Alrededor de 400 licencias para la venta de bebidas alcohólicas están en riesgo de ser canceladas en toda la entidad debido a adeudos (con el Estado) de más de tres años por concepto de revalidación anual.
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Zaira Fernández Morales, titular de la Dirección General de Bebidas Alcohólicas, explicó que es un proceso que normalmente se realiza a finales de las administraciones estatales, pues es cuando acumulan años de deudas.
“La historia dice que generalmente se hace una cancelación de esta naturaleza en cada sexenio, que generalmente es el quinto año o séptimo año, estamos haciendo ese proceso de cancelación de licencias que deben más de tres años al gobierno del Estado”, explicó.
Fernández detalló que en su mayoría se trata de licencias para la venta de bebidas embriagantes que actualmente no se encuentran en funcionamiento, por lo que se les busca para saber si las reactivarán o se les retira.
“En este caso traemos alrededor de 400 licencias, pero están en ese proceso de que el permisionario se acerque con nosotros en el tiempo baje tiene establecido por ley, para ver si va a quererla reactivar o no”, argumentó.
Manifestó que es el titular del Poder Ejecutivo del estado quien debe hacer el proceso mediante un decreto, en este caso la gobernadora Claudia Pavlovich Arellano, quien lo publica en el Boletín Oficial del Estado.
La funcionaria puntualizó que se trata todo un protocolo, que generalmente termina en tres actas que se hacen en ciertos periodos, por inoperantes o inexistentes para pasarla a una notificación a los permisionarios o dueño de la licencia.
