Con la llegada del fin de año, los delitos como el robo de identidad están a la orden del día, por lo que el Buró de Crédito ha emprendido una campaña de prevención difundiendo consejos prácticos y esenciales para no caer en fraudes, mismos que se han vuelto cada vez más sofisticados tras la pandemia por Covid-19 y el uso de herramientas digitales.
Wolfgang Erhard Varela, vocero de la agencia, explicó que, con la temporada de rebajas y la llegada de aguinaldos por la época decembrinas, es posible verse afectado por los defraudadores que se esconden tras llamativas ofertas para extraer información y datos personales que más tarde podrían utilizar para solicitar un crédito a nombre de la víctima.
“Los consejos para que no te saquen un crédito son relativamente sencillos, en el mundo físico, no lleves tu credencial de elector contigo, si la pierdes o si te la roban, quién sabe quién la va a encontrar; o no la dejes en una recepción, porque no sabes si el recepcionista está coludido con defraudadores, supongamos que sí, entonces podría sacarle una fotografía a la credencial”, mencionó.
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Con esta información, se conoce el domicilio, identidad y firma de la víctima, por lo que ese conocimiento puede llevarlos a localizar su vivienda y del buzón o de la basura extraer comprobantes de domicilio y estados de cuenta para solicitar un crédito a su nombre. Si es un criminal sofisticado, agregó, hay posibilidades de que la credencial sea alterada o reproducida, lo que vuelve más riesgoso portarla, por las razones anteriormente mencionadas, de manera que es recomendable también solicitar que los recibos de servicios y estados de cuenta lleguen a través de medios digitales, como el correo electrónico.
“Cuando recibas cosas como compras por internet, todas estas etiquetas las vas a techar, recortar o romper, porque ese también es oro molido para los delincuentes. Por otro lado, con la pandemia la gente se empezó a quedar en casa, por lo que ya no había tantas credenciales circulando afuera, entonces el delincuente tuvo que invertir en creación de páginas piratas y perfiles falsos en redes sociales que se adaptan a las necesidades de las personas”, dijo.
Un ejemplo de ello es la cantidad de páginas en internet que son prácticamente un clon de los sitios web de instituciones, comercios o dependencias gubernamentales, donde se extraen datos personales y los de la tarjeta de crédito o débito, asestando un doble golpe a la víctima, por un lado, el robo de identidad y los cargos no reconocidos.
“La gente no se entera rápidamente que tiene un problema de robo de identidad porque normalmente pasan 90 días después del hecho, cuando ya se generó un crédito, cuando una empresa crediticia se propicia porque no le están cumpliendo el pago”, comentó.
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Por último, destacó que es importante mantearse alerta y no acceder a sitios sospechosos en donde se soliciten datos personales, además de consultar con instituciones encaradas de atender este tipo de situaciones, como el propio Buró de Crédito o la Condusef (Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros).
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