El patrimonio histórico antropológico que se encuentra en las áreas de embalse de la presa Los Pilares, ubicada en la comunidad de San Bernardo, Municipio de Álamos, no está en riesgo, pero se trabajará en prevención.
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Jorge Taddei Bringas, representante del Gobierno Federal en el Estado, aseguró que la información que han informado los técnicos especialistas en la materia, es que, al no ser una presa de almacenamiento, no hay riesgo para ese patrimonio histórico sonorense.
"Esto significa que en buen momento la presa estará vacía para poder recibir, esporádicamente, la presa recibirá algún buen nivel de agua, pero se desfogará inmediatamente; de tal manera que al parecer no hay ningún riego para estas señales que hay en la parte alta de la presa", expuso.
Manifestó que dialogaron con personal del Instituto Nacional de Antropología e Historia, pues es un patrimonio arqueológico protegido por la Ley Federal de Zonas Arqueológicas, Artísticos e Históricos; pero al final se determinó hacer mesas de trabajo.
"Se hizo un diálogo con ellos y se les mostró, aun cuando se va a hacer una mesa para platicar claramente al respecto; que la presa Pilares no es de almacenamiento, es para evitar las inundaciones en el Sur de Sonora", enfatizó.
Habrá colaboración para proteger sitios arqueológicos: INAH
Por su parte el INAH, quien suspendió las operaciones de Los Pilares por alrededor de seis horas, un día previo a su inauguración por el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador; anunció que firmarán un convenio de colaboración para hacer trabajo de protección, con el Gobierno del Estado.
En la zona del embalse de la presa se ubican alrededor de 44 sitios arqueológicos, de los cuales 34 están catalogados como áreas habitacionales prehispánicas y 10 tienen representaciones gráficas rupestres.
Dicho convenio permitirá que inicien trabajos de conservación de campo y protección en la zona, a partir del mes de octubre, esto en con asesoría técnica de de especialistas de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) que apoyarán a los arqueólogos del INAH y personal del Gobierno estarlo, quienes trabajarán a través de la Comisión Estatal del Agua (CEA).
