La Orquesta Filarmónica de Sonora se presentó en concierto, ofreciendo un show con canciones mexicanas en forma de celebración por septiembre, el mes de las fiestas patrias.
El evento inició con el Angelus de Miguel Bernal, el cual es un rito devocional que se observa en memoria de la Encarnación, es complejo de descifrar, ya que la música del compositor mexicano se marca dos puntos de vista el nacionalismo y la religiosidad.
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Asimismo continuaron con las piezas de el maestro Sonorense Arturo Márquez, las cuales eran el Danzón #2 y el #3, notas musicales icónicas, y llenas de sensualidad musical, que han dado la vuelta al mundo
Después siguió Juan Pablo Moncayo con esa calma de elegancia, que cuenta una historia dura y trágica a su forma, narrando las desventuras de un campesino que se enfrenta a la naturaleza, entre otras más composiciones.
El director de la Banda de música Héctor Acosta lleva la batuta con su reconocida maestría en lo que hace, la orquesta capta todos los diferentes sentimientos y formas de las canciones.
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El concierto finalizó con otra composición del maestro alamense Arturo Márquez, que lleva por nombre “La marcha Sonora”, la cual hace referencia a la fuerza y orgullo de ser sonorense, con sus desiertos, sierra y gente franca, así terminando la noche tradicional.
La agrupación transmitió la magia de la composición de los distintos artistas y autores de las canciones, teniendo un lleno total en el Teatro de la Ciudad del Sol en la Casa de la Cultura.
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