Volver a la realidad, como regresar a la escuela, trabajo y sobre todo no contar con el dinero suficiente, produce en las personas la famosa “Cuesta de Enero”.
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Aterrizar a la realidad puede resultar un acto triste y desagradable, pero la mejor solución a ello y no caer en ansiedad o angustia, es comenzar a ser una persona organizada, aseveró la psicóloga Ana Paulina Díaz.
“Se altera mucho la gente, porque ya hay mucho dinero y se nublan en cuestión del mes de diciembre, en enero aterrizan en la realidad, donde la realidad es tener que enfrentarme nuevamente a la rutina, a las deudas, a los exceso que tuvo”, mencionó.
La cuesta de enero se presenta por varios factores, pues no únicamente es por la falta de dinero, sino volver a la realidad y responsabilidades; aunque se piense que es un mes “muerto”, para el ámbito de salud no lo es.
“Para la salud no es un mes muerto porque se vienen muchos problemas, tanto físicos, emocionales y psicológico, entrar a la realidad es una negación, el no haber cumplido propósitos, en el último mes les causa una guerra, y el tener y hacer propósitos también es parte de la cuesta de enero”, explicó.
La experta señaló que esta problemática tiende a presentarse principalmente a partir de los 30 años, puesto que muchas personas a dicha edad continúan enganchados a su "yo" adolescente.
“Son a veces muy maduros porque quizás es cuando adquirimos más responsabilidad en estos meses. Incluso vemos a jóvenes en redes sociales angustiados porque no les dieron el anillo, un hijo, porque no tienen carro, o casa propia”, comentó.
Al presentarse la cuesta de enero, es importante saber que únicamente será por un determinado tiempo si así lo desea la persona, ya que una persona puede durar de tres a seis meses en adaptarse al cambio.
“Hay que voltear a ver que es una racha, que es normal, hay que estar conscientes que vienen los pagos pero para eso hay que organizarse. No hay que adelantarse, porque te puedes angustiar y eso te lleva a lo catastrófico”, finalizó.
De no poder con la “cuesta de enero”, la mejor opción es solicitar apoyo profesional para lograr la adaptación a un nuevo año.
