad hacia los máximos estándares nacionales e internacionales de calidad educativa.

Para lograrlo, y en un primerísimo lugar, su gran proyecto visionario, se debe sustentar en el reforzamiento de los valores universitarios de solidaridad, honestidad, pluralismo, igualdad, tolerancia, justicia, transparencia, derechos universitarios, equidad de género, universalidad de pensamiento y libertad de cátedra, entre otros. Estos excelsos principios y valores, tienen que ser el pilar básico y conformar los cimientos fundamentales de los seis ejes rectores de su Plan de Desarrollo Institucional: identidad y pertenencia de universitarios; formación profesional y posgrados; investigación y creación artística; vinculación y extensión regional transfronteriza; difusión y promoción; y, óptima administración eficiente y transparente.

Con una gran visión estratégica, la filosofía educativa de la Unison del presente y del futuro, debe sustentarse en una visionaria formación y educación integral, no sólo de conocimientos tecnológicos, sino también en el arraigo e impulso, en todos los elementos y miembros de la comunidad universitaria, de los citados principios y valores de su Alma Máter.

Para intervenir en el desarrollo y óptima formación integral de los jóvenes estudiosos, debemos fortalecer en sumo grado la inherencia de su orgullo Búho, tenemos que instruirlos para que aspiren a sucesos y situaciones grandes, a que se formen como los mejores profesionistas; y, para que siempre eviten la mediocridad y el conformismo.

Adicionalmente, la ética, el civismo, el amor patrio, respeto al medio ambiente, al bien común, así como la honradez, se tienen que integrar al nuevo modelo de calidad para llegar a los más altos estándares; y esto, se logrará mediante mejores condiciones armónicas para impulsar el trabajo en equipo estilo japonés, e instrumentar la meritocracia confuciana china, en todas las oficinas, aulas y laboratorios, aun con los futuros sistemas presencial, virtual o híbrido.

Como acertadamente lo afirma la doctora Rita Plancarte, la Unison será un espacio libre violencia de género, pero también libre de basuras y violencia en general, de robos, delincuencia, daños patrimoniales y de drogas.

Ahora bien, los futuros tiempos pospandémicos, la prevista escasez de recursos económicos, la intensidad de la inevitable globalización, la necesaria e impostergable internacionalización universitaria; así como, una mayor y más efectiva vinculación con los agentes económicos y sectores productivos, son cuestiones fundamentales para la modernización de la Unison, que el espacio limitado nos obliga a compartir en siguiente entrega.