Debido a la pandemia por Covid-19 y la obligatoriedad del uso de cubrebocas por parte de las autoridades, se ha incrementado el uso irracional de este artículo, aseguró el doctor Armando Haro Encinas.

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De acuerdo con el profesor-investigador del Centro de Estudios en Salud y Sociedad de El Colegio de Sonora, es necesario que extremen mayor precaución y utilicen este protector quienes están al cuidado de una persona vulnerable o quienes trabajan en lugares donde no es posible mantener una sana distancia.

“No lo recomendaría para traerlo todo el día, exceptuando la gente que está trabajando en los servicios de salud que naturalmente ahí sí se recomienda, yo creo que hay que diferenciar el riesgo. Eso sería muy importante en términos prácticos”, expuso.

El cubrebocas es una medida de salud pública a nivel global que disminuye el riesgo de contagio; sin embargo, se ha generado especulación por su uso, pues solo tiene efectividad si se utiliza de manera adecuada.

Haro Encinas comentó que mucha gente utiliza el cubrebocas sin necesidad, como cuando van encerrados en sus automóviles; es innecesario pues el mismo aliento empapa el protector y lo vuelve reservorio para virus.

El investigador agregó que es necesario dar a conocer medidas complementarias al uso de cubrebocas, como la de no permitir demasiada gente en espacios cerrados. No obstante consideró que el esfuerzo que se ha hecho hasta el momento es correcto