Por ganarle al jefe… Más vale que le vayan midiendo “el agua a los camotes”, como dice el propio presidente Andrés Manuel López Obrador, y no quieran ganarle al jefe, porque luego se enterarán que la venganza china es muy dura. Y si no me creen es cosa de ver lo que le pasó al gobernador de Durango, José Rosas Aispuro, quien tuvo la osadía de barrer con Morena en las elecciones de junio y hacer quedar muy mal la imagen presidencial.
Pues en venganza, el presidente López Obrador le hizo una encuesta a mano alzada con los acarreados que llevan a los mítines presidenciales y todos aprobaron que se cancelará el proyecto emblema del Gobernador, que es el Metrobús de Gómez Palacio a Lerdo, que según esto iba ya en un 80% o sea que además de dejar sin servicio de transporte sustentable a la región, habrá pérdidas por cientos de millones de pesos. Pero ya saben que el pueblo sabio nunca se equivoca. Y lo más-importante-no-lo-olviden, el jefe menos.
Se mordió la oreja… Seguramente que el Gobernador de Durango se esperaba la clásica moreniza que se da en las giras presidenciales, que al ser nombrado en los eventos se le venga el mundo encima con rechiflas y mentadas de madres. Pero bueno, eso ya es un clásico, y no les queda más que apechugar. Pero lo que seguramente no esperaba que en su propia casa el invitado se tomara la atribución de cancelarle el proyecto más importante de su sexenio con la farsa de una votación chaira a mano alzada. Lo menos que Rosas Aispuro se mordió una oreja de puro coraje y lo peor, tener que apechugar y poner cara de “hombre, Presidente, qué buena broma”. Seguros para sus adentros dijo hijodesumalmomento… Pero nomás. Ahorita tiene que recomponer todo, volver a picar piedra y puertas. Tragarse el berrinche, hacer cabildeo para ver si lo perdonan y luego rescatar lo que se pueda del naufragio. Andicabrón por ganarle el patrón.
No midió enemigos… Una de las reglas de la política es saber con quién te vas a pelear. No tiene caso agarrar un pleito con alguien más poderoso, a menos que tengas aliados que te defiendan. De lo contrario, puedes pasarla mal. Bueno, pues parece que el problema que vive en este momento la paisana Ana Gabriela Guevara se debe precisamente a que no supo medir con quién se iba a enfrentar cuando anunció voz en cuello que quiere ser Gobernadora de Sonora. Se olvidó que en esto hay jerarquías y primero tiene mano el jefe político, en este caso Alfonso Durazo. Por algo Celida López declinó sus aspiraciones y dijo que apoya con todo al de Bavispe. Pero bueno, a lo mejor Ana Gabriela consideró que su cercanía con el presidente Andrés Manuel López Obrador era suficiente, pero ya ven, no le alcanzaron las fichas. Y ahora, está en la mira de los asesinos y es poco probable que termine sin marcas en la piel.
Cuatro auditorías… A estas alturas ya le quedó claro que molestó y alborotó una bitachera muy brava. La revista Proceso, que en este sexenio ya no se manda sola, se le tiró a la yugular al grado de que sus reporteros forzaron al propio presidente López Obrador a que anunciara auditorías para Conade. Pero no es una, sino cuatro con sus respectivas investigaciones. Y lo más grave, que le podrían quitar el manto protector de la Presidencia y entonces Ana Gabriela va a quedar expuesta a todo tipo de tiros. Además, Proceso está recibiendo con singular alegría todos los documentos filtrados para darle en la torre a la sonorense.
Amarran navajas… Pero otro error que parece que toca la puerta es lograr que Ana Gabriela se enojara y perdiera el control de sus actos y dichos. Porque según los analistas de aquí y de acullá, parece que la directora de la Conade anda sentida con el Presidente porque no le dio un voto de confianza ante estas acusaciones, por el contrario le siguió el rollo al reportero que traía la pregunta sembrada. Además, dicen que a esto hay que sumar que es de las pocas funcionarias que no ha sido invitada a las mañaneras. Como sea, parece que sus enemigos consiguieron su propósito de amarrar navajas con el Presidente que se enfriarán sus relaciones. De ser cierto, esto hace que el sueño guajiro de la gubernatura se acabe y por otro lado, ponga en riesgo su trabajo. Pero en la grilla esto no se acaba hasta que se acaba. O cuando lo dice el patrón.
Se salieron… Ahora sí que se les pasó la mano con la barbeada con eso crear una nueva organización de carros chuecos que se llamará Amlopafa. Háganme el recontrafavor. Obvio, la intención es atraer a todos los pobres chairos que tienen carros chuecos pensando que van a quedar en familia. Pero esto no lo hacen nomás de barbas y por buenas ondas. Van a cobrar 400 por registro, más otros gastos y si no tienen seguro ahí se los venden. Como sea, esto hizo que los de Morena pusieran el grito en el cielo al ver que alguien quiere aprovechar caballo ensillado. Y de entrada el propio Jacobo Mendoza se deslindó de esta organización Amlopafa y dice que no tienen nada que ver. Ya si algún chairo se siente a gusto trayendo la placa con estas iniciales, pues será muy su gusto. Caray, pero qué largos los batos.
Panorama completo… Esta semana estuvo como invitado del Grupo Contrapunto Diez de periodistas el abogado laboral Vicente Ríos Ulloa, en su calidad de presidente de la Academia de Derecho Procesal del Trabajo, capítulo Sonora. Hizo una amplia exposición sobre la reforma laboral y el ambiente sindical que se vive en la entidad. Se nota que tiene dominio completo del tema y la materia, por algo el despacho Ríos Barrientos es uno de los más importantes del estado en materia laboral. Por cierto, hoy estará como moderador del Foro Laboral que será en Los Lagos y que no deben perderse.
Pero bueno, ya es sabadito y por lo mismo vamos a darle, y recuerden lo que decía el Picudo Salcido, el que pega primero, de plano es el más abusado. Sale.
