Aunque pareciera que enjuagar el arroz antes de prepararlo es para eliminar impurezas que pudiera tener, los investigadores del Centro de Investigación en Alimentación y Desarrollo (CIAD) advierten sobre la importancia de un correcto lavado.
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La investigadora Leticia García Rico explicó que, de acuerdo a un estudio realizado por académicos del Colegio de Ciencia y Tecnología de Alimentos de la Universidad Tecnológica de Henan, en Zhengzhou, China, lavar y remojar el arroz nos protege de consumir metales tóxicos.
Los estudiosos realizaron un experimento en el que lavaron, remojaron y cocinaron dos tipos de arroz, usando tres métodos diferentes de cocción como sartén, olla de presión y microondas.
Los análisis mostraron que el lavado redujo significativamente las concentraciones de cadmio, arsénico y plomo, además de que los tres tipos de cocción redujeron la bioaccesibilidad de estos elementos.
La académica comentó que estos hallazgos demuestran que lavar y remojar el arroz puede proteger al comensal de sobrepasar las concentraciones de estos metales que naturalmente existen en este al igual que otros alimentos, además en exceso pueden desencadenar riesgos para la salud de tipo cancerígenos y no cancerígenos para adultos, niños y niñas.
Sin embargo, apuntó que se requiere profundizar en este tipo de investigaciones con el fin de identificar las óptimas condiciones del lavado o remojo, así como de las prácticas de cocinado capaces de disminuir la concentración de metales, sin afectar los nutrientes del arroz.
También recomendó, en lo posible, utilizar agua purificada para el lavado y cocinado de los alimentos, en especial en localidades con problemas de contaminación por metales en agua.
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Por último, García Rico recordó que lavar y desinfectar las frutas y hortalizas siempre debe ser una práctica rutinaria antes de consumirlos, así como las leguminosas como el frijol, lenteja o garbanzo, ya que estas pueden contener impurezas que causan enfermedades transmitidas por alimentos del tipo gastrointestinal.