Las ruinas de la Guardería ABC fue punto de encuentro de varios hermosillenses envueltos en consternación, pues el día de hoy se cumplen 10 años de haber ocurrido lo inesperado: el incendio que arrebató la vida de 49 niños y la salud de muchos otros.
Niños sobrevivientes que hoy están por entrar a la adolescencia, volvieron junto con sus padres a la entrada principal de la guardería, donde solo permanece el recuerdo de cada uno de las víctimas y pancartas en las que se exige justicia.
El Arzobispo de Hermosillo, Ruy Rendón Leal, oficializó una misa para recordar a los pequeños, a la cual también asistieron personas que sienten empatía por la lucha de obtención de justicia y algunas autoridades.
En su mensaje, Rendón Leal invitó a los familiares a que busquen a Dios para que encuentren fortaleza y dejó en manos de las autoridades lo que tanto aclama el corazón de la sociedad: la justicia.
“Debemos de pedirle a Dios fortaleza porque solamente con fortaleza y serenidad vamos a ver las cosas con mayor claridad y vamos sin duda alguna a lograr las metas que nos vamos proponiendo.
Yo le pido a Dios por ustedes y por aquellas personas que tienen en sus manos todos estos procesos jurídicos para que en un día no muy lejano, puedan obtener esos logros que el corazón de cada uno de ustedes anhela profundamente”, expresó.
La niña sobreviviente de la tragedia, Alexia Galindo Ortiz, de 11 años de edad, interpretó con mucha pasión la canción “La Gloria de Dios”, mientras el pase de lista se realizaba seguido del grito “no debió morir.
Alexia que para el otro ciclo escolar ya entrará a la secundaria, contó que a una década de la tragedia, en ocasiones sueña con sus compañeritos.
“Son Muy bonitos, pero siguen siendo bebes y como que platican conmigo, que mal que no haya justicia porque mis compañeros no debieron morir, ellos no tuvieron la culpa”, externó.
Asimismo agradeció a Dios por el don que tiene para el canto.“Muy feliz porque Dios me dio ese don que tengo, siento muchas alegría y felicidad por mis compañeros que están en la gloria de Dios”, agregó.
Posteriormente se soltaron 49 globos blancos, los cuales lentamente se dirigieron al cielo hermosillense.