Desde pequeño el otorrinolaringólogo de la Clínica el Noroeste, Luis Arturo Arellano Romero, quería ser médico, pues veía su ejemplo a seguir, un médico pediatra militar de la ciudad, Óscar Olea Shraidt, quien atendía a él y sus hermanos.
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“Me quedó como un recuerdo y a los 18 años seguía con ese entusiasmo y con el gusto, en mi familia materna y paterna no había ningún médico o que me haya influido directamente”, expresó.
A finales del año 1975 hizo sus exámenes en la Universidad Autónoma de México, (UNAM), misma donde fue aceptado para estudiar la noble carrera de Medicina, por lo que actualmente lleva aproximadamente 30 años ejerciendo.
“Hago mi servicio social en una clínica rural del pueblo de Banámichi en las orillas del Río Sonora, a mis 23 años, después me regreso a la Ciudad de México y hago mi especialidad de Otorrinología, la elegí porque desde que era médico interno me gustaba entrar a ala cirugías con un doctor, todo lo que era micro cirugía, me gustaba tener la oftalmología porque se operaba hasta con microscopio”, señaló.
Recordó que su estancia en la universidad fue la mejor, donde aprendió bastante, pues pasó por gran cantidad de experiencias bonitas como estudiante, sobre todo por haber regresado a su ciudad natal, Hermosillo.
“Empiezo a trabajar como médico general, médico escolar en el Internado Cruz Gálvez, después fui médico general en el hospital Ignacio Chávez del Isssteson, estoy tres años en la Ciudad de México y regreso en mayo de 1989 y tengo la fortuna de estar en el hospital Issste donde trabajé durante 29 años”, contó.
Incluso el año pasado se jubiló de dicho hospital, pero continuó en la Clínica del Noroeste, donde tiene como médico desde 1994.
Para Luis Arturo de 62 años, su pasatiempo favorito es leer y hacer investigaciones históricas, pues si no fuera médico le hubiera gustado haber estudiado Historia, incluso fue presidente de la Sociedad Sonorense de Historia.
“Tengo muchos hobbies, sigo investigando cosas históricas de medicina, escribí muchos años del béisbol y mi equipo favorito es Medias Rojas de Boston y Naranjeros, cuando hice mi servicio social fui manager del equipo de los Halcones de Banámichi”, agregó.
Incluso también desea retomar sus clases de pintura y es que el experto considera que los médicos deben estar en constante actualización y aprender cada día distintas cosas.
“Tenemos que abrirnos a muchos campos, me gusta mucho viajar, tengo dos hijos, uno se dedica a la medicina administrativa y está ejerciendo como director en una clínica de la Ciudad de México y el menor hace dos meses se fue a hacer una maestría en Administración”, precisó.
Finalmente le hace un llamado a los estudiantes de medicina para que no se den por vencidos, pues considera que es la mejor carrera.
“Han iniciado una de las más bellas de la humanidad y las más bonitas de las ciencias como es la carrera de medicina, los primeros dos años serán de mucho trabajo y estudio porque es mucha teoría”, dijo.
Cabe mencionar que hoy, 23 de Octubre del 2019 se celebra el Día del Médico en México, por lo que se le hace una atenta felicitación al doctor, Luis Arturo Arellano Romero.
