Realizar deporte o alguna actividad física puede llegar a ser complejo si no se encuentra un sitio adecuado donde poder hacerla; sin embargo, no es común el que se tomen sitios o lugares con tintes históricos para ello.
En este caso, Hermosillo cuenta con una carrera muy característica, el “Reto de la Campana”, la cual cuenta con un formato de inclinación y se realiza en uno de los iconos de la capital sonorense, el Cerro de la Campana.
“En Estados Unidos se utilizan mucho las carreras de este tipo de formatos, que son un poquito más recreativas, algo altruista, con causas; manejan formatos de carreras pedestres algo fuera de lo tradicional”.
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“El formato de carrera de inclinación, es uno que no se había experimentado mucho en Sonora, de hecho, la carrera del ‘Reto de la Campana’ es la única de este tipo en el Estado y muy probablemente sea la única de inclinación con formato de carrera pedestre en el noroeste de la República Mexicana”, señaló Abel López, organizador de dicho evento para El Sol de Hermosillo.
Respecto al poder, no sólo usar un modelo inusual, sino el utilizar un sitio tan representativo de la ciudad, comentó, “pensamos ‘que mejor que hacerla en el icono de la ciudad’, qué ruta nos da la inclinación necesaria para una carrera de este tipo”.
“Las carreras con este formato piden por lo menos un kilómetro, aquí estamos hablando de un kilómetro con 400 metros de pura inclinación y lo completamos para que sean los 2 km, saliendo del Palacio Municipal, al mirador del Cerro de la Campana”, explicó.
En dicha carrera, se manejan tres modalidades: “Reto Cantado”, donde puedes retar a cualquier compañero o amigo o familiar, solamente a ver quién llega primero; “Reto contra ti mismo”, que es sobre todo para corredores formales, y es ante tu tiempo, que se establece entre los 9 a los 15 minutos (para terminar la carrera); el otro es “Reto al Icono”, que es ir a tu propio ritmo.
“Esa es la conformación que tenemos, pero sin dejar de ser carrera pedestre y se premia a los tres más rápidos, es decir, a los ganadores absolutos en cada rama, independientemente del reto que hayan establecido y generalmente se llevan algún premio especial”.
“No se experimenta normalmente en México y creemos que ofreciendo este tipo de alternativas en el icono que es el Cerro de la Campana, que nos da perfectamente las características de estas carreras y qué mejor que hacerlo allí”, aclaró López, quien es parte de la organización de muchas carreras en todo el Estado.
Iconos y su importancia
Hasta el momento, se han realizado cuatro ediciones, llegando alcanzar hasta los 400 participantes, aunque la de este año, fueron 100 inscritos de manera voluntaria, pues no se pidió ningún tipo de pago de inscripción.
Respecto al significado de utilizar iconos para el uso de actividad física o eventos de este tipo, expresó que es una fuente de corredores nuevos.
“Es tan significativo, que gente que sólo camina en parques, al momento de que ven este ofrecimiento, va y lo hace, retándose a ellos mismos y mucha gente nos comenta que van familias completas, con carriolas, con niños”.
“Es un despertar también para los nuevos corredores, porque es gente que no necesariamente está integrada en algún grupo o entrena de manera formal, entonces, cuando ven este tipo de formatos y que será en el Cerro de la Campana, se abocan y le dan la oportunidad a que personas que van empezando a tener una activación física, a través del trote o del running”, expuso López.
“Se empiezan a integrar a esta gran familia y empiezan a participar en otras carreras, pero con un propósito de un estilo de vida saludable, no en el sentido estricto de querer competir”, agregó.
Además, añadió que los corredores han disfrutado el poder participar en este tipo de eventos, “ellos nos comentan que, siendo el icono más querido, que generalmente lo suben en carro, no trotando o caminando, es un espectáculo maravilloso”.
“Si en el carro vas viendo la vista que es tan hermosa de nuestro Hermosillo, ahora imagínate trotando, además de tener una activación física, vas observando lo esplendorosa que es nuestra ciudad”.
De igual manera, habló respecto a si este tipo de carreras se pueden realizar en otras partes de la ciudad, pues incluso han tenido corredores ya probados o profesionales, ya sea de manera recreativa o compañerismo con el gremio.
“Lo que pasa con las carreras pedestres tradicionales, tratan de pasar cerca de los iconos de las ciudades, para que obviamente resalten, pero en el caso más concreto del Cerro de la Campana, que es totalmente de inclinación, se aprovecha su ruta para poder tener este tipo de formatos verticales”.
Incluso, aclaró que podrían tomarse otro tipo de carreras, aunque no sean de formato pedestre o tradicional.
“Por ejemplo, nosotros no hemos formalizado una carrera de sacos y se pueden hacer este tipo de eventos en recintos que son cerrados o en puntos que son iconos de la ciudad”.
“Aquí lo que tenemos que buscar es la vocación del lugar que queremos detonar, que sean lugares importantes para el municipio o el Estado y formar los conceptos de carreras que puedan establecerse allí”.
Mencionó también la posibilidad de llegar a formalizar carreras en burros, como se hace en otras partes del centro del país.
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“Aquí el asunto es detonar la activación física, porque la carrera en burros lleva algo e involucra a las familias, pero eso sería, buscar la naturaleza del lugar y establecer el formato”, finalizó.
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