La alcaldesa Célida López argumenta que el Ayuntamiento de Hermosillo, no obtiene recursos para enfrentar los múltiples problemas que aquejan al Municipio. En consecuencia, exige a todos, sí a tooodos los hermosillenses y al Gobierno del Estado que paguen las deudas que tienen con el Ayuntamiento. Muchos contribuyentes no han pagado y no quieren pagar sus adeudos por consumo de agua, predial, placas y licencias que por ley deben pagar a la ciudad para recibir los servicios públicos. Por consumo de agua y prediales, muchos hermosillenses deben más de 100 millones de pesos; y de prediales, el Gobierno del Estado debe casi 90 millones de pesos. Tiene razón la alcaldesa en exigir a todos los deudores que paguen sus obligaciones, para que todos los ciudadanos podamos acceder a los servicios a que tenemos derecho. Sin embargo, otra fuente de ingresos para el Municipio, sería, ¿por qué no?, que si los ciudadanos cumplimos con el pago de placas, pues que también los propietarios de 400 mil carros ilegales que circulan en Sonora; 300 mil en Hermosillo, paguen sus placas como lo hacemos la mayoría.
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Hace 40 años se autorizó importar sólo carros pick ups o de trabajo para los campesinos, pero esto se pervirtió por la vil corrupción y degeneró en el soez e impune contrabando de todo tipo de vehículos seminuevos, y hasta los de lujo o aún nuevos que diario vemos circulando impunemente, sin placas. En el colmo de la degeneración de la impunidad, ahora circulan carros nuevos nacionales o ¡armados aquí en México!, cuyos cínicos propietarios ricos, no pagan placas debido a que nadie, ninguna autoridad obliga a pagar a estos desvergonzados delincuentes malos ciudadanos. Esto no es justo, un delito, una verdadera una injusticia y flagrante delito que perjudica a todos y no beneficia a nadie, ni a las mismas familias de los carros chuecos debido al riesgo que implica circular fuera de las leyes de tránsito. Este mes estamos sufriendo otro terrible problema con los carros chuecos, porque en la frontera en ellos se intenta pasar a Estados Unidos a migrantes por carriles de automóviles, provocando con ello que el Gobierno estadounidense cierre varios carriles para evitar estos nuevos delitos de carros y personas ilegales. Para empresas y negocios transfronterizos, y sobre todo para nogalenses, esta es una pavorosa contingencia, una verdadera ignominia esperar 5 ó 6 horas para cruzar al otro lado. Otra gran injustica provocada por la corrupción con los carros chuecos.
Por lo tanto, es muy justo, urgente, imperativo y muy necesario que, independientemente de los interminables procesos burocráticos de los políticos demagogos que prometen legalizar los carros ilegales; ahora, es apremiante que el Municipio Libre y Soberano de Hermosillo, ejerciendo su soberanía, instrumente una estrategia de registro y pago, de un engomado o calcomanía a carros chuecos, Este es un clamor generalizado, es una reclamación, así como la alcaldesa nos exige y obliga a todos, a fin de que, en beneficio de todos; los dueños de carros chuecos también paguen y contribuyan a canalizar recursos para pavimentación. Si todos pagan placas, como es lo justo: estimamos 300 mil carros chuecos a un promedio de 500 pesos cada uno, Hermosillo captaría 150 millones de pesos por año, para modernizar en beneficio de todos, pobres y ricos, las calles por donde circulan sus carros y camiones mejorando la movilidad urbana. Para los pobres de carros chuecos, sería un cobro similar o menor de lo que ya pagan a las organizaciones pafas. Alcaldesa, ejerza su AUTORIDAD, hagamos valer nuestra soberanía; esta es una solución para dejar de sufrir por peligrosos baches y socavones, misma que de aplicarse todos apoyamos y agradeceríamos.
