El peregrinar de la familia Villafuerte, una tradición desde 1960

En el 2017 fue el año en el que Martín retomó la tradición donde participaron alrededor de 80 personas y en el 2018 acudieron 100 fieles

Nancy Álvarez 

  · jueves 12 de diciembre de 2019

Mike Acosta | El Sol de Hermosillo


La familia Villafuerte tiene una fuerte tradición, cada año se reúnen en la colonia Cañada de los Negros para adorar a la Virgen de Guadalupe.

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Todo inició en 1960, cuando Manuel Villafuerte, devoto a la Madre de los Mexicanos, vivía con su familia en ese punto de la ciudad y al ser muy fuerte su creencia decidió pintar la imagen religiosa en una piedra ubicada en la punta del cerro.

Después de su muerte, esta celebración siguió con las otras generaciones. Martin Villafuerte, su hijo, retomó la tradición y en el 2017 convocó a sus familiares, vecinos, amigos y público en general para asistir a la peregrinación de la Guadalupana.

“La gente comenzó a emigrar buscando un progreso y nos fuimos saliendo del barrio y la demás gente ya no participaba de igual forma, era menos la gente, la última vez que se hizo fue en 1971 y se dejó de hacer porque no había convocatoria, la imagen se abandonó y se despintó”, manifestó Martín.

Cada vez que Martín visitaba su antigua colonia, recordaba con añoranza su niñez y los momentos que pasaron con su familia y vecinos en la colonia por eso decidió reunirlos otra vez.

“Cuando llegaba a venir me daba mucha nostalgia y siempre pensaba en que iba a hacer algo para retomarlo algún día y afortunadamente se dio la ocasión y lo estamos haciendo, también se está fomentando cada vez más nuestra cultura religiosa y espero que siga por más años”, señaló.

En el 2017 fue el año en el que Martín retomó la tradición donde participaron alrededor de 80 personas y en el 2018 acudieron 100 fieles.

“Inicié pintando la Virgen solamente y ahí se quedó, después me aproveché de las redes sociales para integrarme en los grupos de la Cañada y así se fue corriendo la voz en la familia y vecinos, y yo no creía que iba a participar tanta gente”, añadió.

Al principio, como parte de la ceremonia se velaba a la Virgen de Guadalupe, cantaban y se quedaban en el lugar hasta el amanecer. Hoy en día, debido a la inseguridad que hay en la ciudad decidieron realizarlo por la tarde para que más gente asista y no corran peligro.

Al terminar el recorrido se oficia una misa y se concluye con platillo preparado por la familia.

El pasado 7 de diciembre fue la tercera edición de la tradicional peregrinación de los Villafuerte donde participaron alrededor de 120 personas.

Martín compartió que es una gran satisfacción reunir a su familia, amigos, vecinos y que aumente la participación de los ciudadanos para que más gente se una a la celebración.

“Hemos tenido muy buena aceptación de parte de todos los habitantes, hay bastante afluencia, queremos que cuando uno ya no esté siga la tradición con los habitantes del barrio, es una buena manera de convivir y fomentar la cultura religiosa”, comentó.

Para finalizar, señaló que el próximo año se hará un grupo por redes sociales para hacer la invitación a que más gente se una a la tradicional peregrinación de la Virgen de Guadalupe.