Febrero está relacionado con el amor. El Día de San Valentín despierta recuerdos, anécdotas y mueve a la gente a buscar algo especial con pareja o amigos.
Es por ello que hoy te presentamos la historia de un personaje muy conocido en Sonora y que se relaciona con un sitio de interés turístico en la Ciudad de México.
Seguramente has visto o escuchado sobre el Kiosco Morisco, que está en el sector de Santa María La Ribera, en la Ciudad de México. Entonces también, quizás sepas que el pueblo sierreno de Arivechi, en Sonora, tiene una réplica.
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El original Kiosco Morisco tiene alrededor de 140 años; el de Sonora es mucho más joven, tal vez tiene cerca de 44 años, como ha sucedido con otros aspectos culturales y educativos, la réplica que está en Arivechi, fue idea del doctor Samuel Ocaña García, quien fue gobernador de Sonora entre 1979 y 1985, y alcalde de este municipio en dos ocasiones.
Ocaña nació el 7 de septiembre de 1931 en Arivechi, antes Arivetz, que significa Lugar de Calaveras. Fue fundado por misioneros jesuitas en el siglo XVII y su nombre tiene raíces ópatas.
Contacto del doctor Ocaña con el Kiosco Morisco
Parte de la formación profesional y política del exgobernador, el único que camina por las calles de Hermosillo departiendo con tanta gente que lo recuerda (por cierto), se desarrolló en la Ciudad de México, otrora Distrito Federal; en el sector donde está el kiosco que reprodujo en su pueblo.
Al ser gobernador de Sonora tuvo la oportunidad de aterrizar proyectos que siguen vigentes, uno de ellos es el kiosco que identifica a Arivechi.
El Kiosco Morisco está en la Alcaldía Cuauhtémoc, su sitio en Internet señala que fue diseñado en 1884 por el ingeniero José Ramón Ibarrola para montarlo en el Pabellón de México en la Exposición Universal de Nueva Orleans. Su estructura está hecha completamente de hierro.
Kiosco Morisco en Arivechi
En los años 80 el entonces gobernador Ocaña proyectó hacer una réplica, en menor escala, de esta estructura que tardó cinco años en concretarse. En el sitio en Facebook de Visit Sonora señala que es obra de Silvano Cruz Ortiz.
Al inicio de esta entrega, señalábamos que el kiosco de Arivechi es un símbolo de amor, y sí, Ocaña García lo hizo para recordar el sitio donde transcurrió sus estudios en la Escuela de Medicina Rural del Instituto Politécnico Nacional, IPN, y a su primera esposa, que había fallecido.
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La cronista de Santa María La Ribera, autora de un libro sobre este emblemático sitio, Berta Tello, tuvo oportunidad de viajar a Arivechi y de conocer la réplica del famoso kiosco que está enriquecido con vitrales de la flora, fauna y paisajes sonorenses.
¿Conoces alguno de los dos kioscos? ¿Qué te han parecido?
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