Luego de este fin de semana, que enmarca un periodo de rebrote de Covid-19 en Sonora, usuarios de redes sociales reclaman al cantante hermosillense Natanael Cano por las fiestas que, supuestamente, continúa realizando.
No ajeno a la polémica, las críticas hacia el exponente del “corrido tumbado” surgieron a raíz de una serie de videos en los que se le ve entre un gran número de personas que, sin atender las medidas de precaución a las que incluso las fiestas permitidas deben atenerse, bailan muy cerca unos de otros.
La pandemia no ha afectado a todos de igual manera, lo que ha causado una disparidad entre aquellos que siguen las recomendaciones de las autoridades de salud — quedarse en casa, usar cubrebocas, mantener la distancia — y los que prefieren vivir como antes del Covid-19, con los riesgos que esto conlleva.
En el caso de Natanael Cano, no es la primera vez que ha sido señalado durante el paso del coronavirus por el país. En julio de 2020, durante uno de los puntos altos de la pandemia en el país, el portal Univisión compartió las declaraciones del cantante que, en aquel momento, reveló haber sobrevivido al Covid-19 junto a su familia, del cual pensaba no podía enfermarse debido a su edad.
Lejos de mostrar signos de enfermedad, Cano fue criticado, y continúa siendo, por realizar fiestas y reuniones a pesar de las medidas de distanciamiento social, llegando a negar la versión de que alguna vez estuvo enfermo de Covid-19 a través de sus redes sociales.
Jóvenes como él, y como quienes aparecen en el video que circula desde este domingo, son quienes han ido ingresando con cada vez mayor frecuencia al Hospital General del Estado a causa del nuevo coronavirus, Según la secretaría de Salud en la entidad, esta población representa una parte importante de los nuevos contagios.
Siguiendo esta tendencia, Sonora se une a varias partes del país, y también del mundo, en el que la representación de los jóvenes y adultos en los contagios por covid-19 ha ido en aumento. Uno de los factores más importantes ha sido que esta población ocupa la última prioridad para acceder a la vacuna en la planeación de las autoridades de Salud.
Esta última situación, aunado a una gran movilidad sin medidas de prevención, comienza a mover el foco de la población más vulnerable a los efectos del virus de los abuelos, las personas mayores de edad ya vacunadas, a sus hijos y nietos, adultos y jóvenes que todavía no han completado, o tan siquiera iniciado, su esquema de vacunación.
Mientras tanto, quienes han optado seguir las recomendaciones de prevención continúan esperando la vacuna para volver a las pistas de baile.