EEl Ayuntamiento de Hermosillo deberá comprobar mediante un juicio ante la Junta Local de Conciliación y Arbitraje que las 300 plazas sindicales que busca eliminar puedan efectivamente suprimirse.
La alcaldesa Célida López Cárdenas indicó que esta iniciativa está fundamentada en el hecho de que hay dependencias que no requieren tanto personal, así mismo hay numerosos trabajadores que ni siquiera se presentan a laborar.
“Buscamos ahorrar 300 millones de pesos con el despido de 600 funcionarios, 300 de los cuales son agremiados y queremos una resolución”, expuso.
A lo largo de los años se ha contratado a personal que no hace sino engrosar la nómina del Ayuntamiento, por lo que se llevará a cabo esta revisión judicial para demostrar que hay plazas que no se trabajan.
De acuerdo con la edil, este grupo de trabajadores es adicional a los 130 que ya fueron retirados y los 170 que se busca despedir, además se espera que en los próximos días se haga el trámite ante la Junta de Conciliación y Arbitraje.