Las leyes mexicanas ya contemplaban el hecho de que no puede haber playas privadas en ninguna zona costera del país, por lo que hay sanciones establecidas para ello, pero también permisos para utilizarlas sin afectar el medio ambiente.
Información proporcionada por la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) indica que en teoría no debía haber playas privadas, pero la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) expide permisos y concesiones en casos específicos.
También hay quienes cercan las áreas playeras, con lo que obstruyen el libre paso a los paseantes, lo cual es una infracción y debe ser denunciado ante la propia Profepa.
¿Cuál fue la reforma a la ley?
Esto viene a colación, porque el pasado 29 de septiembre el Senado de la República aprobó una reforma a la Ley General de Bienes Nacionales, cuyo dictamen estableció que serán revocadas las concesiones y permisos para quienes reinciden en prohibir u obstaculizar el acceso a cualquier playa mexicana.
Pero esto no quiere decir que ya no se expidan concesiones o permisos, sino que estará prohibido obstaculizar el paso y se impondrá una multa de 3 mil a 12 mil unidades de medida de actualización (UMA), es decir de 260 mil 640 pesos a un millón 042 mil 560 pesos, al 2020.
Esto entrará en vigor una vez que las reformas sean publicadas en el Boletín Oficial de la Federación; y esto incluye a hoteles, restaurantes, domicilios particulares o cualquier otra actividad como renta de carpas.
Qué se puede y qué no en las playas
Semarnat es quien tiene este registro de concesiones de la Zona Federal Marítimo Terrestre (Zofemat), quienes autorizan trabajar en esas áreas, como por ejemplo a pescadores, renta de palapas o carpas, entre otras actividades.
También para construcción, siempre y cuando no afecte el libre tránsito de las playas y no afecte el medio ambiente, además de que deben de pagar una cantidad anual para ello.
Para entender mejor esto último, se debe de diferenciar el término playa, según Profepa, que es hasta donde llega la marca de la última marea, mientras que la Zofemat es la franja de 20 metros después de la marca de la última marea, es decir, las construcciones que están frente a la playa.
No existe el concepto de privadas, no legalmente
Aunque las reformas que se aprobaron señalan que prohibirán las playas privadas, la realidad es que para ocupar o cerrarla actualmente tampoco hay permiso o concesión en playas; pero para la Zofemat sí.
Eso es parte de lo que se vigila y que Profepa pide a las personas denuncien ante sus inspectores, pues algunas construcciones que dañan las playas son realizadas bajo el cobijo de que son zonas alejadas y que la gente que se percata no denuncia.
El último caso en Bahía de Kino
En el municipio de Hermosillo el caso más emblemático y próximo se descubrió en el 2017, cuando gracias a denuncias ciudadanas se dio a conocer que la construcción de una procesadora de productos del mar, de capital chino, que opera bajo el nombre de Mariscos Kansan, era construida sobre la playa, llegando incluso al mar.
Esto viola las leyes ambientales, pues removieron el suelo de la playa y el marino, retirando sedimentos importantes para las especies que habitan en la zona de Kino Viejo, donde se erguía la construcción en un predio al costado del mar.
Mariscos Kansan perdieron el litigio contra la delegación de Profepa Sonora por lo que les fue impuesta la multa más alta que se aplicaba en estos casos, que en el 2017 fue de alrededor de medio millón de pesos, además de que les fue ordenada la demolición del inmueble.
Sin embargo, está empresa de alguna manera logró obtener un amparo y el caso se encuentra detenido en los juzgados, sin que haya reparación total del daño causado.
Operativos en vacaciones Playa en Regla
Durante las temporadas vacacionales la Profepa realiza operativos llamados Playa en Regla, en los principales destinos, en los que se verifica que todo esté en orden y que cuenten con los permisos de Semarnat, en caso contrario se levantan actas y se retiran ocupantes, incluso vendedores ambulantes.
Este 2020, como es sabido por el tema de la pandemia y contingencia sanitaria por Covid-19, no fue posible realizar varias actividades de distintos rubros y este operativo fue uno de ellos.
Según Profepa, en general son pocas las denuncias que reciben formalmente o por vías institucionales, sino más bien por redes sociales, pero sin información suficiente para retomarlas.