Fue imposible para el Centro de Atención Canina y Felina (CACF) capturar a la jauría de perros que atacaron y dieron muerte a dos hombres en la costa de Hermosillo.
El titular de la instancia, Jorge Alberto Zepeda Arredondo, indicó que eran entre 10 y 12 perros los de la manada, pero que una vez que veían a los trabajadores se refugiaban en el monte.
“Vamos a implementar otro operativo y vamos a llevar jaulas para poder atraparlos, platicamos con los vaqueros ahí cerca y dicen que siempre están al lado de una laguna de oxidación de las granjas porcícolas que están por ahí”, expuso.
De acuerdo con el testimonio de los pobladores de la zona, los animales permanecen distribuidos durante el transcurso del día, siendo la mañana cuando pasan todos juntos.
La presencia de estos perros representa un riesgo para los niños que llegan de las escuelas, pues los habitantes temen que algunos de ellos podrían atacarlos.