/ jueves 17 de junio de 2021

El faro | Primero deleita, luego instruye

5 formas prácticas y auténticas de ser un mejor jefe

Hoy en la nueva normalidad, muchas de las personas se encuentran aún con un alto grado de incertidumbre. A pesar de que la situación económica mejora y cada vez hay más ciudadanos vacunados, falta bastante para recuperarnos del gran estancamiento que sufrieron la mayoría de los negocios. Y con la dualidad del trabajo remoto y presencial vigente en gran número de empleos, la situación sigue siendo desgastante para la mayoría y esperamos con ansias un poco de estabilidad. Aunado a esto, si te toca trabajar con un equipo de colaboradores y superiores; nefastos, insensibles y poco profesionales, la situación se agrava.

Las personas tienen emociones, por supuesto, y uno como líder y jefe debe ser auténtico y compartirlas, pero hay un límite. El nivel y control de las emociones en un empleador puede hacer la gran diferencia para su equipo de trabajo y la eficiencia en las metas laborales.

Como todo en la vida, el secreto del éxito es el sistema. No se requiere de grandes cambios estructurales en el comportamiento…sólo con algunos pequeños ajustes para marcan esa diferencia. Sin embargo, la clave es ser auténtico y genuino en cualquier método o táctica de liderazgo que intentes utilizar.

Ser genuino en tus esfuerzos por inspirar, es liderazgo real, mientras que ser falso en ellos es manipulación, y la gente puede sentir la diferencia.

#1. Expresa aprecio genuino

No todos los empleados necesitan o esperan una palmada en la espalda, pero eso no significa que no sea agradable recibir una cuando esté justificado.

Un estudio encontró que la “falta de aprecio” es una frustración principal en el lugar de trabajo. El 40% de los empleados dice que el reconocimiento de un trabajo bien hecho no es una prioridad para los líderes. Sabemos que se espera un trabajo bien hecho, pero eso no significa que no se deba apreciar el cumplimiento de una expectativa.

Encuentra tiempo hoy para compartirlo ya que la mayoría de tú gente quiere escucharlo.

# 2. Administra tus emociones

Tu estado emocional se transmite a tu gente, lo quieras o no. El contagio emocional es un fenómeno existente y el ámbito laboral no es la excepción.

La alta volatilidad emocional es parte de los seremos humanos, líderes incluidos.

Una demostración de control y calma es mucho más inspiradora que tomar cada noticia que llega a tu escritorio como si fuera algo de vida o muerte.

"Cuando un hombre es presa de sus emociones, no es su propio amo".
- Baruch Spinoza

# 3. Practica el entusiasmo

El entusiasmo es uno de los rasgos de liderazgo que a menudo no escuchamos por ahí. Cuando un líder muestra un entusiasmo genuino por lo que le pide a la gente que haga, demuestra que se preocupa y, a su vez, inspira a otros a preocuparse, es decir, ¿por qué debería importarle a un empleado si al jefe le vale?

Sin embargo, el entusiasmo falso puede ser fácil de detectar. Trata de encontrar un entusiasmo genuino por lo que haces, o si eso es imposible, encuentra entusiasmo en cómo lo haces.

# 4. Date tiempo para conocer

La gente es muy interesante, si se toma el tiempo para hacerles preguntas y escuchar con atención, especialmente a tus empleados.

Cuando estás realmente interesado o realmente te gusta alguien, ellos pueden sentirlo. Cuando sienten que les agradas, les agradas más.

A esto se le llama reciprocidad de atracción . Este fenómeno dice que la gente tiende a gustarle a la gente que le gusta. Esta es una verdad humana común y fácil de emplear como jefe.

Todos tienen algo en ellos que es agradable e interesante. Tu trabajo es detectarlo. Cuando lo haces, la gente se siente mejor contigo.

# 5. Aprende a escuchar

Escuchar parece estar entre los 5 primeros lugares en todas las listas sobre relaciones humanas y liderazgo. Pero también es algo con lo que muchas personas tienen dificultades, incluidos los jefes.

Escuchar atentamente es una de las mejores formas de demostrarle a alguien que realmente te preocupas por lo que tiene que decir. Y preocuparse por lo que tienen que decir es preocuparse por ellos.

"Los líderes que no escuchen eventualmente se verán rodeados de personas que no tienen nada que decir". -Andy Stanley

No olvides siempre ser congruente con lo que piensas, sientes, dices y haces, ese también es otro secreto para una comunicación exitosa.



