/ viernes 21 de diciembre de 2018

Visión económica | Navidad 2018 e irracional economía

Primera parte

En estos días de espíritu navideño, de paz y amor, cuando algunos celebramos la Navidad con armonía y abundancia, todavía se mantienen los problemas de violencia y se agudiza la pobreza, la escasez y los asesinatos en todo el país.

Pero no sólo aquí, lamentablemente las guerras, la miseria y la violencia se presentan tanto en países pobres que padecen hambrunas como en África y el Medio Oriente, así como con las masacres de inocentes en países más ricos como en los Estados Unidos, donde a pesar de su creciente pobreza, Trump aumenta más el gasto militar.

Debido a ello es pertinente compartir algunas realidades de mucha gente pobre, que contrastan con la absurda costumbre o cultura del consumismo del derroche, y también con una multimillonaria política de armamentismo mundial. Cada vez se gasta más en armamento y mucho menos en salud, educación y nutrición. Ahora que se nos invita a compartir, debemos saber que de los más de 7 mil millones de habitantes en el mundo, casi un tercio, 2 mil millones sobreviven en la pobreza.

Para dimensionar y entender estas cifras, veamos que los mexicanos somos 155 millones, 125 aquí en el país, 29 millones en Estados Unidos, y un millón en el resto del mundo. Los sonorenses somos 2.6 millones y en Hermosillo desordenadamente vivimos un millón. O sea que 2 mil millones de pobres hambrientos en el mundo, es muchísima gente que intenta sobrevivir en su terrible situación de escasez.

Sin embargo, irracionalmente la humanidad asigna mayores recursos a las armas en lugar de disminuir la creciente y alarmante pobreza. A nivel mundial el armamentismo llega a niveles de alto riesgo para todos. En México y en muchos países la militarización de los gobiernos sigue creciendo, y la paranoica obsesión por las armas y los ejércitos aumenta los presupuestos para “seguridad o defensa” hasta rebasar un millón de millones de dólares en todo el mundo. De este monto, 300 mil millones de dólares son para aumentar el arsenal de armas nucleares, no sólo en países ricos, sino en pobres como China, India, Paquistán, Irán, etc.

Aunque usted no lo crea, a cada ser humano, 7 mil millones, hoy le tocaría una tonelada de explosivos por persona; sin embargo, según la ONU-FAO, 2 mil millones de personas en el mundo no tienen un kilogramo de cereal para comer y sobreviven con el equivalente de un dólar al día para cubrir todas sus necesidades.

Internacionalista. Maestro de Relaciones México-USA y de Negocios Internacionales en la Unison.

Correo: lugallaz51@gmail.com

Primera parte

En estos días de espíritu navideño, de paz y amor, cuando algunos celebramos la Navidad con armonía y abundancia, todavía se mantienen los problemas de violencia y se agudiza la pobreza, la escasez y los asesinatos en todo el país.

Pero no sólo aquí, lamentablemente las guerras, la miseria y la violencia se presentan tanto en países pobres que padecen hambrunas como en África y el Medio Oriente, así como con las masacres de inocentes en países más ricos como en los Estados Unidos, donde a pesar de su creciente pobreza, Trump aumenta más el gasto militar.

Debido a ello es pertinente compartir algunas realidades de mucha gente pobre, que contrastan con la absurda costumbre o cultura del consumismo del derroche, y también con una multimillonaria política de armamentismo mundial. Cada vez se gasta más en armamento y mucho menos en salud, educación y nutrición. Ahora que se nos invita a compartir, debemos saber que de los más de 7 mil millones de habitantes en el mundo, casi un tercio, 2 mil millones sobreviven en la pobreza.

Para dimensionar y entender estas cifras, veamos que los mexicanos somos 155 millones, 125 aquí en el país, 29 millones en Estados Unidos, y un millón en el resto del mundo. Los sonorenses somos 2.6 millones y en Hermosillo desordenadamente vivimos un millón. O sea que 2 mil millones de pobres hambrientos en el mundo, es muchísima gente que intenta sobrevivir en su terrible situación de escasez.

Sin embargo, irracionalmente la humanidad asigna mayores recursos a las armas en lugar de disminuir la creciente y alarmante pobreza. A nivel mundial el armamentismo llega a niveles de alto riesgo para todos. En México y en muchos países la militarización de los gobiernos sigue creciendo, y la paranoica obsesión por las armas y los ejércitos aumenta los presupuestos para “seguridad o defensa” hasta rebasar un millón de millones de dólares en todo el mundo. De este monto, 300 mil millones de dólares son para aumentar el arsenal de armas nucleares, no sólo en países ricos, sino en pobres como China, India, Paquistán, Irán, etc.

Aunque usted no lo crea, a cada ser humano, 7 mil millones, hoy le tocaría una tonelada de explosivos por persona; sin embargo, según la ONU-FAO, 2 mil millones de personas en el mundo no tienen un kilogramo de cereal para comer y sobreviven con el equivalente de un dólar al día para cubrir todas sus necesidades.

Internacionalista. Maestro de Relaciones México-USA y de Negocios Internacionales en la Unison.

Correo: lugallaz51@gmail.com