Todos tememos que pueda llegar a pasarnos algún día, la apendicitis es sin duda uno de los padecimientos más dolorosos que pueden lo cual, por lo menos, lo hace relativamente fácil de identificar antes de que pueda empeorar y poner en peligro la vida.
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Aún con esto, no muchos saben que el clásico dolor punzante en el costado es solo una de las formas en las que la apendicitis puede manifestarse, y aprender a identificar los otros síntomas puede salvarte a ti o a tus seres queridos.
Las causas de la apendicitis pueden ser variadas, se trata de un pequeño tubo de tejido cerrado ubicado en la parte baja del intestino grueso, en el costado derecho, que se inflama fuertemente al ser bloqueado por objetos externos, tumores o con las propias heces que circulan por este sistema. De no atenderse a tiempo el apéndice puede romperse y causar un absceso, llevando la infección a otros órganos.
Al principio puede manifestarse como un dolor muy intenso en la zona centro del abdomen o el costado derecho, el cual se va volviendo cada vez más intenso y agudo. Entre los síntomas que le acompañan, y que pueden delatar que se trata de apendicitis, están:
Fiebre alta
Hinchazón en el abdomen
Gases atorados en el intestino
Estreñimiento o diarrea
En algunos casos, especialmente en los casos infantiles, los pacientes pueden reportar pérdida del apetito.
La identificación de la apendicitis puede tornarse complicada cuando los síntomas se confunden con otros padecimientos, pero cualquiera de estos combinados con el dolor en el costado es una clara indicación de que se requiere atención médica inmediata, lo más importante es no esperar a que los síntomas empeoren.
Por lo regular la apendicitis se trata con una cirugía para remover completamente esta parte, que no ejerce ninguna función vital en el cuerpo y las personas pueden vivir perfectamente sin ella después de la intervención. En caso de una ruptura del apéndice y la formación de un absceso el procedimiento consiste en un drenaje del fluido del interior del cuerpo.
En el pasado, antes de las cirugías modernas, la apendicitis tenía una mortalidad superior al 50%, mientras que actualmente, gracias a la intervención temprana, esta estadística ha descendido a ser menor a 1%.