POR GLADIS BALBASTRO
La obra de teatro No seré feliz pero tengomarido deViviana Gómez Thorpe se presentó en la Hermosillo, Sonora, bajola dirección de Claudia Ríos y la producción de Rubén Lara. Laencargada de sazonar cada uno de los diálogos fue Sylvia Pasquel,quien es la intérprete del monólogo que está cumpliendo tresaños de arrancar carcajadas en las butacas.
Fueron dos funciones las que sellevaron a cabo en el Auditorio Cívico del Estado, la primera alas 7:00 de la tarde y a la última a las 9:30 de la noche. Lasfilas para entrar al recinto eran largas, encabezadasprincipalmente por mujeres adultas y por parejas que deseaban pasarun rato agradable.
Respetuosamente cada persona ocupósu lugar para disfrutar de la puesta, al iniciar el públicorecibió con aplausos a la actriz para después guardar silencio yesperar que entrará a escena.
La historia cuenta la vida de Jorgey Vivi, un matrimonio que lleva 25 años de casados y pone aldescubierto muchas de las intimidades que se viven en el vidaconyugal, con un diálogo rápido, sencillo y sobre todo divertidova narrando los problemas por los que pasa una mujer casada desdela boda, la comunicación de pareja, el sexo, las fiestas y lasinfidelidades.
Pasquel no perdió la oportunidad deinteractuar con el público haciéndolos participes con imprudentespreguntas intimas y sexuales. Los asistentes, aunque un pocoapenados, contestaban a Sylvia.
La actriz combinó perfectamente lasanécdotas del personaje y las contextualizó con La Ciudad delSol, algo que los espectadores agradecen con susovaciones.
Al finalizar el montaje, Sylviaagradeció a toda la producción encargada de que se lleve a cabola presentación, especialmente a los que han sido participes delos tres años de vida del monólogo.
“Gracias Hermosillo por abrirmelas puertas de su corazón”, puntualizó la actriz despidiéndosecon un beso hacia al público. .
