Problemas de riesgos sanitarios por Covid-19, además de fallas en la distribución, unidades emergentes de cobro sólo en efectivo, entre otros fueron los que se detectaron durante la auditoría al transporte público urbano de Hermosillo.
Alfonso López Villa, vocero de Vigilantes del Transporte, explicó que los resultados que les arrojó la auditoría, principalmente es que al ser un espacio cerrado y pequeño, donde se aglomera gente, el virus se puede esparcir fácilmente, máxime que el 100% de las unidades que verificaron tenían las ventanas cerradas.
Indicó que la saturación de unidades sí es un problema y foco rojo para la propagación del SARS-Cov-2, sin embargo, es mayor el de viajar con todas las ventanas cerradas, sin que circule el aire como lo recomiendan las autoridades sanitarias internacionales.
Ya son más de seis años que se hace esta auditoría, pero en esta ocasión por cuestiones de la pandemia se añadió la revisión de otras variables como los camiones con más pasajeros de lo que recomienda la Secretaría de Salud, por lo que se dividió en tres secciones, de cero a 15 usuarios, 16 a 30, 31 o más.
“Esos tres parámetros los estuvimos revisando, el 73% de los camiones andan circulando de cero a 15 usuarios, el 20% de 16 a 30, y el 7% arriba de 31; de tal manera que en el transcurso del día por la cantidad de vueltas que dan, podemos encontrarnos hasta 90 camiones en estas condiciones. Eso nos dice que sí tenemos ahí un problema, pero no es tan grave como otro parámetro que revisamos por cuestiones de pandemia que es el de las ventanas”, explicó.
El protocolo sanitario contra el Covid-19 dice que las unidades deben de circular con las ventanas abiertas, recordó, sin embargo, del 100% de las unidades verificadas todas circulan con las ventanas cerradas, a pesar de ser espacios cerrados con más de 10 personas.
“Esa parte del protocolo nos preocupa más que inclusive los camiones llenos, porque estamos hablando de un 7% y sí es preocupante que se esté circulando en los camiones cerrados, muchos usuarios dicen que es porque está haciendo mucho frío, pero cuando hace mucho calor, también se prende la refrigeración, es una decisión muy difícil y no sabemos quién la vaya a tomar”, apuntó.
Continúan problemas de circulación conjunta
Asimismo, el problema de los camiones que pasan juntos continúa, lo cual provoca que haya un mayor tiempo de espera para otros usuarios que no alcanzaron las unidades que van a la par, lo cual no han podido arreglar las empresas nuevas, la anterior o el Gobierno.
“Esa es la práctica que no la han eliminado y eso es cuestión de la misma empresa, en aquel caso era Sictuhsa, después el Gobierno del Estado lo agarró seis, siete meses y ahora con las empresas nuevas sigue habiendo ese problema y con unidades pegadas se pierde el beneficio de meter más camiones”, subrayó.
Las frecuencias continúan de manera irregular, lo cual son detalles que las mismas empresas pueden mejorar en su operación diaria.
La peor y la mejor línea
En cuanto a cuál es la línea que más problemas presentó en la revisión que hicieron, aseguró que se trata de la número 11, en las dos rutas, Altares y Nuevo Hermosillo, la cual tiene frecuencias muy irregulares.
“La línea 11 que era una más o menos regular, en la auditoría nos salió que traía problemas, con hasta hora y media (de espera) nos arrojó ese problema la 11 Altares y la 11 Nuevo Hermosillo también trae problemas de regularidad, es la que detectamos con más problemas”, aseveró.
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Las más regulares aún son las líneas 17 Exprés y la 4, esto gracias a la cantidad de camiones que circulan en estas rutas que trasladan un volumen importante de pasajeros.
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