5 formas prácticas y auténticas de ser un mejor jefe

Hoy en la nueva normalidad, muchas de las personas se encuentran aún con un alto grado de incertidumbre. A pesar de que la situación económica mejora y cada vez hay más ciudadanos vacunados, falta bastante para recuperarnos del gran estancamiento que sufrieron la mayoría de los negocios. Y con la dualidad del trabajo remoto y presencial vigente en gran número de empleos, la situación sigue siendo desgastante para la mayoría y esperamos con ansias un poco de estabilidad. Aunado a esto, si te toca trabajar con un equipo de colaboradores y superiores; nefastos, insensibles y poco profesionales, la situación se agrava.

Las personas tienen emociones, por supuesto, y uno como líder y jefe debe ser auténtico y compartirlas, pero hay un límite. El nivel y control de las emociones en un empleador puede hacer la gran diferencia para su equipo de trabajo y la eficiencia en las metas laborales.

Como todo en la vida, el secreto del éxito es el sistema. No se requiere de grandes cambios estructurales en el comportamiento…sólo con algunos pequeños ajustes para marcan esa diferencia. Sin embargo, la clave es ser auténtico y genuino en cualquier método o táctica de liderazgo que intentes utilizar.

Ser genuino en tus esfuerzos por inspirar, es liderazgo real, mientras que ser falso en ellos es manipulación, y la gente puede sentir la diferencia.

#1. Expresa aprecio genuino

No todos los empleados necesitan o esperan una palmada en la espalda, pero eso no significa que no sea agradable recibir una cuando esté justificado.

Un estudio encontró que la “falta de aprecio” es una frustración principal en el lugar de trabajo. El 40% de los empleados dice que el reconocimiento de un trabajo bien hecho no es una prioridad para los líderes. Sabemos que se espera un trabajo bien hecho, pero eso no significa que no se deba apreciar el cumplimiento de una expectativa.

Encuentra tiempo hoy para compartirlo ya que la mayoría de tú gente quiere escucharlo.

# 2. Administra tus emociones

Tu estado emocional se transmite a tu gente, lo quieras o no. El contagio emocional es un fenómeno existente y el ámbito laboral no es la excepción.

La alta volatilidad emocional es parte de los seremos humanos, líderes incluidos.

Una demostración de control y calma es mucho más inspiradora que tomar cada noticia que llega a tu escritorio como si fuera algo de vida o muerte.

"Cuando un hombre es presa de sus emociones, no es su propio amo".
- Baruch Spinoza

# 3. Practica el entusiasmo

El entusiasmo es uno de los rasgos de liderazgo que a menudo no escuchamos por ahí. Cuando un líder muestra un entusiasmo genuino por lo que le pide a la gente que haga, demuestra que se preocupa y, a su vez, inspira a otros a preocuparse, es decir, ¿por qué debería importarle a un empleado si al jefe le vale?

Sin embargo, el entusiasmo falso puede ser fácil de detectar. Trata de encontrar un entusiasmo genuino por lo que haces, o si eso es imposible, encuentra entusiasmo en cómo lo haces.

# 4. Date tiempo para conocer

La gente es muy interesante, si se toma el tiempo para hacerles preguntas y escuchar con atención, especialmente a tus empleados.

Cuando estás realmente interesado o realmente te gusta alguien, ellos pueden sentirlo. Cuando sienten que les agradas, les agradas más.

A esto se le llama reciprocidad de atracción . Este fenómeno dice que la gente tiende a gustarle a la gente que le gusta. Esta es una verdad humana común y fácil de emplear como jefe.

Todos tienen algo en ellos que es agradable e interesante. Tu trabajo es detectarlo. Cuando lo haces, la gente se siente mejor contigo.

# 5. Aprende a escuchar

Escuchar parece estar entre los 5 primeros lugares en todas las listas sobre relaciones humanas y liderazgo. Pero también es algo con lo que muchas personas tienen dificultades, incluidos los jefes.

Escuchar atentamente es una de las mejores formas de demostrarle a alguien que realmente te preocupas por lo que tiene que decir. Y preocuparse por lo que tienen que decir es preocuparse por ellos.

"Los líderes que no escuchen eventualmente se verán rodeados de personas que no tienen nada que decir". -Andy Stanley

No olvides siempre ser congruente con lo que piensas, sientes, dices y haces, ese también es otro secreto para una comunicación exitosa.