Hace algunos días, la capital sonorense tuvo la oportunidad de recibir a una leyenda del rock mexicano, un icono de los años noventa.
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Se trató nada más y nada menos que de Alejandro Marcovich, quien formó parte de la legendaria banda Caifanes y el encargado de crear esos arreglos que hasta el día de hoy, son el valor agregado que diferencia a la banda mexicana del resto de las demás.
Marcovich marcó un antes y un después para Caifanes, banda que dejó, ya que las cosas no terminaron bien entre el guitarrista de origen argentino y el proyecto que era encabezado por Saúl Hernández.
¿Por qué visitó Marcovich Hermosillo?
Alejandro Marcovich comenzó diversos proyectos como solista al terminar su relación laboral con Caifanes, pero lo que lo trajo a Hermosillo después de más de 20 años sin visitar la capital de Sonora, fue la promoción de su propia historia plasmada en su libro “Vida y música de Alejandro Marcovich. Memorias de un genio del rock en español”.
En este proyecto, plasma desde su huida de Argentina ante los golpes de Estado que sucedían en ese país a mediados de los años setenta, su llegada a México, su interés por la música, su llegada y salida de Caifanes, así como diversos acontecimientos de su vida privada.
El guitarrista, quien con orgullo se considera mexicano, declaró a El Sol de Hermosillo que debido a su agenda de trabajo es complicado poder conocer de una forma más completa los sitios que visita, pero cuando viene a Sonora es de regla para él comprar chiltepín y admirar su naturaleza.
“Es muy difícil poder visitar como uno quisiera todos estos lugares de México, pero lamentablemente no se puede por la agenda que tiene uno encima, sin embargo, algo que puedo destacar de Sonora es poder ver lo hermoso que son los sahuaros, el desierto, porque en ninguna otra parte del país encuentras esto, sólo aquí. Otra cosa que me encanta es el chiltepín, cuando estoy de paso por aquí procuro comprar un frasco enorme lleno de chile”, expresó Marcovich.
Añadió que las playas de Sonora son únicas y poder compartir experiencias con los seris son otro atractivo que destaca del Estado.
“Tuve la oportunidad de visitar la costa de Hermosillo hace algún tiempo y pude presenciar los rituales de los seris y todas esas experiencias que ofrecen, me pareció algo único e increíble. Estos detalles es lo que caracteriza que Sonora sea un Estado lleno de riquezas”, mencionó.
Por otro lado, una pregunta que dejó pensativo al maestro Marcovich, fue con quién le hizo falta colaborar con tantos años de trayectoria musical y después de mencionar a algunos con los que tuvo la oportunidad de trabajar en el pasado, señaló a dos personajes clásicos.
“Es una pregunta para la que uno no viene preparado, tuve la oportunidad de trabajar con grandes personajes, pero sin duda me hubiera gustado participar con Germán Valdés, mejor conocido como Tin Tán y con el maestro del tango argentino, Astor Piazzolla.
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Por último, Alejandro Marcovich cerró su visita a Hermosillo con un concierto en un conocido café de la ciudad, para así continuar con la promoción de su libro en el resto del país.
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