Hugo Fernando Barrón es Controlador de Tránsito Aéreo y Piloto Aviador. Su interés por volar inició desde muy pequeño, ya que su familia se ha dedicado a la profesión durante muchos años.
Realizó el curso de entrenamiento en Monterrey, Nuevo León, su función principal es mantener el orden y la seguridad de las aeronaves.
“Lo más difícil es saber que tienes a tu resguardo la vida de muchas personas, un controlador de tráfico aéreo tiene más vidas a su cargo en un turno de trabajo que un médico en toda su vida, tener esa presión de pensar en todas tus acciones o movimientos que puedes hacer dentro del trabajo tienen que ser perfectamente coordinados y tienen que ser sujetos a cero errores”, comentó Fernando.
Asegura que la profesión le ha dado la oportunidad de recorrer muchos lugares y conocer otros países, vuela aeronaves medianas a pequeñas y realiza más viajes regionales.
“Para mí la aviación es un medio muy bonito, me ofrece muchas satisfacciones tanto en lo personal como en lo profesional, es una profesión que es diferente a otra, te ofrece algo totalmente diferente a lo común”, afirmó Barrón.
Su gusto por los deportes extremos, las aventuras y la adrenalina fueron parte de fundamental en la vida de Hugo para dedicarse de lleno a la profesión.
“Lo más difícil es saber que es algo totalmente diferente a lo que se hace normalmente, requiere de habilidades matemáticas, física, pero principalmente es una habilidad que trae uno mismo”, comentó el piloto.
No hay límite de edad en la profesión, siempre y cuando se cumpla con el examen psicofísico. El requisito principal es tener la preparatoria terminada, posteriormente se hace un examen de medicina preventiva o medicina de aviación que determina si la persona se encuentra saludable para iniciar con la carrera.
“Si la vista y audición están reducidas hasta ciertos niveles de lo que establece Secretaría, ya no puedes ser piloto, otro de los casos es no tener problemas del corazón”, agregó.
La pasión por su trabajo ha llevado a Fernando a muchos lugares como también lo ha motivado para realizar distintas actividades sobre su trabajo, actualmente es instructor en el Centro de Vuelo Computarizado y de la Academia del Aire, escuelas que existen en Hermosillo y preparan a pilotos y oficiales de operaciones.
“Cualquier joven interesado y domine el idioma inglés puede concursar para ser controlador aéreo, la escuela que está en la Ciudad de México es de gobierno y si logras entrar te becan el resto de la profesión” finalizó.
A pesar de que la carrera es muy poco conocida, actualmente se necesitan cientos de controladores en todo el mundo.