La adopción es el medio por el cual aquellas niñas, niños y adolescentes, que por diversas causas, han terminado el vínculo con su familia biológica, tienen la oportunidad de integrarse a un ambiente armónico, protegidos por el cariño de una nueva familia.
En Sonora hay mil 60 menores de edad en los Centros de Asistencia Social, incluyendo los públicos y privados, 173 de ellos son candidatos para ser adoptados.
El Sistema Nacional del DIF menciona que en el nuevo hogar de los menores se deberá propiciar su desarrollo integral, estabilidad material y emocional, que los dote de una infancia feliz y los prepare para la vida adulta.
Asimismo, es un instrumento que busca siempre el interés superior de la niñez, es decir, la satisfacción integral de las necesidades de los infantes, así como el pleno ejercicio de todos sus derechos en un tiempo y lugar determinados.
Requisitos y tiempo de espera
En el Estado de Sonora, la Procuraduría de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes, a través de la Agencia Estatal de Adopciones, es quien brinda el servicio a los padres de familia de ingresar a una lista de espera.
Para efectuar una adopción deberán cumplir una serie de pasos como lo son acudir a una reunión de sensibilización que brindan psicólogos expertos en el tema, entregar la solicitud y los requisitos pedidos, así como estudios socioeconómicos, evaluaciones psicológicas, entre otros puntos.
El tiempo que el Sistema DIF Sonora reporta en cuanto a la duración de todo el trámite es de aproximadamente 6 meses, es decir, desde que se ingresa a la lista de espera hasta concretar la adopción del menor.
Adopciones concretadas
En lo que va de la actual administración estatal, se han autorizado un total de 128 adopciones: fueron nueve en el año 2015, en el 2016 hubieron 20, en el 2017 llegaron a 40, en el 2018 realizaron 22, mientras que en 2018 y 2019 fueron 19 y 18 respectivamente.
Pese a la pandemia por el Covid-19, que implica que los trámites en las diferentes dependencias gubernamentales tengan menor o mayor afectación en los tiempos de ejecución, el número de adopciones de este 2020 recién concluido se mantuvo similar al de los últimos años.
De acuerdo al mismo DIF estatal, hay un total de mil 60 niñas, niños y adolescentes que se encuentran en los distintos Centros de Asistencia Social, públicos y privados de toda la entidad.
Del total de menores atendidos, 351 cuentan con posibilidades de una reintegración familiar, 173 son candidatos a ser adoptados, 351 tienen necesidad de regularización de su situación jurídica y 228 son candidatos de acogimiento familiar (cuidado temporal del infante).
De igual forma, se informa que 40 niños que se encuentran en los Centros de Asistencia Social públicos del Estado asisten a clases de escuela primaria, mientras que ocho adolescentes a la secundaria y un total de seis a la preparatoria.
Familias Solidarias
Entre los motivos de alojamiento de los menores a estos centros se encuentran: la puesta a disposición por parte del Ministerio Público, la negligencia por parte de los padres o tutores, la omisión de cuidados y el maltrato físico. También está el abuso fetal, el abandono, el abuso sexual y el maltrato psicológico.
Además de la posibilidad que existe de adoptar, el Gobierno del Estado lanzó en mayo de 2019 el programa Familias Solidarias, de la mano con la organización Red Latinoamericana de Acogimiento Familiar (Relaf).
La directora de DIF Sonora, Karina Zárate Félix, indicó que tal proyecto busca hacer posible que los menores de edad que se encuentran en los centros de asistencia reciban un cuidado de manera temporal por parte de las familias que cumplan con los requisitos.
“La idea es que crezcan en un núcleo familiar, que prevalezca el derecho a vivir en familia y como dependencia responsable trabajaremos de la mano con estas familias que se acerquen a nosotros, el primer paso es tener a esas familias solidarias, a padres de familia que quieran acoger en sus familias a niñas, niños y adolescentes”, aseveró.
Wenceslao Cota Amador, procurador de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes, comentó que los periodos de acogimientos pueden variar según las circunstancias, ya que consiguen ser de corto plazo o por varios años.
“Una característica esencial del acogimiento es su temporalidad, puede haber acogimientos a corto plazo ante una situación de emergencia o de urgencia, como una catástrofe natural, enfermedades o alguna otra causa repentina, mientras se concreta la reunificación con la familia de origen, o bien, con una familia adoptiva”, explicó.
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Uno de los casos concretados de esta modalidad, se encuentra el de un bebé recién nacido, quien se unió directamente del hospital a una familia previamente evaluada y preparada para su cuidado temporal.
