La Asociación Latinoamericana de Hidrología Subterránea para el Desarrollo (Alhsud) presentó este jueves la más reciente edición de la Revista Latino-Americana de Hidrogeología.
En esta ocasión se presentaron seis artículos sobre la contingencia ambiental en Sonora durante el 2014, cuando la empresa minera Buenavista del Cobre derramó accidentalmente 40 mil metros cúbicos de sulfato de cobre acidulado en el Río Bacanuchi.
Miguel Rangel Medina, presidente de la Alhsud, señaló que se trata de una investigación que duró aproximadamente 6 meses y trata sobre el plan de acción inmediato que se realizó tras el incidente.
También sobre la aplicación de modelos de riesgo a la salud humana por exposición a metales en suelos residuales, composición de los sedimentos de la cuenca del Río Sonora, valoración del daño ambiental por el derrame, entre otros puntos.
“Otro de los trabajos es el origen de todo lo que encontramos finalmente, porque lo que encontramos no fue el derrame, lo que encontramos es una variedad muy grande de anomalías metálicas, pero que forman parte de un sistema natural mineralizado, tenemos una cuenca muy mineralizada, sino no hubiera muchísimas minas en los arroyos”, manifestó.
Las conclusión de cada uno de los investigadores involucrados es que se actuó en tiempo y forma tras el accidente, pues a los pocos días se logró neutralizar la contaminación por medio de la aplicación de cal y limpieza de los arroyos, además que las fuertes precipitaciones ayudaron para la dilución de los metales.
“No tenemos más resultado que, finalmente, para fortuna de todos, es un volumen muy pequeño para la cuenca y que la cuenca tuvo una precipitación muy importante lo cual ayudó mucho también”, aseveró.